Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Bhagavad-gītā
13.1-2
Conocer al inquilino y al propietario del cuerpo
Conocer al inquilino y al propietario del cuerpo
Bombay, 25
septiembre 1973
Prabhupāda:
arjuna uvacā
prakṛtiṁ puruśaṁ caiva
kṣetraṁ kṣetrajñaṁ eva ca
etad veditum icchāmi
jñanaṁ jñeyaṁ ca keśava
Cuatro
preguntas, Arjuna quería saber de Kṛṣṇa la respuesta de cuatro preguntas. En
primer lugar prakṛti, la naturaleza
material; puruṣam, el disfrutador de
la naturaleza material; kṣetram, el
campo de disfrute o campo de actividades; y kṣetrajñam,
el que disfruta o que actúa en el campo. Etad
veditum icchāmi jñānaṁ jñeyaṁ ca keśava. Y otras dos cosas, jñānam, qué es conocimiento, y jneyam, cuál es el objeto del
conocimiento, el objetivo del conocimiento.
Y Kṛṣṇa
contestó, idaṁ śarīraṁ kaunteya kṣetram
ity abhidhīyate [Bg. 13.2], “El cuerpo es kṣetra”. Etad yo vetti taṁ prāhuḥ kṣetrajñaḥ iti tad-vidaḥ, “Y el que conoce
el cuerpo es kṣetrajña”. El tema del Bhagavad-gītā en su conjunto es saber
quién es el propietario del cuerpo. Por lo general todo el mundo, el noventa y
nueve coma nueve por ciento, todo el mundo sabe que “Yo soy este cuerpo”, pero
no es así. El propietario del cuerpo, uno que sabe “Yo no soy el cuerpo, pero
soy el propietario del cuerpo”.
Yo,
por ejemplo, estoy sentado en este trono. Yo no soy el trono, soy una persona
distinta que está sentada en el trono. Del mismo modo, cuando alguien me
pregunta, “¿Quién es usted?”. Si me identifico... (Aparte) Esos niños mejor
quitarlos... si me identifico con este cuerpo, esa es mi necedad. El śāstra dice:
yasyātmā buddhiḥ kuṇape tri-dhātuke
sva-dhīḥ kalatrādīṣu bhauma ijya-dhīḥ
yat-thīrtha-buddhiḥ salile karhicij
janeṣv abhijñeṣu sa eva go-kharaḥ
Go-kharaḥ. Go significa vacas y kharaḥ
significa asnos. La persona que identifica el cuerpo con el
ser. El cuerpo es una bolsa de tres dhātus:
kapha, pitta, vāyu. Según el
tratamiento ayurvédico, el cuerpo está hecho de kapha, pitta, vāyu. Por lo demás, podemos verlo, el cuerpo está
hecho de carne, de hueso, de sangre, de orina, de excremento, de tos. Si usted
estudia analíticamente el cuerpo, verá que esos son los componentes del cuerpo.
De modo que yo no soy esos ingredientes. Esa es la primera ignorancia. En el
conocimiento espiritual, mientras no entendemos perfectamente que “Yo no soy
esta carne, esta sangre, esta orina, u otros componentes del cuerpo, que yo soy
una cosa distinta, estoy separado”. Aquel que sabe que “Yo estoy separado del
cuerpo, que soy un alma espiritual, soy parte integral del Señor Supremo”, como
se explica, mamaivāṁśo jīva bhūtaḥ [Bg. 15.7], entonces tiene
conocimiento completo.
A
los estudiantes se les educa, pero este conocimiento en las instituciones
educativas no se imparte. Nadie sabe que “Yo no soy este cuerpo”. Por eso el śāstra dice: “Todo el que identifica el
cuerpo con el ser”, yasyātmā buddhiḥ kuṇape
tri-dhātuke [SB 10.84.13], “y también a
los demás, en relación con el cuerpo”, sva-dhīḥ,
“pensando que 'ellos son los nuestros'“, sva-dhīḥ
kalatrādiṣu bhauma ijyadhīḥ, y bhauma,
“que la tierra donde ha nacido es digna de adoración”, ijya-dhīh... Así está ocurriendo. En la actualidad, por todo el
mundo todo el mundo se identifica con el cuerpo y se considera adorable la
tierra en que el cuerpo ha nacido, bhauma
ijya-dhīḥ, las personas relacionadas con el cuerpo, “son nuestros propios
parientes”. Así ocurre. Pero según los śāstras,
todo el que acepta esa identificación que el cuerpo es el yo, que el país o la
tierra son adorables, y que los parientes son “los nuestros”, de ese modo se
está aceptando ese concepto erróneo de la vida...
Por
eso, conforme a la civilización Védica, esa es una civilización de vacas y de
asnos. Sa eva go-kharaḥ [SB 10.84.13].
O en otras palabras, es una civilización animal. Y usted no puede ser feliz en
una civilización animal, en una sociedad de animales. Animales por ejemplo hay
en la selva. Y allí no hay paz. Siempre hay lucha por la existencia, hay lucha
entre los animales. Pero aun así, viven en paz. Pero ahora mismo, en la actualidad,
por todo el mundo, nos hemos vuelto menos que los animales porque no sabemos
cuál es el principio básico de la civilización, cuál es el objetivo último de
la vida, cuál es nuestra perfección. Esas cosas faltan en nuestro conocimiento.
Por
eso Arjuna pregunta, “¿Qué es jñānam,
qué es conocimiento y cuál es el objeto del conocimiento?”. Y Kṛṣṇa contesta
que “Este cuerpo, śarīram, idaṁ śarīram kṣetram,
es nuestro campo de actividades”. Hemos tenido diferentes tipos de cuerpos.
Ayer lo he explicado. Hay ocho millones cuatro cientos mil tipos de cuerpos, y
conforme a nuestro deseo, la naturaleza nos provee de un determinado tipo de
cuerpo para nuestras actividades.
Esto
se explica en otro pasaje del Bhagavad-gītā,
īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe 'rjuna tiṣṭhati [Bg. 18.61]. El Señor está en el
corazón de todos. Kṛṣṇa está tanto dentro como fuera. Kṛṣṇa, antar bahiḥ, está tanto dentro como
fuera. Simplemente tenemos que hacer que nuestros ojos y nuestros sentidos sean
perfectos para verLe. Kṛṣṇa no es invisible, es visible. Pero, quien puede
verLe es quien tiene los ojos para verLe; los demás no. Por eso el Brahma-Saṁhitā afirma, premānjana-cchurita bhakti-vilocanena santaḥ
hṛdayeṣu sadaiva vilokayanti [Bs. 5.38]. Quienes han cultivado conciencia
de Kṛṣṇa, amor por Dios, pueden ver a la Suprema Personalidad de Dios, śyāma-sundaraṁ acintya-guṇa svarūpam, el
receptáculo de todas las cualidades trascendentales. Acintya-guna... Acintya significa inconcebible. Las cualidades que
tiene Kṛṣṇa son inconcebibles para nosotros. Y Él tiene cualidades.
Como
Kṛṣṇa dice que patraṁ puṣpaṁ phalaṁ toyaṁ
yo me bhaktyā prayacchati, tad aham aśnāmi [Bg. 9.26]. Todo el que ofrezca a Kṛṣṇa, patraṁ puṣpaṁ phalaṁ toyaṁ yo me bhatyā prayaccati, con devoción...
Esa cualidad, cómo come Kṛṣṇa... Es como ahora mismo están ofreciendo un plato
a Kṛṣṇa. ¿Cómo come Kṛṣṇa? No lo vemos, pero Él come. Porque sino Kṛṣṇa es un
mentiroso. Él dice, tad aham aśnāmi
bhakty-upahṛtam, “Todo el que Me ofrece con devoción”, tad aham aśnāmi, “Yo lo como”. Pero la forma en que lo come... No
es que Él no lo coma, pero lo que usted no sabe es la forma en que lo come. Por
eso acintya-guṇa-svarūpam. Él tiene
esa cualidad inconcebible.
Es
como nuestro concepto de qué es comer, nosotros comemos por la boca. Cualquier
cosa que se nos dé de comer, nos la llevamos a la boca. Sabemos que ésa es la
manera de comer. Pero Kṛṣṇa, porque Él es acintya-guṇa-svarūpam,
tiene un proceso de comer distinta a la nuestra. También esto se afirma en el Brahma-saṁhitā. Aṅgāni yasya sakalendriya-vṛttimanti.
Los miembros de Su cuerpo, Su cuerpo está formado de distintos miembros,
pueden hacer las funciones de otros miembros de Su cuerpo. Nosotros, con los
ojos, por ejemplo, podemos ver. Si cierro los ojos no veo. Pero Kṛṣṇa, aunque
cierre los ojos, puede verlo todo con las manos. Eso es inconcebible. Acintya-guṇa-svarūpam. Por eso se dice
que es acintya. Aṅgāni yasya
sakalendriya-vṛttimanti. Y allí se le ofrece la comida a Kṛṣṇa. Y Él come
viéndola. Él puede comer por los ojos. Como nosotros, podemos comer por la
boca, no con los ojos; pero Kṛṣṇa puede comer por los ojos, simplemente por
ver. Pero entonces podrán argumentar que “Si se le ha ofrecido la comida y la
ha comido, ¿por qué entonces la comida sigue ahí, como estaba antes de la
ofrenda?”. Esto se explica en el Upaniṣad.
Pūrṇasya pūrṇam ādāya pūrṇam evā-vaśiṣyate (Iso. Invocación]. Pūrṇasya. Kṛṣṇa se puede comer todo el
plato, pero aun así todo el plato sigue entero. No se termina. Eso es
espiritualidad. Pūrṇasya pūrṇam ādāya pūrṇam
evāvaśiṣyate [Iso. Invocación].
Es
una gran ciencia, la ciencia espiritual. Por desgracia, no tenemos un sistema
educativo que nos permita entender esta ciencia espiritual. Y sobre todo en la
era actual, todo es ateísmo. Y por eso la gente no es feliz. Nuestro movimiento
para la conciencia de Kṛṣṇa tiene la misión únicamente de hacer a la gente
feliz, haciendo que se vuelva consciente de Kṛṣṇa, entendiendo todo de la forma
correcta. Ésa es nuestra misión.
Por
eso, esa es la misión de cada devoto. Arjuna, por ejemplo, lo está preguntando
en este verso. Él lo sabe todo. Él es el amigo de Kṛṣṇa, el amigo personal. Él
vive siempre son Kṛṣṇa. Y no puede haber ignorancia de parte de Arjuna. Pero
hace esta pregunta simplemente para nuestro beneficio. Y Kṛṣṇa contestará a la
pregunta.
Y,
¿por qué hay que tomar tan en serio las respuestas de Kṛṣṇa? Porque Él es la
autoridad suprema, la Suprema Personalidad de Dios. Si recibimos conocimiento
del Supremo, ese conocimiento es perfecto. Es como si recibimos un conocimiento
de nuestro superior, de una persona más educada que usted, de alguien con más
experiencia, ese conocimiento es perfecto. En el mundo material puede haber
alguien que sea supremo, pero no es el supremo final. El supremo final es Kṛṣṇa.
Īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ
sac-cid-ānanda-vigraha, anādir ādir govindaḥ sarva-kāraṇa-kāraṇam [Bs.
5.1]. Si recibimos conocimiento del supremo final, īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ, nuestro
conocimiento es perfecto. Pero si recibimos conocimiento de segunda
mano, también es bueno. Un conocimiento de segunda mano significa de alguien
que lo ha recibido de Kṛṣṇa. Ese conocimiento también es perfecto. Pero el
conocimiento de quien especula “podría ser así o podría ser de otra forma”, no es
un conocimiento perfecto.
En
el mundo moderno todo conocimiento es especulativo, hipotético. No hay
conocimiento perfecto. Si usted quiere alcanzar la perfección en el
conocimiento, tiene que recibir el conocimiento de la Suprema Personalidad de
Dios. Ese conocimiento lo entrega la Suprema Personalidad de Dios Kṛṣṇa, aquí,
en la forma del Bhagavad-gītā. Por
eso Arjuna hace esta pregunta de manera que la gente pueda recibir de Kṛṣṇa el
conocimiento perfecto, y de esa forma que la gente pueda alcanzar la perfección
de la vida.
idaṁ śarīraṁ kaunteya
kṣetram ity abhidhīyate
etad yo vetti taṁ prāhuḥ
kṣetrajña iti tad-vidaḥ
kṣetrajñaṁ cāpi māṁ viddhi
sarva-kṣtreṣu bhārata
kṣetra-kṣetrajñayor
jñānaṁ
yat taj jñānaṁ mataṁ
mama
Eso
es jñānam. Y, ¿en qué consiste este jñānam? Jñānam significa conocer al kṣtrajña,
el propietario del cuerpo.
Es
como en términos más comunes, si usted entiende que esta casa, que esta casa y
que su propietario es tal o cual persona, entonces ese conocimiento es
perfecto; y de forma similar, si entendemos qué es el cuerpo y quién es el
propietario del cuerpo, nuestro conocimiento es perfecto. Kṛṣṇa dice que este
cuerpo tiene un propietario, el alma, pero que hay otro kṣetrajña. Es como en una casa, está el inquilino y el propietario.
Son cosas muy fáciles de entender. En cualquier casa de Bombay hay tantos
inquilinos, pero también tienen su propietario. Del mismo modo, en este cuerpo
no somos el verdadero propietario. Somos simplemente el inquilino.
Es
como si le dejo mi automóvil para que lo use, usted no es el propietario, es el
ocupante, el conductor. Pero el propietario es distinto. Del mismo modo, Kṛṣṇa
dice kṣetrajñaṁ a api māṁ viddhi, “Yo
también soy kṣetrajña. Yo soy
indirectamente el propietario del cuerpo”. Por eso el nombre de Kṛṣṇa es Hṛṣīkeśa.
Hṛṣīka, significa sentidos, el cuerpo
está hecho de sentidos. Y el verdadero propietario es Kṛṣṇa, Hṛṣīkeśa. A
nosotros se nos lo da para que lo usemos.
Por
eso usamos la mano, pero si por cualquier razón la mano queda paralizada, ya no
podemos repararla. No es posible. Como el propietario de la mano ha retirado en
la mano la capacidad de actuar, entonces ya no funciona más, aunque yo diga que
“esta mano es mía”. No es “yo soy la mano”, es mi mano. Y en realidad no es mi
mano. Es la mano de Kṛṣṇa. Y eso es conocimiento.
Mientras
yo piense que soy el cuerpo o soy mi cuerpo, eso no es conocimiento perfecto.
Pero cuando usted entiende que es el cuerpo de Kṛṣṇa, el conocimiento entonces
es perfecto. Kṣetrajñaṁ cāpi māṁ viddhi
sarva-kṣetreṣu. No que Kṛṣṇa es el propietario o kṣetrajñam solamente del cuerpo humano. Sarva-kṣetreṣu. Hay ocho millones cuatrocientos mil tipos
distintos de cuerpos. Y Kṛṣṇa está en ellos. Eso se explica también en el
capítulo catorce:
sarva-yoniṣu kaunteya
mūrtayaḥ sambhavanti yāḥ
tāsāṁ brahma mahad-yonir
aham bīja-pradaḥ
pitā
Del
mismo modo que el padre hace el cuerpo, el padre da la semilla y la madre da el
cuerpo, también Kṛṣṇa es el padre supremo. Él ha dado la semilla. Es como el
padre fecunda el vientre de la madre, el padre da la semilla, y la madre
desarrolla el cuerpo; y del mismo modo, en el mundo material venimos de Kṛṣṇa.
Él es el padre que aporta la simiente, y la naturaleza material nos ha dado
este cuerpo. Eso se compara con un yantra,
una máquina.
īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ
hṛd-deśe 'rjuna tiṣṭhati
bhrāmayaṁ
sarva-bhūtāni
yantrārūḍhāni
māyayā
Yantrārūḍhāni māyayā. Kṛṣṇa nos ha dado el cuerpo por intermedio
de la naturaleza material. Este cuerpo es como un yantra. Y nosotros, dentro de este yantra sentados, viajamos. Yantrārūḍhāni
māyayā, bajo la influencia de māyā,
en este automóvil, en este yantra, bhrāmayan
sarva-bhūtāni [Bg. 18.61], vagamos por toda la
creación.
A
veces recibimos este cuerpo humano, a veces recibimos un cuerpo de semidiós, a
veces recibimos el cuerpo de una persona rica, y a veces el cuerpo de un pobre,
a veces recibimos un cuerpo de gato y a veces de perro, a veces tantas cosas,
árboles, plantas, peces. Hay ocho millones cuatrocientos mil... Ésa es nuestra
posición. Dehino 'smin yathā dehe kaumāraṁ
yauvanaṁ jarā, tathā dehāntara-prāptiḥ [Bg. 2.13]. Tal y como cambiamos de cuerpo a cada instante, de la infancia
a la niñez, de la niñez a la juventud, también cuando cambiamos de cuerpo
recibimos uno distinto. Dehāntara-prāptiḥ.
Pero no sabemos qué tipo de cuerpo vamos a recibir en la siguiente vida.
Somos ciegos. Y eso se llama ignorancia.
Por
lo general piensan que este cuerpo es todo lo que hay y que no hay que volver a
nacer. Pero no. El ejemplo se da aquí en el Bhagavad-gītā.
Es como el niño tiene su futuro, otro cuerpo, un cuerpo de joven. Y el joven
también tiene su futuro, un cuerpo más adulto. Y ese joven también tiene su
futuro, un cuerpo más anciano. Y del mismo modo el anciano tiene como futuro
otro cuerpo después de la muerte. Tatha dehāntara-praptiḥ.
Pero
la gente se ha vuelto tan irresponsable que no saben qué tipo de cuerpo van a
recibir en su siguiente vida. Son ciegos. Por eso se necesita este
conocimiento, cómo he recibido este cuerpo, y cómo voy a recibir un cuerpo
mejor o peor. Eso es conocimiento, y no el qué comer, y cómo dormir y cómo
tener relaciones sexuales. Eso no es conocimiento, ese conocimiento está en los
animales.
Āhāra-nidrā-bhaya-maithunaṁ ca.
Dónde encontrar la comida, dónde dormir, cómo tener relaciones sexuales, cómo
defenderse; eso también los animales saben cómo hacerlo. Y si dedicamos nuestra
vida únicamente a esos cuatro principios de las necesidades físicas, entonces
no somos mejores que los perros y los gatos.
El
verdadero conocimiento es saber “quién soy yo, qué es este cuerpo, por qué
sufro. Quiero ser feliz pero por qué vienen los sufrimientos, siempre hay algún
tipo de sufrimiento aquejándome”. Esas son las preguntas. Pero la gente se ha
vuelto tan necia que ya no preguntan cómo encontrar la solución a estos
sufrimientos, cómo encontrar la solución a los problemas de la vida. Están
siendo guiados como ciegos.
andhā yathāndhair upanīyamānas
te 'pīṣa-tantryām
uru-dāmni baddhāḥ
na te viduḥ
svārtha-gatiṁ hi viṣṇuṁ
durāśyā ye
bahir-artha-māninaḥ
Durāśayā, tienen alguna esperanza, esperan que
arreglando las cosas en el mundo material serán felices. Pero eso no es
posible.
En
Occidente, en Europa y en América, han organizado suficientes para arreglos
para vivir muy felices materialmente, pero no ha sido posible. También ellos
están desanimados, disgustados, confusos. No se puede ser feliz materialmente.
Es necesario saber. Usted tiene que tener conocimiento completo de quién es,
qué es su cuerpo, cómo va a ser feliz. Entonces su vida es un éxito. Si viven
como perros y gatos y trata de organizar las cosas como los perros y los gatos,
es una pérdida de tiempo, están perdiendo su vida.
Por
eso tengan la bondad de tratar de entender el Bhagavad-gītā. Está lleno de conocimiento. Y ese conocimiento lo da
el más perfecto, la Suprema Personalidad de Dios. No hay ningún error, no falta
nada. En el conocimiento que se recibe de una persona imperfecta hay cuatro
defectos: la ilusión, el error, el engaño y la imperfección. De modo que entre
tantas deficiencias... Usted no puede obtener conocimiento pleno, conocimiento
perfecto de una persona imperfecta. El conocimiento tiene que recibirlo del
Perfecto. Entonces su vida será un éxito.
Por
eso Arjuna hace tantas preguntas a Kṛṣṇa, y Kṛṣṇa le responderá en el Capítulo
Trece. En el capítulo se dan todas las respuestas de Kṛṣṇa. Y especialmente en
este Capítulo Trece, Kṛṣṇa da el conocimiento, el objeto a conocer, el tema del
conocimiento, y qué es este cuerpo, quién es el propietario del cuerpo. De modo
que Kṛṣṇa, en este verso dice kṣtrajñaṁ
cāpy māṁ viddhi, Él también está ahí.
El
filósofo Māyāvādī (dice) que solo existe un único espíritu. No, hay dos. Kṛṣṇa
dice ca. Y ca significa otro. “Y del mismo modo que el alma viviente
individual es la propietaria del cuerpo- no la propietaria, es el inquilino-
del mismo modo, también Yo tengo interés por todos”. Es como un terrateniente.
El terrateniente es propietario de muchas casas. Tal vez yo sea inquilino de
una de esas casas. De modo que solo me interesa esa determinada casa donde
vivo. Pero el terrateniente tiene sus intereses en tantas casas. De modo que Kṛṣṇa
tiene intereses no solo en mi cuerpo o en su cuerpo. Sus intereses están en
todos los cuerpo. Por eso Él dice sarva-yoniṣu,
“en todas las especies de vida”.
sarva-yoniṣu
(kaunteya)
sambhavanti
murtayo yāḥ
tāsāṁ mahad yonir
brahma
ahaṁ bīja-pradaḥ
pitā
Son
cosas que hay que entender con gran claridad. La relación de Kṛṣṇa. Él
no está relacionado con la sociedad humana, está relacionado con la sociedad
animal, la sociedad de los perros, la sociedad de los gatos, de los semidioses,
de los peces, de los árboles, de las plantas, de los insectos. Kṛṣṇa está en
todas partes. Īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-dese 'rjuna tiṣṭhati [Bg. 18.61]. Que... Kṛṣṇa proclama en este
verso que “Yo también soy uno de los que participan en este cuerpo”. Kṣetrajñaṁ cāpi māṁ viddhi, kṣetra-kṣetrajñayor
jñānaṁ yat taj jñānaṁ matam. Si simplemente tratamos de entender cuál es la
relación entre el cuerpo y el alma, entre el cuerpo y la Superalma, Kṛṣṇa...
Cuando Kṛṣṇa dice que “Yo soy también kṣetrajñaṁ”,
Él también es la Superalma, Paramātmā. Él puede conocer los placeres y los
sufrimientos de todos. Yo soy el que ocupa el cuerpo, conozco los dolores y
placeres de mi cuerpo, pero no conozco los dolores y el placer de su cuerpo. Ni
usted conoce los dolores y sufrimientos que experimenta mi cuerpo.
Por
eso ustedes son individuos, están localizados, pero Kṛṣṇa es omnipresente. Kṛṣṇa
conoce los sufrimientos y placeres del cuerpo de ustedes. Kṛṣṇa conoce los
sufrimientos y placeres de mi cuerpo. Kṛṣṇa conoce los sufrimientos y placeres
del cuerpo del perro, del cuerpo del gato, y del cuerpo de todos. Así es Kṛṣṇa. Sarva-kṣetreṣu
bhārata. Sarva-kṣetreṣu.
Él lo sabe todo. Eso es su aspecto
Paramātmā. El aspecto Paramātmā significa que Él está incluso dentro del átomo.
Aṇḍāntara-stha-paramāṇu-cayāntara-shtaṁ
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi.
De modo que este tema es muy interesante. El Bhagavad-gītā, por supuesto, es el abc
del conocimiento espiritual. Y si no entendemos ni siquiera el abc del
conocimiento espiritual, ¿qué clase de progreso vamos a hacer? Por desgracia lo
estamos descuidando, pero tenemos el deber de propagar este conocimiento del Bhagavad-gītā. Y hacemos todo lo que
podemos, y deseamos que todo el mundo y en especial los hindúes colaboren con
este movimiento. Muchas gracias. Hare Kṛṣṇa. (Fin)