Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Bhagavad-gītā 13.2
Kṛṣṇa es el supremo, nosotros somos subordinados
Melbourne, 5 abril 1972
idaṁ śarīraṁ kaunteya
kṣetram ity
abhidhīyate
etad yo vetti taṁ prāhuḥ
kṣetra-jñaḥ iti tad-vidaḥ
[Bg. 13.2]
Estamos hablando sobre
este cuerpo y sobre el propietario del cuerpo. Es como esta habitación y quien
ocupa la habitación. Porque todos estamos ocupando esta habitación ahora, pero
eso no significa que esta habitación y yo somos idénticos. Traten de entender
este punto. La habitación es materia, pero nosotros somos entidades vivientes.
Si simplemente tratan de entender que hay dos cosas visibles: una es la materia
y la otra es la fuerza viviente... Es muy fácil, simplemente se necesita un
poco de inteligencia. ¿Qué es lo que vemos en este mundo material? Vemos algo
material y algo espiritual. Material significa lo que no tiene sensibilidad o
que no tiene poder para moverse y espiritual significa que tiene sensibilidad y
que tiene poder para moverse. Esa es la diferencia entre lo material y lo
espiritual y si simplemente intentamos entender nuestro cuerpo, eso es
meditación. Meditación significa entender lo que es este cuerpo y lo que soy yo
y si conocen estas cosas.
Kṣetra significa
campo. Tal como un labrador, un agricultor al que se le ha dado un tramo de
tierra y lo cultiva y produce granos o algunos vegetales o algún comestible y
según su capacidad produce algo y tienen beneficios con ello. Del mismo modo,
este cuerpo es el campo y yo soy, o ustedes son, quienes ocupamos este cuerpo,
somos los labradores. Este cuerpo nos lo da la naturaleza y yo soy un alma
espiritual. Así como deseo... Así como alguien puede poseer una tierra muy
valiosa, otro puede poseer otra no tan valiosa, ordinaria, y otro puede poseer
un campo de tercera clase, del mismo modo, a nosotros, las entidades vivientes,
se nos concede un cierto tipo de cuerpo para trabajar con él y disfrutar o
sufrir las acciones resultantes.
Nosotros somos partes
y porciones de Dios y así como nosotros somos entidades vivientes del mismo
modo, Kṛṣṇa o Dios también es un ser viviente. Pero Él es Supremo y nosotros
somos subordinados. Dios es grande y nosotros estamos por debajo de Él. Así
como en una familia el padre es el líder, y la siguiente en importancia es la
madre y nosotros somos los hijos y estamos subordinados al padre y a la madre.
El padre gana y la madre distribuye y nosotros comemos y vivimos. Traten de
entenderlo de esta manera. Dios es el padre supremo y esta naturaleza material
es la madre. El padre... Así como el padre inyecta la semilla de la entidad
viviente dentro del vientre de la madre, del mismo modo, Dios inyecta a la
entidad viviente en este mundo material y estas se manifiestan bajo diferentes
formas con un cuerpo material. Esas variedades de cuerpos materiales son de
8.400.000 especies. Así como obtenemos de acuerdo... Yathā yoni yathā bījam. Así como aquí obtenemos la vida de acuerdo
con el semen del padre y la secreción de la madre, el cuerpo y la situación...
Alguien es muy inteligente, y alguien no es tan inteligente, alguien es muy
rico, alguien es pobre. Alguien es de clase media, alguien es un animal,
alguien es un árbol, alguien es un insecto, alguien es un ser acuático, hay
variedades de vida. No piensen que los animales o las otras entidades vivientes
distintas a los seres humanos no tienen alma, no. Ese es un concepto erróneo.
Ellos tienen alma, ¿cómo pueden decir que no tienen alma? Ellos tienen los
mismos síntomas de vida.
Los síntomas de vida
son, que nacen en una determinada fecha, y después crecen, permanecen, producen
algunos sub-productos, luego se deterioran y después desaparecen. Pueden
estudiar a cualquier ser vivo. Tanto si estudian un árbol o estudian un cuerpo
humano o el cuerpo de un animal o el cuerpo de un semidiós, cualquier cuerpo
que estudien, hay una determinada fecha de nacimiento, para todo el mundo, una
determinada fecha de nacimiento, y después hay una cierta duración de vida.
Alguien vive por un período de diez años, alguien vive un año. Alguien vive
seis horas, cinco horas, hay muchas bacterias que viven cinco horas, seis horas
o incluso por menos tiempo, y hay entidades vivientes como Brahmā, cuya
duración de vida es de millones y millones de años.
Hay muchas variedades
de vida y no tenemos información. Hay muchas universidades, muchas
instituciones educativas, pero no pueden decir con exactitud cuántas variedades
de vida existen. No lo pueden decir, porque su educación no es perfecta. Ellos
no pueden decirlo, pero nosotros podemos ver que existen muchas variedades de
vida y que todas ellas son entidades vivientes. Pero si consultan la literatura
védica, encontrarán el número exacto. Así como en la literatura védica
encontrarán, jalajā nava-lakṣāṇi [Padma
Purāṇa]: “En el agua hay 900.000 cuerpos diferentes de seres acuáticos. No creo
que exista ningún biólogo o botánico que pueda decir cuántas formas de vida
existen en el agua exactamente, pero aquí pueden encontrar la información en
números exactos, jalajā nava-lakṣāṇi:
existen 900.000 formas de seres acuáticos, de entidades vivientes en el agua.
Nosotros tenemos información por la literatura védica de que hay un pez que se
llama timiṅgila. Timiṅgila. Timi significa.. Timi
también es otro pez, ese es el nombre sánscrito. El nombre en inglés es ballena
y es muy, muy grande, como una pequeña casa. Pero hay otro pez que se llama timiṅgila y estos peces timiṅgila pueden tragar a las ballenas
de un bocado. (Risas). Son peces tan grandes. Existen estas informaciones y por
lo tanto traten de entender la perfección del conocimiento que existe en los Vedas. Y del mismo modo, la información
correcta esta ahí, sthāvarā lakṣa-viṁśati.
Sthāvarāḥ significa las entidades
vivientes que no se pueden mover. Eso significa los árboles, las plantas y así.
No se pueden mover. Aquí al lado de la pared de esta casa hay un árbol que ha
crecido. Ahí lo ven. Ese árbol ni siquiera está en la jungla, ha crecido en un
espacio pequeño rodeado de casas por todos los lados y está solo. Ahí ven qué
vida tan condenada. Otros árboles, por lo menos están en la jungla en la
sociedad de los árboles. (Risas) Pero este árbol está solo. Tenemos que considerar
lo condenado que está ese árbol. La vida de árbol es una vida condenada
porque... Ustedes son seres humanos y están sentados aquí y si lo desean pueden
moverse inmediatamente, pero el árbol no se puede mover. “¡Quédate de pie ahí!”.
¿Por la orden de quién? ¿Por la orden de quién? Por la orden de Dios: Tú debes
estar de pie. No lo tomen, quiero decir, a la ligera, es algo muy serio. Según
el cálculo védico, este árbol que ha crecido aquí, esa entidad viviente alguna
vez fue el propietario o el inquilino de esta casa y él desarrolló tanto apego
que ahora no puede irse de la casa y por eso ha recibido este cuerpo de árbol:
está bien, vive aquí y quédate ahí.
A veces nos volvemos
fantasmas. Si nos apegamos demasiado no podemos irnos. Por eso un apartamento
muy opulento, una vida opulenta, no es muy buena para el avance espiritual,
porque desarrollamos demasiado apego. Mi Guru Mahārāja solía aconsejarnos que:
es mejor vivir en una casa alquilada que poseer una casa propia. ¿Por qué?
Porque si poseemos nuestra propia casa estaremos más apegados. Porque el
programa de la vida es jñāna-vairāgya,
conocimiento y renunciación. Debemos tener conocimiento suficiente para
entender nuestra posición constitucional como entidades vivientes y debemos
desarrollar desapego, vairāgya,
porque el apego a veces me lleva a volverme un árbol, a volverme un ratón, a
volverme una serpiente en la misma casa, el apego. Después de todo, pueden
decorar su casa. Pueden comprar una buena casa y decorarla muy bien, pero
tendrán que dejarla, no pueden vivir ahí de forma permanente. Eso no es
posible. Y pueden hacer su país muy bello, tener una ciudad muy bonita, muy
decorada o su casa, su apartamento, su mujer, sus hijos, muy bien decorados,
pero no le será permitido permanecer. No pensamos que: ¿por qué se nos obliga a
irnos? Eso no lo pensamos, pero esa es la realidad. Estoy viviendo muy
cómodamente con mi sociedad, familia, “sociedad, amistad y amor, otorgados de
forma divina sobre el hombre”, hay una poesía así. Eso está bien, es tan bueno,
es tan placentero, pero llega un día que, “por favor salga” y se acabó y no
pueden protestar. No pueden decir que: he trabajado muy duro, yo he hecho este
país, mi familia, mi casa tan bien. ¿Por qué tengo que irme? No, deben irse. “¡Oh
déjame quedarme por algunos días más!”. No, ni siquiera un segundo más, tienen
que salir. No consideramos todos estos puntos y simplemente nos apegamos. “¡Oh!,
este es mi país, es mi familia, es mi tierra, estos son mis parientes, esto
es...”. Tantos “este es mi, mi, mi, mi, mi”. Pero si es suyo ¿por qué son
obligados a dejar todas esas cosas? ¿Cuál es la respuesta? ¿Eh? Y no hay
certeza.
Supongan que están
construyendo una casa muy buena, un apartamento muy bueno. No hay ninguna
garantía de que van a ser capaces de disfrutar esta vida familiar y la casa y
todo. No para siempre, de eso no hay duda. Ni siquiera saben cuántos años le
será permitido hacerlo. En cualquier momento pueden ser expulsados, en
cualquier momento. Así que esto es inteligencia, esto es inteligencia. Cuando
un hombre comienza a investigar sobre este punto: ¿por qué se me obliga a dejar
mi cómoda posición? Puede que ahora sea americano o australiano, una vida muy
buena, con coches muy buenos, carreteras, todo, pero ¿por qué se me obliga a
tener que irme inmediatamente?
Este es el problema de
la vida, janma-mṛtyu-jarā-vyādhi-duḥkha-doṣānudarśanam
[Bg. 13.9]. El Bhagavad-gītā dice que puede que piensen
que son muy felices en esta condición material, puede que lo piensen, pero eso
se llama māyā. En verdad no es felicidad…
estoy trabajando muy duro día y noche para decorar mi país, mi sociedad, mi
familia, mi casa, todo. Eso no supone mucha felicidad, trabajar día y noche,
pero es māyā. Yo estoy trabajando día
y noche muy arduamente y aun así pienso que soy muy feliz. La tendencia natural
es que no queremos trabajar. Por eso tan pronto como una persona tiene algo de
dinero quiere vivir tranquilamente en un buen lugar del país, en un buen
bungalow, sin tener que trabajar, sin ninguna perturbación. Esa es nuestra tendencia
natural, estar tranquilos, pero estamos obligados a trabajar, sobre todo en
este mundo moderno, en el que hay tantas fábricas, tanto trabajo que hacer,
tanto..., y a menos que trabajemos no podemos tener las supuestas comodidades
de la vida. Y para tener las comodidades de la vida, las supuestas comodidades
de la vida estoy obligado a trabajar día y noche y pienso que soy feliz. Eso se
llama māyā. No son felices, están muy
afligidos pero piensan, “soy feliz”. Eso es māyā.
Se necesita este
conocimiento, llegar a pensar ¿por qué estoy obligado? Así como él me está
abanicando, ¿por qué? Porque me siento muy incómodo debido al calor de esta habitación.
Pero en el invierno no me gustará que me abanique, este abanico será algo incómodo.
Así que una cosa que ahora es muy cómoda, unos días después puede volverse
incómoda. Así que ¿el ventilador es cómodo o incómodo? El ventilador puede ser
cómodo en el momento actual, pero si hace frio, un frio intenso, será incómodo.
Así que ¿el ventilador es cómodo o incómodo? El ventilador no es ni cómodo ni
incómodo. Es la situación de mi cuerpo lo que lo hace cómodo o incómodo. Por lo
tanto, Kṛṣṇa dice, idaṁ śarīram. Este
cuerpo es la causa de que mi situación sea confortable o incómoda, este cuerpo.
En otro lugar, cuando Arjuna le preguntó a Kṛṣṇa: todo lo que dices es cierto,
pero aun así a veces sentimos dolores y placeres, Kṛṣṇa le respondió:
mātrā-sparśās tu kaunteya
śītoṣṇa-sukha-duḥkha-dāḥ
āgamāpāyino 'nityās
tāṁs titikṣasva bhārata
[Bg. 2.14]
Mātrā-sparśāḥ. Se debe a la piel, a
la piel. Una misma cosa a veces es cómoda y a veces incómoda conforme a la
atmósfera. Así como sentimos frío durante el invierno, no nos gusta bañarnos
porque hace mucho frío. Pero en el verano sentimos mucho calor y queremos
disfrutar bañándonos. Por lo tanto, el agua en una estación es confortable y en
otra estación es incómoda. ¿En realidad, qué es el agua? Una sustancia química,
pero la atmósfera la vuelve cómoda o incómoda.
Pero esa comodidad o
incomodidad no es algo permanente, porque el verano no continúa de forma
permanente, ni tampoco el invierno continúa de forma permanente, viene y se va.
Así que hay tantas cosas que vienen y van y por estar apegado a tantas cosas,
yo me siento cómodo o incómodo. Por eso a Arjuna se le aconsejó: tāṁs titikṣasva bhārata. Este mundo
material es así. Los sufrimientos y los placeres vienen y van, permanecen por
algún tiempo y de nuevo se van. Pero no podemos abandonar nuestro deber. Eso no
es posible.
A veces la gente dice
que ahora estamos... Así como en la India piensa muy en serio sobre este punto,
que “la India ahora es pobre así que no podemos pensar en la conciencia de Kṛṣṇa.
Los europeos y los americanos ahora están muy cómodos, así que ellos pueden
aceptar la conciencia de Kṛṣṇa”. Cuando voy a la India, a veces hablan así, que
“la India no necesita la conciencia de Kṛṣṇa porque ahora están en una posición
muy difícil en lo que respecta a la situación económica”. Pero esa no es la
realidad. El otro día, ¿dónde fue? Creo que en Sydney. Un muchacho decía... “Tenemos
que alimentar a los hambrientos que se mueren de hambre”, y cuando le pregunté “¿cuántos
hombres has visto morir de hambre?”, él no pudo responder. Él dijo, “no, yo no
lo he visto”. Aun así afirman que “la gente está muriendo de hambre, la gente
está muriendo desnuda”. Y tan pronto como pregunto, “¿cuánta gente has visto
morir de hambre o desnuda?”, la respuesta es “no, yo no lo he visto”.
En verdad, nadie está
muriendo de hambre, nadie, ni siquiera un animal, ni siquiera un pájaro muere
de hambre, ni una bestia. Dios suministra el alimento de todo el mundo. Eko bahūnāṁ vidadhāti kāmān. Él
suministra comida al elefante. En África hay millones de elefantes y pueden
comen cuarenta kilos cada vez que comen. Pero también tienen su alimento. ¿Pero
quién suministra el alimento? Nosotros no hemos preparado comida para los
elefantes, o no hemos preparado ninguna comida para la hormiga dentro de
nuestra habitación, pero ellos están siendo alimentados por las leyes de la
naturaleza, por el arreglo de Dios. Así que eso no es posible. Esta es una
falsa idea nuestra que, “moriremos de hambre si no mejoramos las condiciones
económicas”. Pueden hacerlo, pero deben saber que los alimentos ya están ahí.
En cuanto nacen ya
tiene su alimento. Por ejemplo, cuando un niño nace, una muchacha joven da a
luz, un momento antes del nacimiento del niño no había leche en su pecho, pero
en cuanto el niño nace, de inmediato hay un gran suministro de leche. Así que,
¿quién hace este arreglo? Ya hay un arreglo.
Esta es la realidad,
porque nosotros obtenemos por la información védica que, nityo nityānāṁ cetanaś cetanānām eko bahūnāṁ vidadhāti kāmān: [Kaṭha
Upaniṣad 2.2.13]. “Dios es la entidad viviente principal entre todas las
entidades vivientes. Dios es la personalidad más inteligente entre todos
nosotros y Él está suministrando las necesidades de la vida de todos”. Estos
son los mandamientos védicos. Esa es la diferencia entre Dios y nosotros.
Creo que anoche
hicieron esta pregunta: “¿Cuál es la diferencia entre Dios y nosotros?”. Yo
respondí que en este verso, que... Así como ustedes son los propietarios de su
cuerpo. Yo soy el propietario de mi cuerpo y conozco todo lo referente a mi
cuerpo pero yo no conozco lo referente a su cuerpo. Esa es la situación de la
entidad viviente. Pero Dios conoce todo lo referente a su cuerpo y conoce todo
lo referente a mi cuerpo. Ese es Dios. Esa es la diferencia entre nosotros. Eso
se explicará en el siguiente verso. Dios es omnipotente de esta manera. Yo no
sé cuáles son los sufrimientos y placeres que hay en su cuerpo. Eso no es
posible que yo pueda entenderlo, ni tampoco ustedes pueden entender los
sufrimientos y placeres que yo siento. Pero Dios lo sabe. Dios conoce los
sufrimientos y placeres de su cuerpo y conoce los sufrimientos y placeres de mi
cuerpo. Esa es la diferencia entre Dios y nosotros.
Y el problema… Aquí se
dice que “traten de entender lo que son. ¿Son este cuerpo o son algo separado
del cuerpo? Estamos separados desde el mismo comienzo del Bhagavad-gītā. La primera lección que se le da a Arjuna fue esta:
aśocyān anvaśocas tvaṁ
prajñā-vādāṁś ca bhāṣase
gatāsūn agatāsūṁś ca
nānuśocanti paṇḍitāḥ
[Bg. 2.11]
Arjuna se estaba
negando a luchar: “Cómo puedo matar a mi sobrino, a mi hermano, a mi abuelo”, y
así sucesivamente, así que Kṛṣṇa le estaba instruyendo: “Es tu deber. Como kṣatriya que eres, cuando hay batalla
debes luchar. No debes desviarte de tu deber”. Esa era la conversación que
tenía lugar. Pero Arjuna solo pensaba en términos de este cuerpo, “él es mi
abuelo, él es mi hermano, él es mi compatriota, él es mi esto”. ¿Por qué?
Porque ellos tenían una relación corporal.
Piensan que porque
aquí un muchacho es australiano, piensan que pueden tener una relación más
íntima con él y porque yo soy de la India, pueden pensar que no es posible
tener tanta intimidad. Porque hay una relación corporal. Pero Kṛṣṇa dice que “este
tipo de conocimiento no es muy inteligente”. Gatāsūn agatāsūṁś ca. Una persona que no se lamenta por este cuerpo
es, en verdad un erudito. Gatāsūn agatāsūṁś
ca nānuśocanti paṇḍitāḥ [Bg. 2.11]. Paṇḍita significa erudito,
y ya sea que este cuerpo está en una condición viva o en una condición muerta,
un paṇḍita, un erudito, alguien que
conoce las cosas tal como son, no se preocupa por este cuerpo. Realmente no se
preocupa; él no piensa muy en serio acerca de este cuerpo. Esa fue la respuesta
que le dio...
Porque después de
todo, este cuerpo es un amasijo de materia. En realidad, mientras que el alma
está ahí, se mueve. Está creciendo, o cambiando de cuerpo o se le da mucha
importancia debido a… Por eso, a menos que lleguemos a esta comprensión, que “yo
no soy este cuerpo, soy un alma espiritual”, ahaṁ brahmāsmi, hay una falta de conocimiento. Eso es lo que está
enseñando Kṛṣṇa.
Eso no es
conocimiento. Cualquiera... Así como el perro y el gato. Los perros y los gatos
no tienen idea de que son este cuerpo. Son almas también, pero tienen el cuerpo
de un perro. El gato también es un alma, pero por su karma, por su destino, por su trabajo pasado, él tiene que aceptar
ese tipo de cuerpo. Un árbol también es un alma pero por su karma pasado o por sus acciones tiene el
cuerpo de un árbol. Así que debemos entender por medio de la autoridad, tal
como dice Kṛṣṇa, que, idaṁ śarīraṁ kṣetram:
“Es un campo. Es una concesión o...”. El término exacto es campo, “campo de trabajo”
como decimos generalmente, “ en el campo de actividades”. Así que es un campo.
Se me ha dado la oportunidad de ocupar este campo y de actuar en consecuencia.
Traten de entender. Yo tengo un tipo de campo diferente, y tengo que trabajar
en él y recoger los resultados y sufrir los sufrimientos y placeres. Eso ya
está establecido. Tan pronto como tengo un tipo de cuerpo en particular, mis
dolores y placeres ya están establecidos. Ya están establecidos y no se puede hacer
ninguna mejora o degradación.
Por lo tanto, el śāstra dice que..., la literatura védica
dice que,
sukham aindriyakaṁ daityā
deha-yogena dehinām
sarvatra labhyate...
yathā duḥkham ayatnataḥ
Estas son
instrucciones muy importantes. Prahlāda Mahārāja dice... Él estaba enseñando a
sus amigos de clase -era un niño de cinco años- y dijo, “mis queridos amigos,
la felicidad material…”. La felicidad material significa el disfrute de los
sentidos. Eso es la felicidad material. Que todo el mundo es materialista, o
que está avanzado materialmente significa que tiene una mejor facilidad para
satisfacer los sentidos. Eso es la vida material. Y vida espiritual significa
que él no trata de satisfacer sus propios sentidos, sino de satisfacer los
sentidos de Dios. Eso es la vida espiritual.
Simplemente traten de
entender. Los sentidos como ya he explicado... Dios también es una entidad
viviente. Él es la entidad viviente principal, la persona más inteligente o
Dios, como quieran decirlo, y nosotros somos subordinados. Ahora, la vida
material significa... Dios... ¿Cuál es nuestra relación? Dios es el padre
supremo y todos nosotros somos Sus hijos. Y así como en la familia -el padre es
uno y los hijos son muchos, digamos que son diez- si los hijos son muy
obedientes al padre, entonces esa familia es muy buena. Es muy buena. Si todos
los hijos obedecen al padre, entonces el padre es feliz y ellos también son
felices. El padre también está muy abierto a satisfacer a los hijos. EL padre
conoce cuáles son las necesidades de los hijos y las suministra
automáticamente. Pero si los hijos se vuelven desobedientes, el padre no está
satisfecho. Puede que lo haga como un deber, darles algún alimento, pero no
está satisfecho. Y así mismo sucede en nuestra relación con Dios.
Ustedes los cristianos
lo saben porque rezan en la Iglesia, “oh padre”, así que en realidad Dios es el
padre. En el Bhagavad-gītā también se
dice, “padre”. Ahaṁ bīja-pradaḥ pitā
[Bg. 14.4]. Pitā significa padre. Ahaṁ bīja-pradaḥ pitā. En realidad Dios
suministra todo a través del agente material. Eso es todo. Así como Dios
suministra..., el padre pone el dinero en las manos de la madre y la madre lo
gasta para los hijos y del mismo modo, Dios es el Padre Supremo de todas las
entidades vivientes y la naturaleza material es el agente del Señor Supremo, y
ella produce los alimentos para ustedes.
Pueden tener un
tractor; pueden tener muy buenos arreglos para producir alimentos, maquinaria;
pero aun así, si el suelo o la tierra no produce los alimentos, su tractor o
todos los demás arreglos serán un fracaso. Porque después de todo, debemos
saber que el suministro de las cosas está en las manos de la naturaleza
material y la naturaleza material trabaja bajo la dirección de Dios. Eso se
afirma en el Bhagavad-gītā: mayādhyakṣeṇa prakṛtiḥ sūyate sa-carācaram
[Bg. 9.10]. Prakṛti significa esta naturaleza
material.
No deben pensar que la
naturaleza material es ciega. La naturaleza material tiene inteligencia y
recibe esa inteligencia del Señor Supremo y conforme a ello suministra
alimentos o cereales y todo. Porque todo lo obtienen de la tierra, el metal, o
la madera o el agua o los granos alimenticios, para cualquier cosa que
necesitan o utilizan explotan los recursos de la naturaleza material, pero la
naturaleza material es el agente de Dios. La naturaleza material es una energía
de Dios y si Dios no desea suministrarles, no importa que traigan su tractor y
cualquier cosa... Como en el desierto. El desierto no pueden hacerlo fértil
porque es un tramo de tierra en particular en el que Dios ha prohibido: “No,
aquí no se puede producir nada”. No pueden hacerlo. Si tienen algún poder para
producir, entonces ¿por qué no producen suficientes cereales y vegetales en el
desierto? Eso no es posible.
Después de todo,
tenemos que aceptar la autoridad suprema de la Personalidad de Dios. Incluso si lo estudian minuciosamente, de forma muy científica o como quieran llamarlo,
filosóficamente, tendrán que aceptar que hay un arreglo supremo, una mano
suprema sobre todo. Y esto se llama conciencia de Kṛṣṇa. La conciencia de Kṛṣṇa
significa que una persona que es consciente de Kṛṣṇa puede verlo todo. Puede
ver la mano de Dios en todo. Eso es la conciencia de Kṛṣṇa. Si ven... Una
persona consciente de Kṛṣṇa ve una flor y ve que la flor ha sido creada..., que
es la creación de Dios, Kṛṣṇa. “Oh, Kṛṣṇa es un artista tan grande que ha
creado mediante Su energía esta flor que es tan bonita, está tan bien decorada
y tiene un olor tan bueno y por eso es de Kṛṣṇa. Voy a ofrecérselo a Kṛṣṇa”.
Esto es la conciencia de Kṛṣṇa.
Si se vuelven
conscientes de Kṛṣṇa en todos los aspectos, su vida es exitosa. Eso es lo que
estamos enseñando. Se trata de un movimiento muy científico. Y esa es la
situación en realidad. Ustedes no pueden crear una flor tan fragrante y que
esté hecha de una forma tan hermosa. No está en su poder. Pero debe haber sido
hecha por alguien. No pueden decir, “por la naturaleza”. ¿Qué es la naturaleza?
Ellos dicen, las personas tontas dicen, “es la naturaleza”. Pero deben explicar
lo que es la naturaleza. La naturaleza significa la naturaleza de Dios, la
energía de Dios. Eso es la naturaleza. La energía de Dios es tan delicada y tan
sutil que no podemos ver cómo funciona, pero está actuando. La energía de Dios
está actuando ahí.
Así como hoy en día la
era electrónica, cuando tienen una televisión en su habitación, simplemente
aprietan un botón, pulsan un botón, y las imágenes aparecen inmediatamente y
además hay sonido. Pero no piensen que se ha hecho automáticamente. No. Hay un
buen cerebro detrás. Hay un buen cerebro que ha descubierto esta máquina.
Ustedes no lo saben. Ustedes simplemente aprietan el botón y la ven. Pero no
piensen que ha venido automáticamente por la naturaleza. Eso no es posible.
Ustedes no saben cómo está funcionando. Esa es su ignorancia. Pero no funciona
sin dirección. Existe una dirección. Hay un plató de televisión desde el que se
está retransmitiendo su dirección y ellos saben cómo hacer funcionar la máquina
y todo. El cerebro está funcionando, pero es tan avanzado que en su habitación
en cuanto aprietan un botón lo pueden ver todo. Pero no piensen que se hace
automáticamente. No, esa no es la realidad.
Del mismo modo, pueden
estudiar cualquier cosa. Ustedes no conocen el método por el que está
funcionando, pero existe un método. Es tan rápido y tan perfecto que incluso
sin mi conocimiento se está manifestando. Es científico. Por lo tanto, los Vedas dicen, parāsya śaktir vividhaiva śrūyate, para: “El Señor Supremo tiene
múltiples variedades de energías que están actuando”. Parāsya śaktir vividhaiva śrūyate svābhāvikī jñāna-bala-kriyā ca [Śvetāśvatara
Upaniṣad 6.8]. Na tasya kāryaṁ karaṇaṁ ca
vidyate: Él no tiene nada que hacer”.
Así como un hombre
importante. Un hombre importante está sentado en su oficina y si quiere hacer
algo, si ha venido algún hombre de negocios y hablan y él quiere firmar,
simplemente tiene que pulsar un botón y todo, el acuerdo y todo, se firma
inmediatamente. Y debido a que su administración es tan perfecta, su negocio es
tan perfecto hay muchos hombres que están trabajando en su oficina. Él
simplemente tiene que desear, pulsar un botón y todo se reali... Del mismo modo,
nosotros tenemos que entender. Estas son las descripciones védicas, parāsya śaktir vividhaiva: “El Señor
Supremo tiene múltiples variedades de energías que están actuando. Él
personalmente no tiene nada que hacer”, así como un hombre muy importante en un
establecimiento, él personalmente no tiene nada que hacer. Pero tiene muchas
energías, muchos sirvientes y secretarios, y todo se hace de inmediato, muy
rápidamente.
La información védica también
es: parāsya śaktir vividhaiva śrūyate, na
tasya kāryaṁ karaṇaṁ ca vidyate. Él no tiene nada que hacer, personalmente.
Nosotros queremos ver que “si Dios ha creado esta flor, ¿por qué no lo podemos
ver? ¿Por qué no puedo ver que Él la ha creado?”. Eso es necedad. No pueden ver
a Dios de esa manera, pero pueden verlo por Su trabajo. Así como no pueden ir a
ver el Sol, pero cuando amanece, cuando se difunde, cuando aparece la luz del Sol,
inmediatamente pueden entender que el Sol está en el cielo. El Sol siempre está
en el cielo.
Así que es necesario
tener inteligencia para entender la existencia de Dios. La información védica
dice, parāsya śaktiḥ..., na tasya kāryaṁ
karaṇaṁ ca vidyate: “Él no tiene nada que hacer”. Na tat-samaś cābhyadhikaś ca dṛśyate: “Nadie es más experto o mejor
artesano que Dios”. Adhika, sama: “Ni
igual que Él, ni más grande que Él”. Parāsya
śaktir vividhaiva śrūyate: “Sus energías están trabajando de tantas maneras”,
svābhāvikī jñāna-bala-kriyā ca, “que
parece que tiene conocimiento perfecto y una destreza perfecta”. Todo es
perfecto. Pueden verlo. Tanto una flor como cualquier cosa, los productos de la
naturaleza están hechos perfectamente.
De esta manera tienen
que desarrollar su conciencia de Dios, o la conciencia de Kṛṣṇa. Hay libros,
hay explicaciones, hay maestros y la vida humana está hecha para este
propósito, para poder entender cómo trabaja Dios, qué es Dios, incluso cuál es
Su nombre, dónde vive, cuál es nuestra relación con Él, y cómo se administran
las cosas. Estas son... Athāto brahma
jijñāsā. Por eso el Vedānta-sūtra
dice que “Esta vida está hecha simplemente para investigar sobre el Supremo”.
Eso es todo.
El animal no lo puede
hacer. Así que si simplemente perdemos nuestro tiempo como los animales... Los
animales dedican su vida simplemente a cuatro cosas; comer, dormir, aparearse y
defenderse. Eso es todo. Ellos no conocen nada más que eso. Y si la vida humana
simplemente… Por supuesto, mientras tengamos este cuerpo, tenemos que buscar
cómo comer, dormir, aparearnos y defendernos. Pero no podemos perder nuestro
tiempo simplemente en estas cuatro cosas. Hay un quinto plano, que es brahma-jijñāsā, investigar acerca del
Supremo. Y hay información, oraciones(?), quiero decir, conocimiento perfecto.
Si quieren consultar, si lo quieren aceptar, entonces su vida será perfecta.
De otra manera, si
simplemente desperdician el tiempo en las propensidades animales de la vida,
entonces de nuevo nos deslizaremos hacia la vida animal y esa es una gran
pérdida. Después de muchos, muchos nacimientos, ahora tenemos esta forma de
vida humana. Si simplemente la desperdiciamos como los gatos y los perros,
entonces de nuevo nos volveremos gatos y perros o árboles o cualquier otra
cosa. Hay tantas especies de vida y eso será un gran error, una gran pérdida.
Será un caos. Por lo tanto, nuestro movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es
para educar a la gente en la conciencia de Dios o la conciencia de Kṛṣṇa, para
que sus vidas puedan ser exitosas. Muchas gracias. (Fin)
Traducción: Nārāyaṇī devī dāsī – España
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