Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Bhagavad-gītā 9.18-19
El destino
El destino
Nueva York, 3 diciembre 1966
Prabhupāda:
gatir bhartā prabhuḥ sākṣī
nivāsaḥ śaraṇaṁ suhṛt
prabhavaḥ pralayaḥ sthānaṁ
nidhānaṁ bījam avyayam
El Señor es gati. Gati significa el destino. No
sabemos cuál es nuestro destino. Debido a nuestra ignorancia, debido a que
estamos atrapados por la energía ilusoria, no sabemos cuál es nuestro destino
en la vida. Na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi
viṣṇum [SB 7.5.31].
La gente no sabe cuál es su destino en la vida. Su destino en la vida es
restablecer la relación perdida con el Señor Supremo. Ese es su destino. Por
desgracia, la gente no sabe cuál es el destino. Simplemente piensan que el
destino de la vida es tener la mayor cantidad posible de disfrute de los
sentidos. Esto es ilusión. Porque estamos materialmente absortos, y el concepto
material de la vida significa estos sentidos, -no tenemos otra información-
tratamos de extraer todo tipo de placeres de los sentidos. Eso se llama
ilusión. No tienen ninguna otra información. Ellos trabajan muy duro y ganan,
pero el objetivo final es la satisfacción de los sentidos y eso es ilusión.
El objetivo final es Kṛṣṇa
o el Señor Supremo, gati. Gati
significa destino. ¿Dónde van? ¿Hacia dónde están progresando? “Oh, eso no lo
podemos decir. Progresamos en el disfrute de los sentidos. Nuestro destino es
tratar de tener la mayor cantidad de placer de los sentidos”. No, el destino es
Dios, Viṣṇu, el Señor Supremo, de quien somos una parte y porción. Por haber
olvidado, por olvidar nuestra relación, ahora tenemos que luchar.
mamaivāṁśo jīva-loke
jīva-bhūtaḥ sanātanaḥ
manaḥ ṣaṣṭhānīndriyāṇi
prakṛti-sthāni karṣati
Prakṛti-sthāni, las partes
fragmentarias del Señor Supremo, las entidades vivientes en esta naturaleza
material atrapadas por los sentidos, los sentidos y la mente, tienen que
luchar. Pero ese no es el destino. El Señor dice, el Bhagavad-gītā dice, que Él es el destino. Na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇuṁ durāśayā, durāśayā ye
bahir-artha-māninaḥ [SB 7.5.31]. Bahir-artha-māninaḥ
significa... Esta naturaleza material es la naturaleza externa del Señor
Supremo. Y porque estamos atrapados en esta naturaleza material, pensamos que
el avance en la vida material es la perfección. Durāśayā. Eso se llama durāśayā.
Durāśayā significa... Duḥ
significa muy distante, o duḥ
significa también muy difícil y āśayā
significa esperanza. Es una esperanza que nunca se va a cumplir. Esta es una
esperanza que nunca se cumplirá. Eso se llama ilusión. Estamos progresando para
tratar de hacer la vida perfecta mediante el avance material. Esta es nuestra
esperanza que no tiene justificación y que nunca se cumplirá. Durāśayā, bahir-artha-māninaḥ.
¿Y cuál es la
actividad? Adānta gobhir viśatāṁ
tamisram. Adānta-gobhiḥ. Go significa los sentidos. Adānta significa desenfrenados, sin control. Los sentidos sin
control, tal como un caballo sin control. Están en un carro y su caballo está
descontrolado, desenfrenado y les está arrastrando con toda su fuerza y los va
a tirar al océano Atlántico, pero no lo pueden controlar. ¿Lo ven? Del mismo
modo, adānta gobhir viśatāṁ tamisram.
Viśatām significa, alguien que está entrando en la parte más oscura de la
ignorancia a causa estos sentidos sin control y sin freno. Na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇuṁ durāśayā ye bahir-artha-māninaḥ
[SB 7.5.31],
adānta-gobhir viśatāṁ tamisraṁ punaḥ
punaś carvita-carvaṇānām [SB 7.5.30]. Estas personas que no saben cuál es su destino tratan de hacer
experimentos con lo que ya está experimentado. Ya está experimentado. Tomen por
ejemplo...
Les voy a dar un
ejemplo práctico. A uno de nuestros estudiantes, su padre viene y le dice, “Oh,
no me gusta esta Asociación. Para mí el matrimonio no tiene ningún sentido.
Debes perseguir a las mujeres. Come, bebe y disfruta, yo te compraré un coche.”
¿Lo ven? ¿Qué culpa tiene ese pobre estudiante? Él está tratando de renunciar a
todo tipo de intoxicación; él no come carne; vive exclusivamente de vegetales;
él trata de tener una vida controlada; sin vida sexual ilícita, asistiendo a
clase por la mañana y por la tarde. Oh, pero su padre piensa que eso es
peligroso. Y punaḥ punaś carvita-carvaṇānām
[SB 7.5.30].
Él ya lo ha experimentado. Él está casado. Estuvo casado. Su esposa se
divorció, y su esposa se había divorciado de él tres veces y tantas otras
cosas. Tiene una mala, muy mala experiencia de su vida, pero está animando a su
hijo a que haga lo mismo. Él no tiene ninguna otra idea. Esto se llama punaḥ punaś carvita-carvaṇānām [SB 7.5.30],
“masticar lo masticado”.
Tal como tomamos caña
de azúcar, la masticamos, le sacamos todo el jugo y la tiramos en la calle y
alguien viene después y la vuelve a masticar. ¿Qué hay ahí? Todo el jugo que
tenía ya lo he tomado yo. Así, la experiencia de esta vida material -perseguir
a las mujeres y beber y el disfrute de los sentidos y tantas otras cosas,
gastar tanto dinero, ya lo hemos visto, pero no hemos experimentado ninguna
felicidad real. Aun así, trato de animar a mi hijo, a mi dependiente para que
vaya por esa senda. La gente tonta no piensa: “Yo ya he experimentado todas
estas cosas, pero ¿qué beneficio, qué alegrías he tenido?”. Esto se llama punaḥ punaś car..., reiteradamente
masticar lo masticado, reiteradamente. Y esto está sucediendo. Nadie piensa que
“yo ya experimenté todas estas cosas y ¿qué beneficios he tenido? ¿Qué
felicidad he obtenido? Me siento frustrado en mi vida. Así que, ¿por qué debo
inducir a mi hijo? Si verdaderamente amo a mi hijo, ¿por qué voy a inducir a mi
hijo a que haga eso? Que experimente esto, la conciencia de Kṛṣṇa”. No. Porque,
adānta gobhir viśatāṁ tamisram.
Tal como hay una
historia muy bella. Un mono... Los monos están muy ocupados. ¿Saben? Pero su
ocupación es simplemente destruir. Verán que los monos siempre están ocupados,
muy activos. Y en la aldea había un carpintero que estaba cortando una viga
grande con una sierra. Y al final de su trabajo, solo había cortado la mitad,
así que puso un bloque entre las dos piezas y se fue. Y entonces llegó un mono
y sacó el bloque y su cola quedó atrapada entre las dos mitades y se cortó.
Pero él acudió a su sociedad y dijo: “Esta es la moda. Esta es la moda”. Langulim segar. Él anunció: “Cortarse la
cola es la última moda”. Del mismo modo, vi una película en mi infancia sobre
una historia similar. Un Sr. Maxlin o algo así, actuaba así. Estaba sentado en
el parque y unos chicos clavaron su cola, la cola de su frac, cuando estaba en
un baile. Así que cuando se levantó la mitad de la cola se rompió. Y cuando
estaba bailando en el baile, todo el mundo le miraba su parte de atrás: ¿Qué es
esto? Su cola es corta”. Así que se miró en un espejo: “Oh, mi cola está
cortada”. Y empezó a bailar todavía mejor y todos le preguntaron: “¿Qué es...?”.
“Oh, esta es la última moda. Esta es la última moda”. Así que todos comenzaron
a cortar su cola. ¿Lo ven? Así que esto es...
La vida continúa. “He
sido engañado, así que no quiero que mi hijo sea inteligente. Que también sea
engañado. Que sea engañado”. Esto se llama punaḥ
punaś carvita-carvaṇānām [SB 7.5.30], masticar reiteradamente lo que ya ha sido masticado. Na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇuṁ durāśayā
[SB 7.5.31].
Pero por el Bhagavad-gītā entendemos
que la meta última de nuestra vida es llegar a Kṛṣṇa o el Señor Supremo, gatiḥ. Y bhartā. Bhartā significa sustentador. Sustentador. Él mantiene a
todo el mundo. Es un hecho. Hay 8.400.000 especies de vida, de las cuales la
sociedad humana, los seres humanos son un número muy pequeño, digamos, 200.000
especies de vida. El resto, las restantes 8.200.000 mil especies de vida, son
animales y seres acuáticos, aves y bestias, hombres incivilizados y tantas
especies de vida, pero no tienen problemas económicos. No tienen problemas
económicos. Nadie se muere de hambre. Ellos comen, duermen, se aparean con el
sexo opuesto y también se defienden a su manera. Así que no tienen problemas.
Solo los hombres civilizados tienen problemas. Solo ese pequeño número de
hombres civilizados, los supuestos hombres civilizados los tienen. No creen que
Dios protege a todos. Con el avance de la civilización han aprendido el arte de
rechazar a Dios. Quieren resolver ellos mismos sus problemas económicos. Dios
les da cereales suficientes, frutas suficientes, verduras suficientes,
suficiente leche. No, ellos quieren solucionar sus problemas matando a otros
pobres animales. Pero no creen en Dios. No creen en Dios: “Estoy matando a los
pobres animales. También son hijos de Dios tanto como lo soy yo, tal como todos
somos hijos de Dios. Dios mantiene a ese pobre animal. Dios me mantiene a mí ¿por
qué debo arrebatar la vida a los demás?”. ¿Lo ven? Ellos no tienen ese
entendimiento porque no creen en Dios. Ellos no tienen esa fe. Y esto está
sucediendo.
Pero en el Bhagavad-gītā se dice: “No, Yo soy el
Supremo”. El Señor dice, “Yo soy el prabhava.
De todo... Todo, todo lo que ven, emana de Mí”. Así que no tenemos ningún
problema económico práctico. Dios está manteniendo a todo el mundo. Todo lo que
se produce en todo el mundo es suficiente para poder suministrar a toda la
población del mundo. Ese es el arreglo de Dios. No hay ninguna escasez. Pero
porque hemos hecho nuestras propias reglas y regulaciones, aunque tenemos
suficientes granos producidos, podemos producir mucho más de lo que necesitamos
para nosotros y puedo tirar al océano el exceso. Pero, aun así, si algún país
pobre o unos hermanos pobres vienen y lo piden se les negará. Esto se llama...
Porque no sabemos que nuestro destino es Dios violamos las reglas de la
naturaleza, violamos las leyes de Dios y somos atrapados por la naturaleza material.
Esta es la realidad.
Gatir bhartā prabhuḥ. Prabhu
significa maestro. Y sākṣī. Sākṣī
significa testigo. Dios está sentado en su corazón. Īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe 'rjuna tiṣṭhati [Bg. 18.61].
Īśvara, significa el Señor Supremo que está sentado en el corazón de todos. Y
Él es el testigo. Él es testigo de todo lo que hacen. Él les da facilidades
para hacer todo lo que quieran, pero al mismo tiempo, pueden olvidar. Supongan
que querían hacer algo en esta vida y eso no se ha cumplido. Entonces en la
siguiente vida cuando tengan otro cuerpo, Dios me lo recuerda. “Bueno, tú
querías hacer esto ¿por qué no lo experimentas?”. Eso también se afirma en el Bhagavad-gītā. Sarvasya cāhaṁ hṛdi sanniviṣṭaḥ:
“Yo estoy en el corazón de todos”. Mattaḥ
smṛtir jñānam apohanaṁ ca: [Bg. 15.15]. “De Mí viene el recuerdo”, smṛti,
“viene el conocimiento y también viene el olvido”. ¿Por qué sucede que Dios
hace que una persona olvide algo, pero anima a otra a que lo haga? ¿Por qué?
Porque esa persona lo quería así. Porque no quiero revivir mi relación con el
Señor Supremo. Cuando hablo de Dios, oh, siempre hay alguna persona que dice: “Oh,
¿qué es Dios? Swamiji, ¿qué está hablando usted de Dios?”. No quieren a Dios;
así que Dios les concede ese deseo: “Olvídense de Mí. Sí, olvídense y sufran”.
Pero si alguien quiere a Dios... Tal como algunos de nuestros pobres
estudiantes que tratan de restablecer su relación con Kṛṣṇa. Oh, Kṛṣṇa también
les da: “Sí”. Por lo tanto, Su misión es hacerles olvidar, porque ustedes
quieren olvidar. Y cuando son avanzados, si quieren saber... Si quieren
establecer, restablecer su relación, Él les animará.
Por lo tanto, Él es el
testigo de las dos cosas. Él les da total independencia. Lo que prefieran, pero
Él les da instrucciones al mismo tiempo: “Estas cosas no te darán satisfacción,
mi querido muchacho”. Sarva-dharmān...
“Renuncia a todas estas cosas absurdas. Ven a Mí. Yo te daré toda protección”.
Pero no queremos protección. ¿Qué puede hacer Dios? Pobre Dios, ¿qué puede...?
Él puede hacerlo todo, pero no interfiere con su voluntad. Si quieren olvidar,
Él les dará tantas facilidades a través de la energía ilusoria, que van a
olvidar, olvidar, olvidar. Adānta gobhir
viśatāṁ tamisram. Ahora tienen un cuerpo tan propicio, el del ser humano,
el del ser humano civilizado, con el que pueden conseguir un cuerpo más y más
desarrollado tal como el de Brahmā, como el del Sol, el de la Luna y tantos
otros cuerpos como existen. Pero si olvidan descenderán a las vidas de los
gatos y los perros y las hormigas y los gérmenes y muchas otras cosas, pueden
incluso volverse un gusano en el excremento. Él les dará todas las facilidades.
Esto se llama karma-cakra, el ciclo
del trabajo. Así como lo deseen Dios les dará las facilidades. Por lo tanto,
tenemos que revivir nuestro deseo: “¿Qué clase de deseo debo tener?”. Por lo
tanto, aquí está este Bhagavad-gītā y
están las Escrituras. Lo han olvidado. Nos hemos olvidado de todas estas cosas.
Por lo tanto, existen los libros y las Escrituras. Esa es también la
misericordia de Dios.
A veces consultamos
algún libro para hacer algo y eso lo hacemos todos los días. ¿Cuál es la tasa postal?
No lo sé. Tengo que enviar un paquete y de inmediato consulto algún libro. La
dirección está ahí, la guía postal está ahí y estoy haciendo lo correcto. Del
mismo modo, cuando olvidamos cuál es el destino de la vida tenemos que
consultar. Esta es la dirección. El Señor dice, gatir bhartā prabhuḥ sākṣī: «Yo soy el destino. Yo soy su
sustentador. Yo soy su Señor. Yo soy el testigo de todo lo que están haciendo”.
Nivāsa: “y ustedes viven en Mí. No
son independientes”. Están viviendo, pero ¿dónde viven? Estoy viviendo en la Tierra,
bajo el cielo. Y ¿qué es el cielo y qué es la Tierra? Esto es energía, la
energía del Señor Supremo. Así, nivāsaḥ
śaraṇam. “Tratan de vivir y a cada momento tienen que adular a alguien que
es más grande que ustedes, pero ¿por qué no vienen a Mí? No pueden vivir sin
adular a su jefe. Esa es su posición”.
Śaraṇam. Śaraṇam significa tomar
refugio en alguien. Sobre todo, en estos días, no importa la educación que
puedan tener, tienen que tomar refugio de un hombre importante con una
solicitud: “Por favor dame un empleo”. No importa lo grandes que puedan ser...
Puedo ser un hombre muy inteligente y quiero volverme el gobernante de este
país. Oh, tengo que elogiar en la calle: “Por favor voten por mí. Por favor
voten por mí. Por favor tienen que reelegirme”. Así que estoy tomando śaraṇam y estoy halagando. Estoy tomando
refugio en todo momento. Pero ¿por qué no en Dios? Oh, pero cuando yo lo digo: “Oh,
¿qué dice? ¿Por qué habla acerca de Dios, Swamiji?”. Así que ellos tomarán
refugio de un perro, pero nunca de Dios. ¿Lo ven? Esto está sucediendo. Śaraṇaṁ suhṛt. Suhṛt significa bienqueriente. ¿Quién puede ser mejor bienqueriente
que Dios? Suhṛdaṁ sarva-bhūtānām [Bg. 5.29].
Suhṛdaṁ sarva-bhūtānām. Él es... Yo
puedo ser un amigo, un bienqueriente en un círculo limitado, pero Dios es el
amigo y bienqueriente de todas las entidades vivientes. Yo puedo cuidar de los
miembros de mi familia para que sean felices y ver cómo están comiendo, pero
Dios está cuidando de innumerables entidades vivientes. ¿Lo ven? Yo no cuido de
las hormigas en mi habitación, no sé lo que comen, ni cuido de los bichos de mi
cama, pero Dios cuida también de ellos. Él los está cuidando a todos. Él es suhṛt. Él desea: “Deben vivir y Yo les
doy libertad para escojan lo que prefieran. Pero si quieren ser felices,
entonces tienen que renunciar a todas estas cosas absurdas y venir a Mí. Deben
tomar refugio de Mí y Yo les daré toda protección”. Sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja [Bg. 18.66].
Suhṛt prabhavaḥ, desarrollo. Tratan
de desarrollarse económicamente, pero ¿cómo podríamos desarrollarnos
económicamente si no hubiera algún tipo de material que Dios nos hubiera
suministrado? ¿Pueden fabricar o pueden edificar y construir un gran
rascacielos sin los materiales que Dios suministra? ¿Pueden fabricar madera?
¿Pueden fabricar piedra? ¿Pueden fabricar cal? No los pueden fabricar. ¿Pueden
fabricar hierro? Pueden trabajar, pueden realizar el trabajo y mediante su
trabajo, su inteligencia y los materiales que Dios nos suministra pueden
transformar una cosa en otra. Lo dicen los expertos en economía, que el hombre
no puede fabricar nada. Solo pueden transformar una cosa en otra. No pueden
fabricar hierro, pero pueden transformar los minerales de hierro en una gran
fábrica de hierro. Eso lo pueden hacer y perder su tiempo, un tiempo valioso.
Esa energía la tienen. Pero no pueden producir hierro. Pueden fabricar vidrio y
vivir muy cómodamente poniendo vidrios por todos los lados, pero ¿dónde está el
cristal? El vidrio es, quiero decir, una piedra que se funde con algunos
productos químicos y así se convierte en vidrio. Pero ¿dónde está la piedra? La
piedra proviene de Dios, los productos químicos provienen de Dios. La
inteligencia con la que trabajan, proviene de Dios. Su cuerpo lo proporciona
Dios. Ustedes son de Dios. Así que todo se vuelve de Dios. Prabhavaḥ: “Yo soy la fuente que lo suministra todo”.
Prabhavaḥ y pralayaḥ. Pralayaḥ. Si Dios quiere en un
segundo la ciudad de Nueva York puede ser empujada al océano Atlántico, en un
segundo. Así, pralayaḥ sthānam. Él es
el refugio. Nidhānaṁ bījam. Bījam. Bījam
significa la semilla. Avyayam. Ahora
¿qué están haciendo estas entidades vivientes? ¿Qué son las entidades
vivientes? También son parte y porción del Señor Supremo. Somos entidades
vivientes. Estamos empleando nuestra energía, aplicando nuestra energía, para
construir todas estas cosas, pero estos materiales no tienen ningún valor si yo
no estoy ahí. Tal como América, esta tierra, estaba vacía hasta que estas
personas civilizadas de Europa vinieron aquí. Así que, por su energía, por la
energía la de las entidades vivientes la materia se ha desarrollado. La materia
no es algo prominente. No tienen que darle tanta importancia a la materia. Lo
importante es la entidad viviente. ¿Y qué es la entidad viviente? La entidad
viviente es una parte y porción del Señor Supremo. Por lo tanto, Él es la causa
de las semillas de las entidades vivientes. Mamaivāṁśo
jīva-bhūtaḥ jīva-loke sanātanaḥ [Bg. 15.7].
Tapāmy aham. Ahora bien, qué es
el Sol. Tapāmi. ¿Da calor? ¿Quién da
calor? El Señor da el calor. No se puede fabricar un Sol. Tapāmy aham ahaṁ varṣam. Y la lluvia. No se puede regular la
lluvia. Está en manos de Dios o de la administración de Dios. Si no hay lluvia,
no se puede hacer lluvia, o si hay una lluvia excesiva tampoco se puede parar. Tapāmy aham ahaṁ varṣaṁ nigṛhṇāmy utsṛjāmi:
“Y si quiero, puedo dar problemas a toda la población del mundo”. Nigṛhṇāmy utsṛjāmi. Él puede... “Si
quiero aniquilarlos en un momento puedo hacerlo”. Amṛtaṁ caiva mṛtyuś ca sad asac ca aham arjuna. Amṛtam: “Y si
quiero puedo darles la vida eterna”. Si nos acercamos a Dios la vida eterna
está garantizada. Y si no quiero, entonces continuará el ciclo de nacimiento y
muerte. Mṛtyuṁ cāmṛtaṁ ca sad asac ca
aham arjuna. Sat. Sat significa la energía espiritual y asat significa esta energía material. “Porque
las dos energías son energías de Dios, por lo tanto, estas energías son también
Dios, Arjuna”. Esta descripción se la da el Señor Kṛṣṇa a Arjuna acerca de Su
posición personal, la posición de Dios. Así que tenemos que aprender del Bhagavad-gītā que fue hablado
directamente por el Supremo Señor y aceptarlo y actuar en consecuencia. Eso se
llama conciencia de Kṛṣṇa. Pensamos en Kṛṣṇa: Él lo es todo, o Dios lo es todo.
Así que vamos a ser sumisos y llevar a cabo esto, el proceso del servicio
devocional. Este es el camino de la felicidad. Ese es el camino de la
perfección. Muchas gracias. ¿Alguna pregunta? (Fin)
Traducción: Nārāyaṇī devī dāsī –
España