Pradyumna
(dirige el canto, etc.):
arjuna uvāca
dṛṣṭvemaṁ sva-janaṁ kṛṣṇa
yuyutsuṁ samupasthitam
sīdanti mama gātrāṇi
mukhaṁ ca pariśuṣyati
[Bg. 1.28]
vepathuś ca śarīre me
roma-harṣaś ca jāyate
gāṇḍīvaṁ sraṁsate hastāt
tvak caiva paridahyate
[Bg. 1.29]
Traducción: Arjuna dijo: “Mi
querido Kṛṣṇa, al ver a mis amigos y familiares presentes ante mí con tantos
ánimos de pelear, siento que los miembros del cuerpo me tiemblan y que la boca
se me está secando. Todo el cuerpo me tiembla y tengo el vello erizado. Mi arco
Gāṇḍīva se me resbala de las manos, y la piel me arde”.
Prabhupāda:
Dṛṣtvā
imaṁ svajanam, Arjuna es un gran guerrero, un luchador. Para un kṣatriya
matar a alguien no es muy difícil, los kṣatriyas están entrenados de esa
forma. La caza se les permite a los kṣatriyas. Es como los estudiantes
de Medicina se educan, reciben un entrenamiento que les permite practicar
operaciones quirúrgicas en cadáveres. Un hombre de bien, por supuesto, no
podrá, le costará mucho clavar un cuchillo en el cuerpo de alguien, es algo muy
difícil por naturaleza; los bandidos y los ladrones sí pueden hacerlo. Del mismo
modo que a los doctores, a los médicos, a los cirujanos se educan y aprenden a
operar con su cuchillo sobre un cadáver para ver donde están los nervios, del
mismo modo a los kṣatriyas se les permite matar, y reciben una formación
para ello. Kṣatriya significa kṣat, kṣat significa herida, y tra
significa trāyate, salva. El kṣatriya tiene que salvar a los
ciudadanos de las heridas que otros puedan inflingirles, eso es kṣatriya.
Brāhmaṇa significa el que conoce a brahma, el supremo. Brāhmaṇa,
kṣatriya, vaiśya y śūdra, son divisiones establecidas en
función de las cualidades. Guṇa-karma-vibhāgaśaḥ, mediante guṇa. Guṇa
significa cualidad, y karma significa la actuación práctica de la guṇa.
Arjuna
era un kṣatriya que había sido entrenado por Droṇācārya en el arte de
matar. La no violencia no es la función del kṣatriya, eso es cobardía, a
los kṣatriyas se les enseña a ser violentos, sino, no pueden gobernar.
En el pasado, cuando un rey dictaba su juicio, era un asunto concluido, no que
va al Tribunal y espera la sentencia por diez años, mientras tanto todo se echa
a perder. No es así. El rey solía sentarse regularmente en su Asamblea, y a
todos los reos, los inculpados, los criminales los juzgaba él mismo. A veces el
rey mismo tenía que matar con su propia espada. Incluso en las naciones
europeas, la orden real recibía esa formación. Hoy en día hay gobiernos
constitucionales y democráticos, donde el rey no tiene poder, pero eso no es bueno
para la gente, la democracia es una farsa. A mí por lo menos no me gusta,
porque hay tantos sinvergüenzas que por el simple hecho de haber sido votados
pasan al gobierno. ¿Qué saben ellos de cómo gobernar? Por eso, en la actualidad
en todo el mundo no hay buenos gobiernos, no hay buenos gobiernos. Se pensaba,
se consideraba que América tenía un buen gobierno, ahora podemos ver cómo ha
actuado el señor Nixon. No es posible. En el pasado, se educaba a los kṣatriyas
para que supiesen cómo gobernar. Los militares como Droṇācārya, que entrenó a
Arjuna y Duryodhana, les educaba. Todos los príncipes reales sabían cómo matar;
no solo matar sino que también cómo gobernar según los śāstras. La
función del rey es que en el país todo el mundo esté debidamente ocupado y que
se dedique a sus propias funciones, ese es el trabajo del rey, no había
desempleo, ese el primer deber del rey, porque una persona desempleada es el
taller del diablo, el taller del diablo; si no tiene nada que hacer. Eso ocurre
ahora, un hijo rico no tiene nada que hacer, y su cerebro es el taller del
diablo, se inventan tantísimos “ismos”, pero todo el mundo debe de trabajar.
Ése es el primer deber del gobierno. El brāhmaṇa se ocupa como brāhmaṇa,
y el kṣatriya se ocupa como kṣatriya.
Arjuna
no era cobarde, era un guerrero muy competente, pero aun así dehātma-buddhi,
el concepto corporal de la vida es tan fuerte que Arjuna admite dṛṣtvā tu
svajanaṁ kṛṣṇa: ”Mi querido Kṛṣṇa, tengo que matar a los míos”. ¿Qué
significa ese “míos”? Míos significa la relación corporal. ¿Por qué los demás
no son míos? Todo el mundo es mío porque todo el mundo es hijo de Kṛṣṇa. De
modo que cuando una persona se vuelve consciente de Kṛṣṇa, puede ver a todo el
mundo como “míos”, y cuando no es consciente de Kṛṣṇa, simplemente ve a los
suyos donde hay una relación corporal; ése es el defecto. Hacen propaganda de
las obras humanitarias, de las obras filantrópicas, del comunismo, de este
“ismo”, del otro, pero cuando se trata de relaciones corporales inmediatamente
cambia todo. Sabían que en el país comunista, Khruschev ha sido expulsado
porque favorecía a sus propios hombres, y ese era el defecto. Así que pueden
hacer propaganda de que “yo soy para todos”, pero siente apego por los suyos.
Nepotismo, se llama nepotismo. Tantísimos grandes líderes; nuestro Jawaharhal
Nehru enviaba a sus propios hombres familiares como embajadores. Vijaya
Lakshmi, una mujer, la estaba enviando como embajadora, era un alto cargo en
este país. De modo que esta cuestión de los míos propios, de mis propios
hombres es muy relevante en todas partes.
Arjuna
es un gran guerrero, podía luchar contra todos los soldados, contra todos los
que estaban allí para luchar, yuyutsu. Y, en el otro bando también se
habían reunido yuyutsu, con ánimos de luchar. A otras personas, aunque
no muestren ánimos de luchar, podemos matarles fácilmente, pero a los propios
hombres, aunque muestren ánimos de luchar, aún así duda, porque son sus propios
hombres. Así que, este concepto de los míos en relación con el cuerpo es una
barrera o la barrera para la comprensión espiritual. Mientras exista este
concepto de vida de que “yo soy el cuerpo y todo lo que está relacionado con el
cuerpo son los míos, mis familiares, mis parientes...”, éste concepto de la
vida es la barrera más grande para el progreso en la conciencia espiritual. Por
lo tanto, la civilización Védica está concebida de tal manera que tengamos que
abandonar esa idea desvergonzada de “los míos”. Eso es vairāgya, se
llama jñana-vairāgya. En la vida humana se necesitan dos cosas:
conocimiento y vairagya, desapego. El apego aumenta, primero aumenta, puṁsaḥ
striyā mithunī-bhāvam etam, el hombre siente atracción por la mujer y la
mujer siente atracción por el hombre, ese es el lazo de la naturaleza,
grilletes; y cuando están realmente unidos bien sea por el padre, la madre o a
su propia manera, esa atracción aumenta. Puṁsaḥ striyā mithunī-bhāvam etaṁ
tayor mitho hṛdaya-granthim āhuḥ. Hṛdaya-granthim, el nudo en el corazón:
“Ella es mi esposa”, “él es mi esposo”. Ése nudo, por supuesto, ahora está muy
flojo, en el pasado era muy fuerte porque a la mujer no se le permitía
relacionarse con ningún otro hombre, y al hombre tampoco se le permitía relacionarse
con ninguna otra mujer. Esa relación ha aflojado incluso este nudo, hṛdaya-granthim.
Por eso incluso en casos insignificantes, en disputas insignificantes entre
marido y mujer surgen divorcios porque esa unidad ahora no es muy fuerte. Eso
es bueno, de una u otra forma se ha aflojado. Así, esta idea de “los míos”,
viene del concepto corporal de la vida.
Arjuna
está preparando el terreno, cómo recibir las instrucciones del Bhagavad-gītā,
porque la instrucción espiritual comienza por separar el alma del cuerpo.
Mientras no entendamos que existe un alma diferente del cuerpo, no hay
educación espiritual. Ése es el principio básico. Si no entiendes qué es el
alma, qué es el alma espiritual, ¿qué posibilidad hay de educación espiritual?
Arjuna se veía afectado, francamente lo dice: dṛṣṭvā tu svajanaṁ kṛṣṇa
yuyutsuṁ samupasthitam, pero, “¿Qué es esto?, tengo que matar a los míos”. Svajanam,
svajanam significa mis propios hombres. Sīdanti mama gātrāṇi: “¡Oh,
estoy temblando! Mukhaṁ ca pariśuṣyati. “Se me está secando la boca”.
Todos tenemos esta experiencia, cuando hay peligro, todos sentimos estas cosas,
se manifiestan tantos signos.
vepathuś
ca śarīre me
roma-harṣaś
ca jāyate
gāṇḍīvaṁ
sraṁsate hastāt
tvak
caiva paridahyate
Estos
signos, diversas transformaciones de la constitución física se manifiestan en
momentos de peligro, y también se manifiestan a veces con ocasión de la
felicidad espiritual. Se denominan aṣṭa-śattvika-vikāra, ocho tipos de
transformaciones del cuerpo. En nuestro cuerpo tenemos tantísimas energías de
reserva que se manifiestan con el paso del tiempo, con los diversos modos de
actuar de la mente y la inteligencia. Ése es el estudio de cómo aparecen esas
cosas. Aparecen a partir de la inteligencia y de la mente. Está el alma, y la
inteligencia y la mente crean la situación de los signos corporales. Por lo
tanto, el cuerpo o los sentidos no lo son todo. La educación moderna piensa que
el cuerpo lo es todo, no. Un estudio verdadero es que el cuerpo significa los
sentidos. Indriyāṇi parāṇy āhuḥ, con una visión burda, densa, vemos el
cuerpo. Indriyānī parāṇy āhuḥ indriyebhyaḥ paraṁ manaḥ [Bg. 3.42], pero los
signos del cuerpo actúan por la presencia de la mente, y la mente actúa por la
presencia de la inteligencia, y la inteligencia actúa debido a la existencia
del alma. (al lado:) Usted puede entender.
Éste es
el proceso, el principio básico es el alma. El alma actúa a través de la
inteligencia, y la inteligencia actúa a través de la mente, y la mente se
expresa a través de los sentidos; esa es la situación. Mientras mi mente está
absorta en algo, en algún tema en particular, los signos de mi cuerpo también
funcionarán, o los sentidos funcionarán conforme a la mente. Por lo tanto, también
para el avance espiritual usted tiene que entrenar a su mente. Sa vai manaḥ
kṛṣṇa-padāravindayor vacāṁsi vaikhuṇṭha-guṇānuvarṇane, en primer lugar
tiene que fijar la mente. Practicar yoga significa controlar la mente y
los sentidos, en eso consiste la práctica del yoga, porque la mente es
vacilante y cambiante, y acepta algo inmediatamente y rechaza algo
inmediatamente, es muy inestable. Por eso tenemos que educar la mente,
entrenarla, y cuando la mente está entrenada, automáticamente los sentidos
estarán bajo control. Si usted decide resueltamente: “No tomaré ninguna comida
que no haya sido ofrecida a Kṛṣṇa”, automáticamente su lengua será controlada,
de forma natural. Bhaktivinoda Ṭhākura dice en una canción, śarīra
avidyā-jāl jaḍendriya tāhe kāl jīve phele viṣaya-sāgare: Nuestro cuerpo es
una red de ignorancia. Nuestro cuerpo. ¿Por qué hemos recibido este cuerpo, un
cuerpo material? Porque hemos olvidado a Kṛṣṇa, y queremos enseñorearnos de la
naturaleza material; esa es nuestra situación, por lo tanto en función de
nuestros diversos deseos recibimos cuerpos distintos. Aquí estamos sentados,
digamos unas cincuenta o cien personas, no hay uno solo cuyo cuerpo coincida
con el de otro, la cara, todo es diferente, porque cada uno de nosotros tiene
deseos distintos. Por eso, la expresión facial, la construcción física, todo
está hecho en función de la mente. Y, también en el momento de la muerte, la
constitución de la mente le llevará a otro tipo de cuerpo. La mente llevará al
alma, todo ello se explica en el Bhagavad-gītā. Yaṁ yaṁ vāpi smaran bhāvaṁ
tyajati ante kalevaram [Bg. 8.6]. Si
entrenas tu mente, esto es conciencia de Kṛṣṇa, siempre recordar a Kṛṣṇa. Hare
Kṛṣṇa Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare, entonces es posible que en el momento
de la muerte usted recuerde a Kṛṣṇa y alcance el éxito en la vida. Tyaktvā
dehaṁ punar janma naiti maṁ eti kaunteya [Bg. 4.9].
Inmediatamente usted es elevado a Kṛṣṇaloka. Esto es entrenamiento, educación.
Tenemos
que pensar siempre en Kṛṣṇa. Kīrtanīyaḥ sadā hariḥ. El consejo de
Caitanya Mahāprabhu es: Taror api sahiṣṇunā,
tṛṇād
api sunīcena
taror
iva sahiṣṇunā
amāninā
mānadena
kīrtanīyaḥ
sadā hariḥ
Porque
nuestro objetivo es... Si somos serios en querer elevarnos al loka, al
lugar donde vive Kṛṣṇa, tenemos que entrenar a nuestra mente de tal manera que
en el momento de la muerte pueda recordar a Kṛṣṇa. Por eso, había un gran rey
Kulaśekara, que oraba a Kṛṣṇa: Kṛṣṇa tvadīya pada-paṇkaya... ¿Cómo es
ese verso? Tvadīya, kṛṣṇa tvadīya pada pankaja... me olvido. La idea es,
el rey Kulaśekara ora a Kṛṣṇa: adyaiva viśatu me mānasa-rāja-haṁsaḥ. Adyaiva.
Prāna-prayāna-samayane kapha-vāta-pittaiḥ smaraṇaṁ kutas te. Está orando:
“Kṛṣṇa, yo ahora tengo buena salud, por favor déjame morir inmediatamente. Adyaiva,
inmediatamente, de modo que mi mente, que es como un cisne, pueda complacerse
en entrar en el tallo de la flor de Tus pies de loto”. Los pies de Kṛṣṇa
siempre se comparan con la flor de loto, y la flor de loto tiene un tallo, y a
los cisnes les gusta enredarse en ese tallo, van y se sumergen en el agua, es
un juego muy bueno. Y está pensando en ese juego, está comparando a su mente
con rāja-haṁsa. El rāja-haṁsa siente gran placer al enredarse en
el tallo de la flor de loto. “Y, del mismo modo en Tus pies de loto también hay
un tallo, así que mi mente que ahora puede compararse al rāja-haṁsa, que
se enrede ahora, inmediatamente; si no es así, no sé...”. Prāṇa-prayāṇa-samaye
kapha-vāta-pittaiḥ.. “Cuando todas las funciones corporales se confundan, kapha-vāta-pittaiḥ,
'ghan ghan', habrá algún sonido, ¿cómo podré recordar Tus pies de loto?
Permíteme morir ahora mismo, inmediatamente, ahora estoy perfectamente
preparado; en otras circunstancias tal vez no podría hacerlo”. De eso se trata.
Es necesario mantener la mente sana. Saṁjña. Por lo tanto, quien muere
recordando plenamente a Kṛṣṇa, alcanza el éxito. En bengalí hay un dicho: bhajana
kara sādhana kara mūrti yāṇre haya. Usted puedes ser un gran devoto, eso
está bien, pero se demostrará en el momento de la muerte cómo recuerde a Kṛṣṇa.
Ése es el examen. En el momento de la muerte si olvidamos, si cantamos como los
loros... El loro también canta: Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, pero cuando
el gato lo coge por el cuello: "¡Kanh! ¡Kanh! ¡Kanh!". No más
Kṛṣṇa, no más Kṛṣṇa. La práctica artificial no nos va a ser de ayuda.
Cantaremos "Khan, khan."
Tenemos
que practicar la conciencia de Kṛṣṇa desde el mismo principio si somos
realmente sinceros en ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios, no que lo
dejamos hasta dos o tres años antes de morir. No, no será tan fácil, no es tan
fácil. Por eso Prahlāda Mahārāja aconseja.
kaumāra
ācaret prājño
dharmān
bhāgavatān iha
durlabhaṁ
mānuṣaṁ janma
tad apy
adhruvam arthadam
[SB 7.6.1]
Tenía
cinco años, y era consciente de Kṛṣṇa ya desde que estaba en el vientre de su
madre, escuchó las instrucciones de Nārada. Nārada instruía a su madre, y él
estaba en el vientre. Afortunadamente, por la gracia de Dios escuchó todas las
enseñanzas de Nārada mientras estaba todavía en el vientre. El resultado fue
que desde el principio mismo de su vida era consciente de Kṛṣṇa, desde el
principio. Tan pronto como nació ya era consciente de Kṛṣṇa, y aconsejaba a sus
compañeros de clase, les predicaba. Tenía cinco años sólo, pero estaba
aprovechando la oportunidad de predicar. Él había nacido en una familia de
demonios y todos sus compañeros de clase también eran hijos de demonios. No
había la menor posibilidad de conciencia de Kṛṣṇa, pero él aprendió la
conciencia de Kṛṣṇa cuando todavía estaba en el vientre de su madre, y trataba
de predicar porque sólo tenía cinco años y era el hijo del rey y no tenía
ninguna otra oportunidad de predicar, tan pronto como el maestro salía se ponía
a predicar. Eso es el espíritu de prédica. Tan pronto como usted tiene
oportunidad, predique. ¿Qué prédica es esa? ¿En qué consiste? Predicar,
Caitanya Mahāprabhu nos ha aconsejado yāre dekha tāre kaha kṛṣṇa-upadeśa [Cc. Madhya 7.128],
eso es predicar. A todo el que usted encuentre simplemente háblele
de las enseñanzas de Kṛṣṇa. Si usted es avanzado, si conoce las instrucciones
de Kṛṣṇa porque ha leído el Bhagavad-gītā, puede predicar a los demás. Y
si no ha leído nada... pongamos que usted no ha leído nada, también puede
predicar. Y, ¿cómo se hace?: “Simplemente hágase devoto de Kṛṣṇa, mi querido
señor”. Eso también es prédica: “Simplemente entréguese a Kṛṣṇa”. Vaya de
puerta en puerta. Y si no sabe hacer nada más, simplemente diga: “Mi querido
señor, usted es muy bueno, es una persona muy inteligente, canta Hare Kṛṣṇa”: Sakalam
eva vihāya dūrāt. Esta fue la prédica que enseñó Prabodhānanda Sarasvatī. Dante
nidhāya tṛṇakaṁ padayor nipatya kāku-śataṁ kṛtvā ca ahaṁ bravīmi. Esa es la
manera de predicar. Dante nidhāya tṛṇakam. Según la civilización védica,
cuando alguien quiere mostrarse muy humilde al acercarse a otra persona tiene
que ponerse un poco de hierba o paja en la boca. Tṛṇa. El proceso de
prédica consiste en ponerse un poco de hierba en la boca. Dante nidhāya
tṛṇakaṁ padayor nipatya kāku-śataṁ kṛtvā ca ahaṁ bravīmi. Y alabadle:
“Señor, usted es una persona tan importante, usted es tan inteligente”. Eso es
alabar, adular. Aunque sea el tonto número uno, tenemos que hablarle así:
“¡Oh!, no hay una persona como usted en el mundo; es tan inteligente, tan rico,
tan hermoso”. Todas las cosas, como los mendigos. A veces le dice un mendigo:
“Usted será rey”, y cuando lo dice pensamos: “¡Oh!, me está bendiciendo. ¡Qué
bien! Le daré una paisa”. Y esa forma de adulación también se necesita. Kāku-śataṁ
kṛtvā ca ahaṁ bravīmi. De manera que la persona le pregunte: “Pero, ¿por
qué es tan humilde, por qué me alaba tanto?”. Y ahora se lo dice, sādhavaḥ:
“¡Oh!, usted es un gran sādhu”. Sādhavaḥ, sakalam eva vihāya dūrāt:
“Usted ha aprendido tantas cosas hermosas. Lo sé, pero por favor échelas afuera
todas, por favor”. Sakalam eva: “Todas las tonterías que ha aprendido,
por favor échelas a patadas, eso es lo que le pido”. Sakalam eca vihāya
dūrāt caitanya-candra-caraṇe kurutānurāgam: “Simplemente escuche lo
que dice Śrī Caitanya Mahāprabhu. Eso es lo que le pido”. Eso es predicar, eso
es predicar. Adúlele, póstrese a sus pies y alábele de nuevo diciendo que es un
gran sādhu, que tiene una gran inteligencia, que es muy rico, para que
por lo menos escuche eso. Y cuando dice: “¿Qué quiere?”. “Ahora, (risas) quiero
esto señor, que todas esas desvergüenzas que ha aprendido, por favor, olvídese
de ellas, porque yo sé que usted es el sinvergüenza número uno, porque sé que
en su cerebro tiene tantas cosas mezcladas que no sirven para nada. Por favor,
échelas de ahí, por favor”. Sakalam eva vihāya dūrāt: “Por favor,
échelas a patadas, arrójelas muy lejos, ni se pare a mirarlas”. ¿Y qué hacer
entonces? Caitanya-candra-caraṇe kurutā-nurāgam: “Por favor, escuche lo
que dice Caitanya-candra”. Śrī-kṛṣṇa-caitanya-dayā karaha vicāra, vicāra
karile citte pābe camatkāra: “Simplemente trate de entender la misericordia
de Śrī Caitanya Mahāprabhu y se sentirá tan sublime”. Śrī-kṛṣṇa-caitanya-dayā
karaha vicāra: “Y no acepte ciegamente, si es inteligente, analícelo,
júzguelo, quién es Caitanya-candra”. Díganle eso.
Eso es
prédica, eso es prédica. Arjuna tenía que ser un predicador, un predicador en
la práctica. ¿Qué prédica es la suya? Tenía que sacrificarlo todo por Kṛṣṇa.
Eso es todo y eso es predicar. Sakalam eva vihāya dūrāt. Arjuna será el
mejor ejemplo, cómo se volverá consciente de Kṛṣṇa. Al final, en los capítulos
finales dirá, sarvam etad ṛtaṁ manye yad vadasi keśava [Bg. 10.14]: “Mi querido
Kṛṣṇa, Keśava, todo lo que dices, yo lo acepto en su totalidad” Sin ninguna
interpretación diciendo: “Esto es así, esto es de otra forma, eso no es muy
bueno”. Ardha-kukkuṭī-nyāya. Los sinvergüenzas aceptan el Bhagavad-gītā
basándose en los principios de ardha-kukkuṭī-nyāya. Ardha-kukkuṭī-nyāya es
nyāya, una lógica. ¿En qué consiste el ardha-kukkuṭī-nyāya? kukkuti
significa gallina. La gallina pone un huevo cada día. El propietario de la
gallina piensa: “¡Oh!, qué buena es esta gallina, me da cada día un huevo, pero
la boca es cara, come; así que le voy a cortar la cabeza y simplemente me quedo
con el huevo”. Y hay sinvergüenzas, esos sinvergüenzas estudian el Bhagavad-gītā
basándose en el principio de ardha-kukkuṭī-nyāya: “Esto no lo quiero,
esto lo quiero. Esto no lo quiero, esto lo quiero”. Si le corta la cabeza, no
pondrá más huevos. Esto no lo sabe el sinvergüenza. Si le corta la cabeza no le
va a dar ni un solo huevo más. Del mismo modo, si trata de estudiar el Bhagavad-gītā
conforme a sus caprichos: “Esto lo acepto, esto no me gusta, esto no me gusta,
esto me gusta”. Esto no es estudiar el Bhagavad-gītā, es cualquier otra
cosa, es cualquier otra cosa.
Por
eso, tenemos que aprender de Arjuna su forma de aceptar el Bhagavad-gītā.
Él dice sarvam etad ṛtaṁ manye [Bg. 10.14]: “Kṛṣṇa, Tú
eres la Suprema Personalidad de Dios, lo que Tú has dicho, lo acepto tal y como
es”. Eso es estudiar el Bhagavad-gītā. El obstáculo entonces es svajanam.
Ahora lo está presentando. Se presenta como el tonto número uno aunque no lo
es, pero está preparando el terreno para que Kṛṣṇa hable el Bhagavad-gītā.
Ése es el principio. Por eso, él no se ve afectado por svajanam, pero se
presenta de esa manera: “Ése es mi problema, que tengo que matar”. Dṛṣṭvā
imaṁ svajanaṁ kṛṣṇa: “Al ver a mis propios familiares, porque soy el tonto
número uno...”. Yasyātma-buddhiḥ kuṇape tridhātuke. Les llamó con la
palabra svajana. En el śāstra se explica, svajanākhya-dasyu.
Svajanākhya-dasyu, son todos ladrones y bandidos, pero se presentan como
mis familiares. Un ejemplo práctico: imagínese que tiene cien dólares en el
bolsillo. Si un ratero se lo roba y usted lo atrapa, entonces inmediatamente lo
lleva a la comisaría. Y cuando vuelve a casa, después de haber ganado
arduamente su dinero viene su mujer y se lo quita y usted se ríe: “¡Oh, me has
quitado todo mi dinero! Ahhh”. Pero es el mismo ladrón que ha robado la cartera
de la misma manera, pero como es svajana, svajanākhya-dasyu, el ratero
en nombre de svajana, se siente muy complacido: “¡Ah!, mi esposa me lo
ha quitado, mi hijo me lo ha quitado, pero no importa”. Eso es todo. Y otros,
tan pronto como alguien les quita algo, “los llevo a la comisaría”. Es la misma
actividad. Él trabaja arduamente día y noche y ellos le roban, aun así piensa: “Pero
éstos son mis svajanam, mis familiares”. Eso se llama ilusión. Muchas
gracias. (Fin)