Bg. 1.2-3 - La muerte es Dios

Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Bhagavad-gītā 1.2-3
La muerte es Dios
Londres, 9 julio 1973
(Original en inglés)

Pradyumna: (dirige el canto, etc.) (Prabhupāda y los devotos repiten)

sañjaya uvāca
dṛṣtvā tu pāṇḍavānīkaṁ
vyūḍhaṁ duryodhanas tadā
ācāryam upasaṅgamya
rājā vacanam abravīt

(pausa) (dirige el canto de los sinónimos)

sañjayaḥ — Sañjaya; uvāca — dijo; dṛṣṭvā — después de ver; tu — pero; pāṇḍava-anīkam — los soldados de los Pāṇḍava; vyūḍham — dispuestos en falanges militares; duryodhanaḥ — el rey Duryodhana; tada — en ese entonces; ācāryam — el maestro; upasaṅgamya — acercándose; rājā — el rey; vacanam — palabras; abravīt — habló.

Traducción: “Sañjaya dijo: ¡Oh, rey!, tras contemplar el ejército de los hijos de Pāṇḍu, el rey Duryodhana fue ante su maestro y le dijo las siguientes palabras”.


Prabhupāda: Dhṛtarāṣṭra preguntó a Sañjaya: “kim akurvata: después de que mis hijos y los hijos de mi hermano se reunieron para luchar, ¿qué hicieron después?”. Ésa fue su pregunta. Así que, para animarle, porque Sañjaya podía entender los sentimientos de su señor, que quería luchar sin compromisos, con un espíritu kṣatriya. “Que mis hijos y los hijos de mi hermano luchen...”. Ese es el espíritu kṣatriya. “Mis hijos son cien en total y ellos son solamente cinco, de modo que, sin lugar a dudas, mis hijos vencerán y entonces tendrán asegurado el reino”. Ése era su plan. Sañjaya, su secretario, comprendió sus sentimientos. Por supuesto, al final le daría una información muy distinta. Yatra yogeśvaraḥ hariḥ. Al final le dijo: “Mi querido señor, no esperes la victoria, no es posible, porque del otro lado están Kṛṣṇa, yatra yogeśvaraḥ hariḥ, y el luchador Arjuna, y la victoria está más allá de lo que tú puedes esperar”. Pero al principio le dijo: “No te desanimes, no han hecho ningún acuerdo. Inmediatamente tu hijo Duryodhana...”, y está hablando de Duryodhana, de su hijo, con la palabra rāja, porque Dhṛtarāṣṭra se sentiría muy animado cuando, finalmente, pudiera pensar en que su hijo sería rey, por eso dijo “rāja.

Drstvā tu pāṇḍavānīkam (BG 1.2). Duryodhana no se esperaba que los Pāṇḍavas pudiesen reunir una fuerza militar tan grande porque carecían de recursos. Les habían quitado el reino, les habían arrebatado el dinero, les habían enviado al bosque, tantas penalidades. Pero el necio de Duryodhana no sabía que, por encima de todo, Kṛṣṇa estaba de su parte, eso no lo supo calcular. Por eso cuando oyó que los Pāṇḍavas estaban muy bien armados, con una gran cantidad de soldados, pāṇḍavānīkam, se sintió un poco sorprendido: “¿Cómo han podido reunir tantos soldados?”. Así que inmediatamente fue a consultar al general de sus ejércitos, Droṇācārya.

Dronācārya era el maestro de todos, ācārya. Ācārya significa maestro. Ācāryam upasaṅgamya (BG 1.2), el maestro de artes marciales, militares y Duryodhana era el maestro de artes marciales de los Pāṇḍavas también. Cuando todos ellos eran niños fueron puestos al cuidado de Droṇācārya para que les instruyese. Droṇācārya era brāhmaṇa, pero conocía las artes militares, así fue nombrado maestro de todos los muchachos, los Kauravas... Pero Ācārya, Droṇācārya se unió a Duryodhana. Bhīsmadeva se unió a Duryodhana. Ninguno de ellos se unió a Arjuna, porque Arjuna y Mahārāja Yudhiṣṭhira no eran reyes en aquel momento, de modo que no tenían en sus manos el poder financiero, y aquellas personas, los hijos de Dhṛtarāṣṭra, tenían el poder político del gobierno, controlaban todos los recursos financieros y daban dinero en abundancia a Droṇācārya y Bhīsmadeva para su sustento. De modo que se sentían en deuda con ellos. Por supuesto, lo sabían todo, pero externamente se sentían en deuda: “Arjuna, yo recibo dinero de Duryodhana, así que en este momento de peligro si no me uno a él no parecerá bien, él me proporciona mi sustento financiero”. Arjuna, por supuesto, no se lo pidió, Arjuna estaba satisfecho con Kṛṣṇa. Eso era todo.

También Kṛṣṇa se dividió, porque era una disputa de familia. Kṛṣṇa dijo: “Yo no puedo ponerme de parte de ninguno de los dos, incluso si tomo partido por cualquiera de ustedes no lucharé, directamente no lucharé, podría ponerme de tu parte o de la suya, pero no lucharé”. Arjuna, pese a todo, se sentía satisfecho. Y Kṛṣṇa, para satisfacer a Arjuna, le prometió: “No lucharé, pero seré tu auriga, conduciré tu cuadriga”. De ese modo se organizó la batalla. Y cuando Dhṛtarāṣṭra preguntó: “kim akurvata sañjaya (BG 1.1): ¿Qué hicieron?”. Sañjaya dijo: “Señor, no debes desanimarte, no han llegado a ningún acuerdo, inmediatamente tu hijo, tras ver el dispositivo militar de los Pāṇḍavas, se sorprendió y fue a ver a Droṇācārya”. Es el primer general de los ejércitos. “¿Qué hacer?”. Rājā vacanam abravīt (BG 1.2). Inmediatamente empezó a informar a Droṇācārya. Verso siguiente:

Pradyumna: (dirige el canto, etc.)

paśyaitāṁ pāṇḍu-putrāṇām
ācārya mahatīṁ camūm
vyūḍhāṁ drupada-putreṇa
tava śiṣyeṇa dhīmatā

(pausa) (dirige el canto de los sinónimos)

Traducción: “¡Oh, maestro!, contempla el gran ejército de los hijos de Pāṇḍu, tan expertamente organizado por tu discípulo, el hijo de Drupada”.

Prabhupāda: Inteligente. Éste Drupada, el hijo de Drupada estaba destinado a matar a Droṇācārya. Drupada Mahārāja no se llevaba bien con Droṇācārya, de modo que celebró un yajña para poder tener un hijo que pudiera matar a Droṇācārya, y este es el hijo de Drupada. Droṇācārya sabía que: “Drupada Mahārāja ha tenido un hijo y en el futuro ese hijo me matará”. Aun así, cuando le fue ofrecido como discípulo para aprender de él las artes marciales, le aceptó: “Sí”. Eso significa que los brāhmaṇas eran muy generosos: “Si viene a mí como discípulo, no me importa que me vaya a matar, eso no importa, pero yo debo impartirle mis enseñanzas”. Por eso se emplea esa palabra dhimatā, muy inteligente. “Ha aprendido la ciencia militar de ti simplemente para matarte”. Dhīmatā, tava śiṣyeṇa: “Tu discípulo ha organizado”. Eso es lo que le está señalando de modo que se pusiera furioso, que se enfadase: “Ese sinvergüenza ha aprendido de mí y ahora, ¿quiere matarme?”.

Pero no, el deber es el deber, al fin y al cabo, todos debemos morir, no quedará nadie. Nadie entonces debe tener miedo de la muerte. Esa es la civilización védica. La muerte es inevitable. “Tan seguro como la muerte”. ¿Quién puede evitar la muerte? Así que no debemos apartarnos de nuestros deberes, nuestro verdadero deber por temor de la muerte. Esa es la civilización védica. Y Duryodhana quería indicarle: “Ese muchacho, tu discípulo..., está establecido que su destino es matarte y ha dispuesto muy bien las falanges militares simplemente para vencerte, y ese arte lo ha aprendido de ti”.

Por eso está empleando esta palabra dhīmatā. Dhī significa inteligencia; y mat, el que posee. Asty artha matup-pratyaya. Cuando alguien posee algo, en este sentido este pratyaya... En sánscrito hay pratyayas. Matup pratyaya. De matup viene mat.

Lengua sánscrita significa que es un lenguaje tan elaborado, tan trabajado, que cada palabra en particular tiene un significado. No como su inglés. “Beauty but peauty put”. No, así no. Si dicen: “beauty but”, deberían decir: “peauty put”. Pero no, lo cambian: “Beauty but, peauty put”. ¿Por qué? En lengua sánscrita esos cambios no se permiten. Si la “u” significa “a”, como cuando dicen “beauty but”, siempre debe querer decir eso, sin cambios. Dhīmatā, dhī significa inteligencia, dhī significa inteligencia, quiere decir alguien que tiene inteligencia. Cada palabra se usa con pleno significado. La lengua sánscrita es tan completa, por eso se llama sánscrita. Saṁskṛta significa purificado, y el alfabeto se llama devanāgarī. Devanāgarī significa este alfabeto. Es como en Europa usan las letras romanas, el alfabeto romano; del mismo modo, en el sistema planetario superior se usa este alfabeto, Devanāgarī, se usa en las ciudades de los semidioses, y el lenguaje se denomina sánscrito, “muy elaborado”, purificado. Y el sánscrito es la madre de todas las lenguas.

Incluso en este mismo planeta, el latín mismo se deriva del sánscrito. Es como cuando dicen “maternal”, matṛ-śabda, “paternal”, pitṛ-śabda. Dhīmatā, aquí el escritor es Vyāsadeva. Cada palabra se ha escogido cuidadosamente. Tanto en el Bhagavad-gītā como en el Śrīmad-Bhāgavatam, o en los Purāṇas, en todos los escritos del Mahābhārata, cada palabra en particular se ha usado después de sopesarla cuidadosamente como en una balanza. Debe haber tantas palabras al inicio, tantas palabras al final, y no de modo caprichoso, no, eso no se permitirá. Eso se denomina saṁskṛta sāhitya, literario. Como cuando Caitanya Mahāprabhu estaba escuchando a Keśava Kāśmīrī, tan pronto cometió un pequeño error, bhavānī-bhartā, inmediatamente le criticó y le venció. La lengua sánscrita es muy compleja, muy completa.

Paśyaitāṁ pāṇḍu-putrāṇām ācārya: ”Mi querido maestro, mira simplemente cuántos soldados, cuántos militares hay en el bando de los Pāṇḍavas y ha sido tu discípulo quien les ha organizado, el discípulo que está destinado a matarte, recuérdalo”. Eso significa: “Vuélvete más fuerte que ése muchacho y el otro ejército no podrá matarte”. Pero Duryodhana no sabe que la muerte no depende del poderío militar o la fuerza física. Cuando la muerte viene no hay quien la pueda parar. La muerte es Dios.

Cuando Kṛṣṇa desea que: “Éste hombre debe morir ahora”, o “Él tiene que morir ahora”, nadie puede impedirlo. Rākhe kṛṣṇa mare ke mare kṛṣṇa rākhe ke. Si Kṛṣṇa decide matar a alguien, nadie puede darle protección, no tiene el poder. Y si Él desea proteger a alguien, nadie puede matarlo. Esta es la protección de Kṛṣṇa.

Por lo tanto, este gran, gran general Dronācārya y Bhīṣmadeva, Karṇa, eran generales muy poderosos, Arjuna no era nadie ante ellos, Arjuna era como... Parīkṣit Mahārāja comparaba esto como: “Mi abuelo era como un pez ordinario y estos soldados, estos comandantes eran como el timiṅgila”. Timiṅgila es un pez, tenemos información de la literatura védica, de un gran pez, que puede tragar ballenas, timi. Timi significa ballena, y timiṅgila significa... tal como un pequeño pez es tragado por un pez de esa forma. Así que imaginen que tan grande era ese pez. Así que estos comandantes Karṇa, Dronācārya, Bhīṣma, son comparados con el timiṅgila, y Arjuna, aunque es muy poderoso, es comparado con una timi. Así que Parīkṣit Mahārāja admitió que: “No es posible para mi abuelo vencer en la batalla ante estos grandes comandantes. Es sólo por la gracia de Kṛṣṇa que fue salvado”. Así que la conclusión es que si Kṛṣṇa salva, nadie puede matar, y si Kṛṣṇa desea matar nadie puede salvar. Por lo tanto, nuestra conclusión debe ser es que nosotros debemos estar siempre bajo la protección de Kṛṣṇa”. Avaśya rakṣibe kṛṣṇa... Esto es śaraṇāgati, śaraṇāgati, rendición. Rendición significa que: “Yo estoy rendido a Kṛṣṇa con completa fe que Él es competente y me dará completa protección”. Esto es llamado rendición, no hay duda: “Oh, me voy a rendir a Kṛṣṇa, y en caso de peligro Él no podrá darme protección”, eso no es rendición. Con completa fe: “Sí, Kṛṣṇa es tan poderoso, Kṛṣṇa es tan grande que me voy a rendir a Él desde este día, desde este día... Kṛṣṇa, yo he estado vagando en este universo vida tras vida sin saber mi relación contigo, ahora, hoy, me rindo a Ti, por favor acépteme y ocúpame en Tu servicio”.  Esto es llamado rendición. Muchas gracias. (fin)