Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Śrīmad-Bhāgavatam 1.5.8-9
Para complacer a Kṛṣṇa, debemos tomar el riesgo y predicar
Nueva
Vṛndāvana, 19 mayo 1969
Prabhupāda: (no se entiende) ...no tienes tilaka.
Devoto: Oh. Lo lamento, Prabhupāda.
Prabhupāda:
om ajñāna-timirāndhasya jñānāñjana-śalākayā
cakṣur unmīlitaṁ yena tasmai śrī-gurave-namaḥ
śrī-caitanya-mano-'bhīṣṭaṁ sthāpitaṁ yena bhū-tale
svayaṁ rūpaḥ kadā mahyaṁ dadāti sva-padāntikam
he kṛṣṇa karuṇā-sindho dīna-bandho jagat-pate
gopeśa gopikā-kānta rādhā-kānta namo 'stu te
tapta-kāñcana-gaurāṅgi rādhe vṛndāvaneśvari
vṛṣabhānu-sute devi praṇamāmi hari-priye
Vyāsadeva
está diciendo a su maestro espiritual Nārada Muni que: “Sí, lo que me has dicho
es correcto, he tratado de entender la Verdad Absoluta a través de tu gracia, y
he tratado de explicar también la Verdad Absoluta en tantos libros, los Vedas, los Purāṇas, Upaniṣads, Vedānta-sūtra, pero aun así no soy feliz. ¿Cuál
es mi defecto, entonces?”. Y Nārada entonces contestó, nārada uvāca:
bhavatānudita-prāyaṁ
yaśo bhagavato ‘malam
yenaivāsau na tuṣyeta
manye tad darṣanaṁ khilam
[SB 1.5.8]
Lo
único que se debe hacer es satisfacer al Señor. Esa es la idea. Tasmin tuṣṭe hagat tuṣṭam. Ese es el
secreto del éxito. Si Dios, Kṛṣṇa está satisfecho, el mundo entero está satisfecho.
Este conocimiento falta en la civilización actual. Es una civilización asúrica,
una civilización demoníaca, que decir de satisfacer a Dios, niegan la
existencia de Dios. Y quieren paz y felicidad.
Recuerdo
un discurso del arzobispo de Canterbury. Decía que: “Ustedes, las personas,
quieren el reino de Dios sin Dios”. Eso es lo que hacemos -el modo de actuar de
Rāvaṇa. Lo que Rāvaṇa quería era el reino de Dios, sin Dios. Reino de Dios
significa que todo el mundo es próspero, feliz en todos los sentidos. Desde el
punto material eso es lo que se considera como el reino de Dios. Eso es lo que
quería Rāvaṇa. Él era un materialista. Su capital estaba prácticamente hecha de
oro.
Cada
casa estaba, cómo lo diría, forrada de oro. Svrṇa-laṅkā.
Svrṇa-laṅkā significa que, en aquella época, el reino de Rāvana, Ceilán, la
moderna Ceilán, estaba cubierta con oro por todas partes. Era muy rica. Muy,
muy rica. Se explica que en la habitación de Rāvana salía la Luna. Eso
significa que también en aquellos tiempos había electricidad, un tipo de
electricidad parecida. Las descripciones son muy hermosas. Era un país muy
próspero y muy rico. Y la política era que no había Dios. Civilización material
significa ese tipo de civilización, sin Dios.
Y
el resultado... ¿cuál fue el resultado? Todo acabó destruido. Todo el reino de
Rāvana, con su familia, con todo lo suyo, acabado. Māre kṛṣṇa rākhe ke rākhe kṛṣṇa māre ke. Cuando Kṛṣṇa protege a
alguien nadie puede matarlo, y cuando Kṛṣṇa mata a alguien, nadie puede
protegerlo. Y Rāmacandra, el Señor Rāmacandra, lo mató. Rāvana era un gran
devoto del señor Śiva. Generalmente los demonios son devotos de Brahmā, o de
Śiva. No les gusta Viṣṇu porque les pone restricciones. Adorar a Viṣṇu no
significa gratificación de los sentidos irrestricta. No. En otras formas de
adoración se permite. “Muy bien. Haz lo que quieras…”. Por eso, generalmente no
adopta la adoración de Viṣṇu. Vaiṣṇavas,
encontrarán muy poca cantidad de personas que sean realmente vaiṣṇavas. Rāvana era un gran devoto del
señor Śiva, pero cuando Rāmacandra, el Señor Viṣṇu -Rāmacandra es también Viṣṇu-
quiso matarle, el Señor Śiva no pudo hacer nada por salvarle.
Hay
muchas historias al respecto, cuando Rāvana estaba en el campo de batalla,
estaba orando al Señor Śiva. Generalmente, quien adora a un semidiós o a alguna
otra persona, recuerda. Y Pārvatī, la esposa del Señor Śiva, insistía: “Tu
devoto está en un gran peligro, y te llama repetidamente pidiéndote ayuda. ¿Por
qué no vas? ¿Por qué sigues ahí sentado?”. El Señor Śiva dijo: “Ahora está
destinado a morir. El Señor Rāmacandra ha venido a matarle. Y nadie puede
salvarle”. Así es. Rakhe kṛṣṇa māre ke
māre kṛṣṇa rākhe ke. Cuando Kṛṣṇa protege a alguien, nadie puede matar a
esa persona. Y si Kṛṣṇa mata a alguien, nadie puede protegerle, sea quien sea.
Nosotros...
Nuestra tarea, todo lo que hagamos debe ser cómo complacer al Señor Supremo. Y
el Bhāgavad-gītā nos enseña una forma
muy sencilla para complacer al Señor Supremo. Kṛṣṇa dice:
ya idaṁ paramaṁ guhyam
mad-bhakteṣv abhidhāsyati
na ca tasmān manuṣyeṣu
kaścin me priya-kṛttamaḥ
Kṛṣṇa dice que: “La persona que se toma las
molestias de predicar esta filosofía confidencial, el Bhagavad-gītā tal como es, y se arriesga…”. Paramaṁ guhyam, es muy confidencial. Confidencial significa que la
última instrucción del Bhagavad-gītā, simplemente
entregarse al Supremo, Kṛṣṇa, no pueden entenderla las personas comunes. Ni
siquiera grandes eruditos como el Doctor Radhakrishnan, que la niega.
Āsuraṁ bhāvam āśritāḥ
[Bg.7.15]. Quien ha adoptado la
actitud de ser demoníaco, por muy culto que pueda ser, māyayāpahṛta-jñānaḥ. Su cultura, su conocimiento, le ha sido robado
por māyā. Y āsuraṁ bhāvam, na māṁ prapadyante. Nunca se entregarán. Ese es el
signo del demonio. Nunca se entregarán. Les matarán, irán al infierno, pero lo
aceptarán todo, pero, aun así, si les dices: “Entrégate a Kṛṣṇa...”. “No”. Eso
es demoníaco.
Por eso, quien se entrega a Kṛṣṇa, o Dios, es muy
afortunado. Bahūnāṁ janmanām ante jñānavān
māṁ prapadyate [Bg. 7.19]. Quien se entrega a Kṛṣṇa no es una
persona común. Es el más grande de todos los eruditos, filósofos, todos los yogīs y todos los karmīs. Quien se entrega es la persona más elevada. Por eso es muy
confidencial. Nuestras enseñanzas, el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa,
nuestra presentación del Bhagavad-gītā tal
como es, es un proceso para enseñar a la gente a entregarse a Kṛṣṇa, a Dios.
Eso es todo. Por eso Kṛṣṇa dice que es confidencial... Nadie lo va a aceptar.
Pero quien se arriesga, dice: “Por favor, entrégate...”.
Cuando van a predicar, saben que a los predicadores
a veces les atacan. Como Nityānanda Prabhu, fue atacado por Jagaī-Madhaī. Y el
Señor Jesucristo fue crucificado, matado... Así que el predicador corre un riesgo.
Por eso Kṛṣṇa dice: “Estas personas que se ocupan en predicar el Bhagavad-gītā tal como es, Me son muy,
pero muy queridos. Son muy queridos para Mí”. Na ca tasmān manuṣyeṣu kaścin me priya-kṛttamaḥ [Bg. 18.69]. “No hay nadie que Me sea más querido que
la persona que predica esta verdad confidencial a la gente”.
Por eso, si queremos complacer a Kṛṣṇa, tenemos que
correr ese riesgo. Kṛṣṇa, guru. Mi
maestro espiritual se arriesgó, aceptó el riesgo de la labor de prédica, y nos
inspiró a nosotros a hacer esa misma labor. Y nosotros también les imploramos
que acepten esta labor de prédica. Esta labor de prédica, sin embargo, cómo lo
diría, quiero decir, lo hacemos de un modo tan pobre...
Pobre -no es pobre, pero supongamos que yo no soy
una persona muy culta. Ese muchacho, por ejemplo. Si yo le envío a predicar, él
ahora no tiene una gran educación. No es filósofo. No es un gran erudito. Pero
también él puede predicar. Él también puede predicar.
Porque nuestra prédica no es muy difícil. Si vamos
de puerta en puerta y le decimos a la gente: “Mi querido señor, por favor,
canta Hare Kṛṣṇa”. Y si es un poquito avanzado le puedo decir: “Por favor,
trata de leer Las enseñanzas del Señor
Caitanya. Es muy bueno. Te beneficiará”. Esas tres o cuatro palabras hacen
de ustedes predicadores.
¿Hay alguna dificultad? (Risas) Tal vez no sea una
persona muy culta, no sea un gran erudito, no sea muy buen filósofo.
Simplemente di... Vayan de puerta en puerta: “Mi querido señor, eres una
persona muy erudita. Pero por ahora, deja a un lado tu cultura. Simplemente
canta Hare Kṛṣṇa”.
Así lo hizo Prabodhānanda Sarasvatī. Él decía, dante nidhāya tṛṇakaṁ padayor nipayta.
Ese era el método de prédica que enseñaba. Prabodhānanda Sarasvatī era un gran
devoto del Señor Caitanya. Escribió un libro, Caitanya-candrāmṛta, “La Luna llena del Señor Caitanya”, en
sánscrito. Era del sur de la India. Y su sobrino fue uno de los Gosvāmīs.
Cuando el Señor Caitanya se hospedó en su casa, por aquella época era un
casado. Más tarde entró en la orden de sannyāsa
y se llamó Prabodhānanda Sarasvatī.
Por aquel entonces, Gopāla Bhaṭṭa... En realidad, el
título de su familia era Bhaṭṭa, Baṭṭācārya. Baṭṭācarya es un título que se da
a los brāmaṇas muy cultos.
Cakravartī, Baṭṭācārya, son títulos que se dan a los brāhmaṇas que son muy eruditos, muy influyentes. Baṭṭācārya. Y por
aquel entonces, Gopāla Baṭṭa Gosvāmī era un niño pequeño. Y el Señor Caitanya
se quedaba en casa de ese Veṅkata, Veṅkaṭanātha. Se llamaba Veṅkaṭa. Que más
tarde se llamó Prabodhānanda Sarasvatī.
Y este niño sintió Su influencia y quiso irse con el
Señor Caitanya. Era un sannyāsī y
viajaba. Caitanya Mahāprabhu le aconsejó: “Tus padres todavía viven. Podrás
venir conmigo más adelante”.
Era un niño, sólo tenía dieciséis años. Y ese niño,
Gopāla Bhaṭṭa, tras la muerte de sus padres, fue con el Señor Caitanya, y el
Señor Caitanya le aceptó. Y lo puso bajo la tutela de Rūpa Gosvāmī, le dijo:
“Trata a este niño como si fuera tu hermano menor”. Y llegó a ser uno de los
Seis Gosvāmīs.
Los Seis Gosvāmīs... Rūpa Gosvāmī es en realidad el
más importante. Pero Sanātana Gosvāmī era su hermano mayor, y le trataba como
si fuera su maestro espiritual. Rūpa Gosvāmī, Sanātana Gosvāmī, Gopāla Bhaṭṭa
Gosvāmī, Raghunātha Bhaṭṭa Gosvāmī, Raghunātha dāsa Gosvāmī y Jīva Gosvāmī.
Estos Seis Gosvāmīs nos han legado un caudal inmenso
de literatura. Y cada uno de ellos estableció un templo en Vṛndāvana. Tú lo has
visto Kīrtanānanda Mahārāja, el templo de Rādhā-Ramaṇa. El templo de Rādhā-Ramaṇa
era el templo de Gopāla Bhaṭṭa Gosvāmī.
Prabodhānanda Sarasvatī nos está enseñando como
predicar. En la era actual, predicar simplemente con argumentos, con
discusiones, es muy difícil. Mejor ser manso y humilde. Eso es lo que nos
enseña Prabodhānanda Sarasvatī: dante
nidhāya tṛṇakam. En la India hay un sistema para mostrarse humilde.
Si se ponen una brizna de hierba entre los labios, y
se acercan a alguien, se entiende que se acercan a esa persona con mucha
humildad. Por eso dijo, dante nidhāya tṛṇakam.
Tṛṇakam significa una brizna de hierba. Dante
significa dientes. Padayor nipatya: “Y
postrarse a tus pies”.
Kāku-śataṁ kṛtvā: “Y alabándote cientos de veces, `Mi querido señor, tú
eres tan grande. Eres tan poderoso. Eres tan erudito. Eres tan rico. Eres tan
bello´, todo”, aunque no lo sea.
Dante nidhāyatṛṇakaṁ
padayor nipatua kāku-śataṁ kṛtvā ca. Śatam. Śatam significa “alabándote cien veces, he venido a
decirte algo”. “¿Por qué eres tan humilde? ¿Cuál es...? ¿Qué quieres decir?”.
“No, yo soy...”.
“Tú eres sādhavaḥ.
Tú eres una persona muy religiosa. Eres una persona muy honesta, sādhavaḥ. Un hombre muy honesto, eres un
santo. Sí. Pero yo te pido que todo lo que hayas aprendido, por favor, lo
olvides. Eso es lo que te pido”.
Sakalam eva vihāya
dūrād caitanya-candra-caraṇe kurutānurāgam. Simplemente
traten de someterte a los pies de loto del Señor Caitanya. Por Su misericordia
verán que kaivalyaṁ narakāyate, se
darán cuenta que volverse uno con el Supremo, les parecerá como ir al infierno.
Fundirse con el Supremo es la ambición más elevada
de los impersonalistas. Pero si se someten a los pies de loto de
Caitanyacandra, descubrirán que ese concepto es como un infierno, kaivalyaṁ narakāyate. Naraka significa
infierno. Kaivalyam les parecerá ser
uno.
Y tridaśa-pūrākāza-puṣpāyate.
Tri-daśa-pūra significa los planetas, los planetas superiores donde viven
los semidioses. Treinta y tres millones de semidioses, hay como mínimo treinta
y tres millones de planetas. Tri-daśa-pūrākāśa-puṣpāyate.
Son como una fantasmagoría. La analogía exacta de fantasmagoría..., la
palabra sánscrita que se traduce como fantasmagoría, que significa que no tiene
existencia real, es ākāśa-puṣpa, que
significa “flor en el cielo”.
No hay flores en el cielo, pero pueden decirlo. O en
palabras bengalíes comunes, “huevos de caballo”. Un caballo nunca pone huevos,
pero estas expresiones existen. Este Vivekananada se ha inventado ésta: daridra-nārāyaṇa. ¿Cómo va a ser Nārāyaṇa
daridra? Es como huevos de caballo.
¿Lo ven?
Estas palabras son muy... Tri-daśa-pūrākāśa-puṣpāyate. Por la gracia del Señor Caitanya,
verán que fundirse en la refulgencia, llegar a ser uno con el Supremo, les
parecerá un infierno, en realidad. Si le preguntan a cualquier devoto puro:
“¿Quieres fundirte en la existencia del Brahman impersonal?”. Dirá que no. Si
tiene un poquito de conciencia de Kṛṣṇa, dirá que no, dirá: “¿Qué es ese
fundirse? Es infernal. Lo que queremos es danzar con Kṛṣṇa. ¿Por qué tendría
que fundirme y perder mi existencia, mi individualidad?”.
Y los karmīs,
están tratando de elevarse a los planetas superiores. Es como ahora tratan de
elevarse a los planetas superiores con los sputniks, del mismo modo, también
hay ceremonias rituales. Yānti deva-vratā
devān [Bg. 9.25]. Cumpliendo con todas las ceremonias
rituales, los sacrificios, pueden elevarse a los planetas superiores: yānti deva-vratā devān. Ese es otro
método. Y también está este otro método, quieren ir directamente con una
máquina. Pero esa tendencia está ahí en todas partes, el que queramos ir al
planeta Sol, a la Luna, a este otro planeta.
Pero Prabodhānanda Sarasvatī dice: “Oh, estás
tratando de ir a otros planetas elevados mediante tu karma, con tu trabajo”. Oh, eso es como un huevo de caballo. ¿Por
qué tienes que tomarte esa molestia?”, Huevo de caballo significa que no tiene
sustancia. Del mismo modo que no existen los huevos de caballo, si quieren
elevarse a ese sistema planetario superior, ¿qué ganarán con eso? No ganarán
nada, porque allí tendrán que pasar también por los cuatro principios de la
existencia material.
No pueden parar el nacimiento, la muerte, la vejez y
la enfermedad. Pueden vivir por un período más largo -eso sí es posible en los
planetas superiores. Pero, ¿se satisfacen con vivir simplemente un período de
vida más largo? ¿Es eso un éxito? Pongan punto y final a la muerte. Eso es un
éxito. Llegar a tener un cuerpo fortísimo, no es el éxito.
Tanto como si son fuertes como si son débiles,
tendrán que morir. No es que, quiero decir, perdón, que como son personas muy
fuertes no van a morir. O que porque son muy ricos no van a morir. O porque
son... No. Por eso, Prabodhānanda Sarasvatī dice que es como ākāśa-puṣpa, una fantasmagoría.
Karmīs y jñānīs. El
jñānī quiere fundirse, y el karmī quiere un nivel de vida superior.
Esa es la aspiración del karmī. Los karmīs dan caridad para adquirir
resultados piadosos de esa caridad, de modo que tras la muerte puedan elevarse
a Svargaloka, los planetas celestiales.
Prabodhānanda Sarasvatī dice entonces: “Pero por la
misericordia de Kṛṣṇa, por la misericordia del Señor Caitanya, esa ambición de
elevarse a un sistema planetario superior parecerá una fantasmagoría”. Ākāśā-puṣpāyate. Esas son las
aspiraciones, las ambiciones de los karmīs,
y de los jñānīs.
Después están los yogīs. La ambición de los yogīs
es siddhi, los otros tipos de éxitos.
Un yogī puede volverse más ligero que
un copo de algodón. Puede volverse más pequeño que el átomo, aṇimā, laghimā, prāpti, siddhi, īśitā,
vaśitā. Hay tantas perfecciones yóguicas. Y eso por supuesto es una
perfección. Nadie... No es fácil alcanzar ese estado de perfección. Por lo
general, la gente con la práctica del yoga
trata de controlar la mente y los sentidos. Eso es una práctica general.
Y Prabodhānanda Sarasvatī dice que durdānta indriya-kāla-sarpa-paṭalī
protkhāta-daṁṣṭrāyate. ¿Por qué deben estar temerosos de sus sentidos? ¿Por
qué tantos esfuerzos por tratar de controlar los sentidos? Los sentidos se
vuelven... ¿Cómo? ¿Por qué no hay que controlarlos? Dice que los sentidos son
como serpientes. Durdānta
indriya-kāla-sarpa-paṭalī.
Los sentidos son como serpientes. Las serpientes
siempre son peligrosas porque tan pronto como les tocan, inmediatamente la
muerte. Serpientes venenosas. No pueden distinguir cuál no es venenosa. Por eso
las serpientes son siempre horribles. El otro día, por ejemplo, vimos una
serpiente en la casa de los brahmacāris.
Y Prabodhānanda Sarasvatī dice: “Si, las serpientes
son muy violentas y horribles. Pero si saben que no tienen veneno, que le han
quitado los colmillos…”. La serpiente también puede ser de utilidad para los
seres humanos. Hay expertos encantadores de serpientes que les quitan a las
serpientes los colmillos venenosos, y con ese veneno hacen tantas medicinas. El
veneno también puede ser de beneficio para los seres humanos si se sabe
utilizar.
Prabodhānanda Sarasvatī dice entonces que, estos indriyas, los sentidos, son como
serpientes. Nuestros sentidos actúan como serpientes. Tan pronto como se nos
toca, hay peligro. La complacencia de los sentidos crea tantos peligros,
peligros futuros. Eso es todo. Siempre debemos recordarlo. Y todos nuestros
problemas, pesares y miserias se deben a la complacencia de los sentidos.
Siempre es penoso. El sistema de yoga
significa yoga indriya-saṁyama. Yoga significa controlar los sentidos.
Ese es el primer principio.
Prabodhānanda Sarasvatī dice: “Sí, se acepta que los
sentidos son como serpientes. Pero si les rompen los colmillos venenosos, ya no
hay peligro. No hay... No hay más temores”. Si una serpiente sin veneno, un
niño podría tenerle miedo: “Oh, una serpiente”.
Pero un hombre que ve la serpiente y sabe que no
tiene colmillos venenosos, que se los han roto, entonces no hay por qué tener
miedo. Es como un ordinario, insignificante... Un reptil, o un gusano, o
microbios.
Así lo ha dicho... Eso significa que esa es su
respuesta a los jñānīs, a los yogīs, a los karmīs: durdānta indriya-kāla-sarpa-patālī protkhāta. Protkhāta, significa
extraídos. Se le han extraído los dientes. Proktkhāla.
Protkhāta. Daṁṣṭrāyate. Daṁṣṭra significa diente. Los sacan. Así que no hay
motivo para...
Durdānta
indriya-kāla-sarpa-paṭalī protkhāta-daṁṣṭrāyate viśvaṁ pūrṇa-sukhāyate. Todo el mundo se enfrenta al problema del mundo
material, tantos problemas. Pero si se refugian en el Señor Caitanya, en la
conciencia de Kṛṣṇa... El Señor Caitanya significa conciencia de Kṛṣṇa. kṛṣṇa varṇaṁ tviṣākṛṣṇam [SB 11.5.32].
El Señor Caitanya significa conciencia de Kṛṣṇa. Viśvaṁ pūrṇa, verán que no hay problema.
Y el mundo será un lugar muy feliz. Al devoto le parece un lugar bueno. Es como
aquí en Nueva Vṛndāvana, los karmīs
pensarán: “Oh, qué sitio tan tonto. No hay comodidades, no hay comodidades
modernas. Tantos problemas. No hay cuartos de baño. No hay agua corriente”.
Pero los devotos piensan: “Oh, qué sitio tan maravilloso”.
Así que, del mismo modo llévenlo por todas partes,
los karmīs se enfrentan con
tantísimos problemas. Pero un devoto, el que ha emprendido el proceso de
conciencia de Kṛṣṇa, no tiene problemas. Viśvaṁ
pūrṇa-sukhāyate. Y vidhi-mahendrādiś
ca kīṭāyate. Y para ellos, todas esas grandes personalidades, pueden
parecer muy grandes a los demás, pero para los devotos son como gusanos y
gérmenes y moscas ordinarias.
A veces criticamos a las grandes personalidades.
¿Con qué base? La base es que nos hemos refugiado en la conciencia de Kṛṣṇa, en
Caitanya Mahāprabhu. Por lo demás, cualquier persona común puede criticar. Es
como el Consulado General en San Francisco, el cónsul me decía: “Swamījī, usted
ha llamado sinvergüenza a Maharishi?”. “Sí. Sí. Es posible. ¿Por qué?”. La
gente, a una persona a la que tanto adora, nosotros le llamamos sinvergüenza.
¿Con qué base? La base es esta conciencia de Kṛṣṇa.
Podemos probar que es sinvergüenza. No estoy
hablando yo; está hablando Kṛṣṇa. Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā, na māṁ duṣkṛtino mūḍhāḥ [Bg. 7.15]. Mūḍha significa sinvergüenza. Y yo estoy repitiendo la palabra de
Kṛṣṇa. Todo el que no se entrega a Kṛṣṇa, es un sinvergüenza. Podemos citar el Bhagavad-gītā. Si alguien nos pone un
pleito, podemos libremente decir: “No lo he dicho yo. Eso se dice en el Bhagavad-gītā. Puedes denunciar al Bhagavad-gītā por perjurio, por
calumnias. ¿No sé por qué me molestas a mí?”. (Risas)
El
Bhagavad-gītā dice que todo el que no se entrega a Kṛṣṇa... Na amāṁ duṣkṛtino mūiḍhāḥ mām... Na māṁ duṣkṛtino
mūḍhāḥ prapadyante narādhamāḥ. Él no sólo es un sinvergüenza, sino que es
lo más bajo de la humanidad. Y si dicen: “Pero es una persona muy culta”. Oh, māyayāpahṛta-jñānāḥ [Bg. 7.15]. Su conocimiento se lo ha quitado māyā. Āsuraṁ bhāvam āśritāḥ. Simplemente está desafiando a Dios. Kṛṣṇa
significa Dios. Decir: “Yo soy Dios”, eso es asúrico.
El devoto no tiene necesidad de controlar los
sentidos. Quedan controlados de forma natural. Hemos, por ejemplo, aceptado el
voto de no comer nada que no sea kṛṣṇa-prasāda.
Los sentidos están ya controlados. No tiene sentidos pedir al devoto: “No
bebas, no hagas esto, no hagas lo otro”.
Tantos no hagan. Simplemente por tomar kṛṣṇa-prasādam, todos los no hagan están
incluidos. Y se hace muy fácil. A otros, si se les pide: “No fumes”, se les
hará muy difícil. Pero el devoto puede dejarlo en cualquier momento. No tiene
problema.
El mismo ejemplo entonces, los sentidos son muy
fuertes, tan fuertes como la serpiente. Pero si les rompen los colmillos, los
colmillos venenosos, y no hay razón para temer. Del mismo modo, si ocupan los
sentidos en Kṛṣṇa, no hace falta controlarlos más, ya están controlados. Prtkhāta-daṁṣṭrāyate viśvaṁ pūrṇa-sukhāyate.
Y el mundo entero es un problema para la gente
común, pero para nosotros no es un problema. Porque vemos que todo es de Kṛṣṇa.
Si hay problema, el problema es de Kṛṣṇa. ¿Por qué mi problema? Kṛṣṇa sabe cómo
resolver los problemas. Por eso, en la práctica no tenemos problemas. Es
problema de Kṛṣṇa. Kṛṣṇa lo resolverá. Como Arjuna fue animado, nimitta-mātraṁ bhava savyacācin [Bg. 11.33]. “No te preocupes por tu victoria. Ya
lo he dispuesto todo”. Nosotros debemos tener esa fe y convicción y simplemente
intentarlo. Debemos hacerlo con gran sinceridad y seriedad. Entonces Kṛṣṇa lo
hará todo. Yo no tendré que hacer nada.
Es como nuestro movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa,
está mejorando. Kṛṣṇa nos da todas las facilidades. No tenemos poder. Pero
tratamos de cumplir con nuestro deber sinceramente. Eso es todo. No hay
problema. Viśvaṁ pūrṇa-sukhāyate. Y vidhi-mahendrādiś ca kīṭāyate. Cuando
una persona es completamente consciente de Kṛṣṇa, sabe quién es quién.
Sabe quién es esa persona tan erudita. Lo sabe. Vidhi-mahendra. Qué decir de eruditos
mundanos y grandes personalidades. Vidhi,
vidhi significa el señor Brahmā, y mahendra
significa el rey del cielo. También a ellos se les trata como seres humanos
corrientes o entidades vivientes comunes y corrientes. No se les da ninguna
importancia. “Bueno, como…”.
Ābrhma-bhuvana-stham.
Ābrahma. Para el devoto, del mismo modo que la pequeña
hormiga es una entidad viviente, Brahmā también es una entidad viviente, todos
son partes integrales de Kṛṣṇa. No tienen problemas con ninguno.
Como partes integrales de Kṛṣṇa, ofrecemos respeto a
todos. No que nos sentimos asombrados por la grandeza de una entidad viviente.
Piensa que su grandeza se debe a la gracia de Kṛṣṇa. Porque Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā: yad yad vibhūtimat sattvaṁ
tat tad eva mama tejo ‘ṁśa-sambhavam [Bg. 10.41]. Nadie puede hacerse grande a no ser
que... Es como la luz del Sol. ¿Qué es esa luz del Sol? Simplemente es un
reflejo parcial del brahmajyoti de Kṛṣṇa.
Similarmente, todo lo que para la visión de este mundo material nos parece
grande, es porque ha recibido el favor o la gracia de Kṛṣṇa. Eso es todo. Yad yad vibhūtimat sattvaṁ tad tad eva mama
tejo ‘ṁśa-sambhavam.
En el Brahma-saṁhitā,
por ejemplo, ofrecemos nuestros respetos a todos los semidioses. Ofrecemos respetos
al Señor Śiva, a Durgā, a Gaṇeśa, al dios del Sol. Todos ellos son grandes
semidioses. El Señor Śiva, Durgā, Gaṇeśa, y Brahmā, y...
No les faltamos al respeto. Ofrecemos respetos
incluso a la hormiga. ¿Por qué no al Señor Śiva o al Señor Brahmā? Ellos deben
recibir el respeto que se merecen, pero eso no significa que les consideremos
el Señor Supremo. Ese es el error de los karmīs
y de los impersonalistas. No. Sabemos que nadie puede ser más grande que Kṛṣṇa
o igual a Él, o viṣṇu-tattva, Nārāyaṇa.
yas tu nārāyaṇaṁ devaṁ
brahma-rudrādi-daivataiḥ
samatvenaiva vīkṣeta
sa pāṣaṇḍī bhaved dhruvam
El Vaiṣṇava tantra dice que todo el que,
quiero decir, considera en el mismo nivel a Nārāyaṇa, que a grandes semidioses
como Brahmā y Śiva, brahma-rudrādi-daivataiḥ,
esos grandes semidioses, sa pāṣaṇḍī
bhaved dhruvam, se vuelve un pāsaṇḍī.
Pāṣaṇḍī significa ateo. Los
ateos compararán al Señor Supremo y a otros semidioses y dirán que están al
mismo nivel. No. Nunca lo están. Nadie puede ser más grande que el Señor
Supremo o igual a Él. Por lo tanto, vidhi-mahendradiś ca kīṭāyate...
viśvaṁ pūrṇa-sukhāyate vidhi-mahendradiś ca
kīṭāyate
yat kāruṇya-katākṣa-vaibhavavatāṁ taṁ gauram eva
stumaḥ
[Caitanya-candrāmṛta 5]
Esas cosas suceden
únicamente con una pequeña mirada misericordiosa que el Señor Caitanya ponga
sobre nosotros. Basta con que el Señor Caitanya apruebe nuestra actividad: “Sí,
esta persona lo está haciendo bien”, ya han obtenido el éxito completo. Basta
Su aprobación. Yat kāruṇya-katākṣa-vaibhavavatāṁ
taṁ gauram eva stumaḥ.
Por eso estábamos
hablando cómo complacer al Señor Supremo. Esa es la manera. Si quieren complacer
a Kṛṣṇa, propaguen la conciencia de Kṛṣṇa. Esa es la manera que Nārada está
indicando a Vyāsadeva. Yathā dharmādayaś
cārtha muni-varyānukīrtāḥ. Muni-varya. Muni-varya significa que era el
mejor de todas las personas reflexivas. Muni.
Muni significa las personas reflexivas, y varya significa el mejor, el más grande.
Y Él dice: yathā dharmādayaś cārtha
muni-varyā-nukīrtitāḥ: “En todos los Vedas
y Upaniṣads has hablado acerca de
la religiosidad y el crecimiento económico, o los procedimientos de complacer
los sentidos, o de fundirse en el Supremo, y de ese modo no has descrito las
glorias del Señor. Has dado más importancia a las actividades materiales”.
Al igual que en
los Vedas, hay ceremonias ritualistas
de realizar grandes sacrificios. ¿Cuál es el significado de esos sacrificios? Eso
significa que obtienen una posición muy opulenta en su próxima vida o en esta
vida. Así que las personas están apegadas a tales cosas. Veda-vāda-ratāḥ pārtha nānyad astīti vadinaḥ [Bg. 2.42], lo encontrarán en el Bhagavad-gītā.
Las personas se sienten muy atraídas por estas ceremonias ritualistas. No solo
los seguidores de los Vedas; en todas
las religiones, si realizan alguna ceremonia ritual, oh, se sienten muy
atraídos. Y si simplemente dicen, “Cantemos Hare Kṛṣṇa”, no se sentirán muy
atraídos.
Así que veda-vāda-ratāḥ pārtha nānyad astīti vadinaḥ.
Así que, no deberíamos ser así. Nuestra ocupación es cómo glorificar al Señor
Supremo, cómo glorificar a Kṛṣṇa. Entonces todo el éxito está ahí. Eso será
instruido por y a, por Nārada Muni a Vyāsadeva.
yathā dharmādayaś cārthā
muni-varyānukīrtitaḥ
tathā vāsudevasya
mahimā hy anuvarṇitaḥ
[SB 1.5.9]
Na tathā. Na tathā vāsudevasya mahimā na hy
anuvarṇitaḥ. Na tathā. “Te has tomado tantas molestias en lo que se
refiere a estas celebraciones de los Vedas
y otras escrituras, pero no te has tomado la menor molestia en describir las
glorias de Vāsudeva”. Vāsudevaḥ sarvam
iti [Bg. 7.19]. “Aunque en el Bhagavad-gītā has visto que todo es Vāsudeva..., vāsudeva-parā makhāḥ vāsudeva-paraṁ-jñānam [SB 1.2.28], pero, aun así, no has hablado mucho
acerca de Vāsudeva”. Na tathā vāsudevasya
mahimā hy anuvarṇitaḥ. “No has hecho buenas explicaciones acerca de las
glorias de Vāsudeva”.
Muy bien. (Fin)
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