Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Śrī
Caitanya-caritāmṛta, Madhya 22.21-28
El
servicio devocional da la libertad
Nueva York, 11 enero 1967
Nueva York, 11 enero 1967
Prabhupāda:
kevala jñāna ‘mukti’ dite nāre bhakti vine
kṛṣṇonmukhe sei mukti haya jñāna
vinā
(CC Madhya 22.21)
Mukti, liberación... Los impersonalistas piensan que
simplemente cultivando el conocimiento de que “no soy materia; soy espíritu”, o
“soy uno con el Espíritu Supremo; ahora por ignorancia, estoy pensando de una
forma diferente, pero cuando me eleve completamente a la plataforma del
conocimiento, entonces estaré liberado”. Pero ellos no tienen respuesta para
esta pregunta: “¿Por qué quedaste condicionado?”.
Los impersonalistas piensan: “Yo soy uno con el Supremo.
Ahora, debido a mi ignorancia, he olvidado que soy el Supremo”. Debido a que no
reconocen a la Suprema Personalidad de Dios, por eso tienen una concepción
impersonal del alma espiritual: “Ahora debido a la ignorancia, me identifico
con la materia, pero tan pronto como mi ignorancia se disipe, seré uno con el
Supremo”.
Esta es la teoría de los impersonalistas. Pero
ellos no pueden responder a esta pregunta: “¿Por qué has caído bajo la
influencia de la ignorancia? Si eres el Supremo, ¿cuál es la causa por la que
has quedado condicionado? Eso significaría que el Supremo se condiciona bajo la
naturaleza material. ¿Cómo puede uno convertirse en el Supremo? El Supremo no
puede ser condicionado”.
La escuela de impersonalistas no tiene respuesta
para esta pregunta. Pero el hecho real es que el Supremo nunca cae. Las partes y
porciones del Supremo pueden caer, algunos de ellos; no todos. Por lo tanto, las
entidades vivientes son diferentes del Supremo. Son uno en calidad con el
Supremo, pero no en cantidad.
El Señor Caitanya dice que: “Simplemente por pensar
que ‘yo no soy esta materia; soy alma espiritual, ahaṁ brahmāsmi, soy Brahman’,
eso no te ayudará a obtener la liberación”. El hecho real es que las entidades
vivientes individuales, son partes integrales del Supremo, pero de una forma u
otra, desearon separarse del Supremo y quisieron enseñorearse de la naturaleza
material.
Por eso están enredadas. Ese es el hecho real. Y
como tal, encontramos en el Bhagavad-gītā, que el Señor pide sarva-dharmān
parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66): “Solo entrégate”. Por lo
tanto, a menos que haya una rendición del alma individual al Supremo, no se
puede hablar de liberación. No hay posibilidad de liberarse. Pueden cultivar el
conocimiento de que: “Yo no soy este cuerpo; soy alma espiritual”, pero eso no
ayudará a su liberación. Porque lo real es que nos hemos rebelado contra la
supremacía del Señor Supremo.
Esa es la actitud que realmente podemos ver en
todas partes. Todo mundo dice: “Oh, ¿qué es eso de Dios? ¿Quién es Dios?”. Especialmente
en esta era. Así que esta filosofía del impersonalismo es otro tipo de ateísmo,
y esta teoría de que la Verdad Absoluta es impersonal ha convertido
prácticamente a la mayor parte del mundo al ateísmo. El Señor Caitanya dice que
simplemente cultivando el conocimiento de que: “No soy esta materia, no soy
esta materia, soy alma espiritual”, eso no ayudará.
Ahora Él vuelve a dar evidencia de las Escrituras.
A cada paso, lo que sea que Él diga, Él proporciona evidencia de las Escrituras
autorizadas. Principalmente Él da evidencia del Bhagavad-gītā y el Śrīmad-Bhāgavatam,
porque para la escuela vaiṣṇava, estos dos libros son suficientes para
adquirir conocimiento. En cuanto al Vedānta-sūtra se refiere, el Bhāgavata
es el propio Vedānta-sūtra.
El Bhāgavata es el comentario natural sobre
el Vedānta-sūtra. Por lo tanto, aquel que tiene suficiente conocimiento del
Bhāgavata, automáticamente se entiende que tiene también suficiente
conocimiento en el Vedānta-sūtra. Según el sistema védico, uno debe
tener suficiente conocimiento en el Vedānta-sūtra. Entonces será
considerado como erudito en la ciencia espiritual.
Śrīmad-Bhāgavatam, por lo general los vaiṣṇavas
tienen su propio comentario sobre el Vedānta-sūtra, pero en el caso de
la sampradāya de Caitanya Mahāprabhu, no hicieron ningún comentario
sobre el Vedānta-sūtra, porque pertenecían a la sucesión discipular de
Vyāsadeva. Así pues, Vyāsadeva es el maestro espiritual. Por lo tanto, los ācāryas
posteriores a él, no pensaron que fuera apropiado hacer un comentario habiéndolo
hecho ya Vyāsadeva.
Debido a que su maestro espiritual ya había hecho
un comentario sobre el Vedānta-sūtra: “Oh, eso es suficiente. ¿Por qué
deberíamos hacerlo de nuevo?”. Hay una cierta etiqueta. De todos modos, el Vedānta-sūtra...
El Bhāgavata es un comentario natural sobre Vedānta-sūtra, y el
Señor Caitanya por lo general da evidencia del Bhāgavata, así como también
de los Purāṇas, Mahābhārata y todos, quiero decir, los Upaniṣads.
Todos son autoritativos. Pero especialmente Él da evidencias tomadas del Śrīmad-Bhāgavatam.
Ahora bien, en la confirmación de esta afirmación
de que el conocimiento, el cultivo del conocimiento, no es suficiente para lograr
la liberación, uno debe adoptar el proceso del servicio devocional. El servicio
devocional más el conocimiento es como una joya engarzada en oro. Si. Por
supuesto, los que están dedicados al servicio devocional, desarrollan conocimiento
automáticamente. No son tontos. Aquellos que son realmente serios en la
práctica del servicio devocional, con conciencia de Kṛṣṇa, no les faltará
conocimiento, porque en el Bhagavad-gītā encontrarán que el Señor dice:
teṣāṁ satata-yuktānāṁ
bhajatāṁ prīti-pūrvakam
dadāmi buddhi-yogaṁ taṁ
yena mām upayānti te
Aquellos que se dedican al servicio amoroso
trascendental de Kṛṣṇa, para ellos el conocimiento viene automáticamente de
adentro, porque Kṛṣṇa está dentro de nosotros. Así que un alma sincera en
conciencia de Kṛṣṇa, no carecerá de conocimiento. Y en la literatura védica
también se confirma:
yasya deve parā bhaktir
yathā deve tathā gurau
tasyaite kathitā hy arthāḥ
prakāśante mahātmanaḥ
(Śvetāśvatara Upaniṣad 6.23)
¿A quién se revela el conocimiento védico? Se
revela a aquella persona que tiene fe y amor inquebrantables por la Suprema
Personalidad de Dios, así como por el maestro espiritual. Yasya deve parā
bhaktir yathā deve tathā gurau. Tiene tanta fe en el Supremo, igualmente
tiene fe en el maestro espiritual. Tal persona obtiene revelación del
conocimiento védico desde adentro. Así pues, el conocimiento es algo secundario
para aquellos que realmente se toman en serio la participación en la conciencia
de Kṛṣṇa, el servicio devocional. El conocimiento les es revelado automáticamente.
Y aquellos que no toman la conciencia de Kṛṣṇa, el servicio devocional,
simplemente se entregan a la árida especulación, para ellos la liberación no es
posible. Imposible. El Señor Caitanya da una evidencia del Śrīmad-Bhāgavatam
del Décimo Canto:
śreyaḥ-sṛtiṁ bhaktim udasya te
vibho
kliśyanti ye
kevala-bodha-labdhaye
teṣām asau kleśala eva śiṣyate
nānyad yathā sthūla-tuṣāvaghātinām
(SB 10.14.4)
El verdadero conocimiento significa entender la
última palabra de la Verdad Absoluta, la Suprema Personalidad de Dios, y
entregarse a Él, después del entendimiento. Como se confirma en el Bhagavad-gītā,
bahūnāṁ janmanām ante (BG 7.19): “Después de muchos, muchos
nacimientos, aquel que realmente tiene conocimiento, se entrega a Mí”.
El Śrīmad-Bhāgavata prácticamente confirma
lo mismo, que śreyaḥ-sṛtiṁ bhaktim udasya te vibho. Cualquier persona
que no se dedica al servicio devocional con conciencia de Kṛṣṇa, simplemente se
entrega a la árida especulación, kliśyanti, y se toma múltiples
problemas..., kliśyanti significa “toma problemas”; simplemente por entender
que: “Esto no es materia, esto no es espíritu, esto no es...”, así, y el
concepto de que no hay Superalma separada, solo hay un alma, y este concepto
del alma individual es un malentendido, ignorancia; de esta manera, hay muchos volúmenes
de libros especialmente de Śaṅkarācārya, y más tarde, de sus discípulos.
Sin duda, son muy eruditos. Mediante su malabarismo
escolástico, quieren cubrir a la Suprema Personalidad de Dios. No solo quieren
cubrirlo; piensan que son avanzados. Pero es Kṛṣṇa quien se cubre a Sí mismo
para que no puedan entenderlo. Kṛṣṇa no quiere. Kṛṣṇa quiere que uno se entregue
a Él y acepte el servicio devocional.
Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā que nāhaṁ
prakāśaḥ sarvasya yoga-māyā-samāvṛtaḥ (BG 7.25): “Yo no me revelo a cualquiera.
No. Estoy cubierto”. Así pues, estos impersonalistas, debido a su, quiero
decir, poca inteligencia o a su mala fortuna, no pueden ver a Kṛṣṇa. Por lo
tanto, para ellos, esta observación está aquí, śreyaḥ-sṛtim, que: “En
realidad, lo que es auspicioso, es el servicio devocional, si alguien abandona
este camino para volverse a la árida especulación, simplemente para tratar de
entender...”. Porque jñāna significa entender cuál es la diferencia
entre materia y espíritu. Por supuesto, los impersonalistas, se entregan a ese
proceso de conocimiento.
Pero simplemente por esa especulación, el resultado
es que teṣām asau kleśala eva śiṣyate (SB 10.14.4). Aceptan muchas
dificultades para llegar a entender la diferencia entre la materia y el
espíritu... Hay muchos problemas. Tienen que ver muchas Escrituras védicas, y
tienen que entender las instrucciones y la lógica de los Upaniṣads, y
hay muchas otras cosas que respaldan su comprensión.
Entonces teṣām kleśala eva ..., lo único que
obtienen son esos problemas que aceptan por estudiar tantas Escrituras védicas
para probar que la Verdad Absoluta no es una persona, lo único que obtienen son
esos problemas, y nada más. Kleśala eva, teṣām asau kleśala eva śiṣyate:
“No obtienen ningún otro beneficio excepto ese asunto problemático”. Eso es
todo. Teṣāṁ kleśala eva śiṣyate (SB 10.14.4).
¿Como es? El ejemplo es, nānyad yathā
sthūla-tuṣāvaghātinām: “Es como golpear el grano para sacar la cáscara”. Hay
muchos granos que están cubiertos con cáscara. Entonces hay un proceso para
quitar la cáscara del grano. Pero, si el grano ya ha sido extraído, solo quedan
las cáscaras. Luego, aunque traten de descascarar y golpean para sacar los
granos, no hay posibilidad de obtener granos, porque el grano ya ha sido extraído.
Así que ese es el problema. Simplemente, golpear la cáscara no es muy
productivo. Debemos tener algún resultado concreto. Ese resultado concreto es para
aquel que se dedica directamente al servicio trascendental, al servicio amoroso
del Señor Supremo. Eso es lo que se recomienda.
daivī hy eṣā guṇamayī
mama māyā duratyayā
mām eva ye prapadyante
māyām etāṁ taranti te
El Señor confirma lo mismo en el Bhagavad-gītā,
en el Séptimo Capítulo, dice que... Esta es también otra influencia de māyā,
la ilusión. Debido al hechizo de la ilusión, estamos pensando que “soy
estadounidense”, “soy hindú”, “soy un rey”, “soy un gran hombre”, “soy un hombre
pobre”, estamos cubiertos por tantas designaciones y todo esto se debe a este
cuerpo, a este concepto corporal. No es nuestra identidad real. Estas son todas
designaciones.
Finalmente, la última trampa de māyā es
inducirnos a pensar que “yo soy Dios”. Esto es estar bajo el hechizo de la
ilusión. Estamos pensando: “Yo soy esto y aquello, esto y aquello”. Entonces,
después de muchos años de cultivo del conocimiento, si uno llega a esa conclusión
de que: “Yo soy Dios. No hay otro Dios aparte de mí. Yo soy Dios”, así que eso
es también otro hechizo de la ilusión.
Así pues, el Bhagavad-gītā dice que daivī
hy eṣā guṇamayī mama māyā duratyayā. Uno está tratando de salir de las
garras de la energía ilusoria, pero es muy difícil. Hasta el último momento, māyā,
la ilusión, les ofrecerá algo para que ella desconcierte sus esfuerzos de salir
de sus garras. Daivī hy eṣā guṇamayī mama māyā duratyayā. Entonces,
¿cómo salir de sus manos? Mām eva prapadyante māyām etāṁ taranti... El
único proceso es que se entreguen a Kṛṣṇa, así māyā ya no interferirá
más en sus asuntos. Por lo tanto, esa entrega es el único proceso por el cual
pueden salir de las garras de māyā.
‘kṛṣṇa-nitya-dāsa’-jīva tāhā
bhuli’ gela
ei doṣe māyā tāra galāya bāndhila
(CC Madhya 22.24)
Como a veces tomamos un perro mascota con grilletes
en el cuello, de manera similar, nosotros somos perros mascotas de la energía
ilusoria, encadenados con grilletes. ¿Lo ven? ¿Por qué? Ahora, ‘kṛṣṇa-nitya-dāsa’-jīva
tāhā bhuli’ gela: “La entidad viviente ha olvidado que es eternamente el sirviente
del Señor Supremo, Kṛṣṇa”. Eso lo ha olvidado. Por lo tanto…
(cortado)
... galāya bāndhila. Al igual que el perro está encadenado, nosotros
estamos en la misma condición que esos perros, estamos encadenados de esa manera.
tāte kṛṣṇa bhaje, kare gurura
sevana
māyā-jāla chuṭe, pāya kṛṣṇera
caraṇa
(CC Madhya 22.25)
Por lo tanto, si uno acepta servir a Kṛṣṇa bajo la
dirección del maestro espiritual, sigue las instrucciones del maestro
espiritual y se dedica al servicio del Señor Supremo, māyā-jāla chuṭe, pāya
kṛṣṇera caraṇa, entonces puede liberarse de esta red de la energía
ilusoria, pāya kṛṣṇera caraṇa, y él puede obtener el refugio de los pies
de loto del Señor Kṛṣṇa.
cāri varṇāśramī yadi kṛṣṇa nāhi
bhaje
svakarma karite se raurave paḍi’
maje
(CC Madhya 22.26)
Cāri varṇa. Cāri varṇa se refiere a las cuatro castas, las
cuatro divisiones de la sociedad humana: los brāhmaṇas, los kṣatriyas,
los vaiśyas y los śūdras. Cada una de estas divisiones sociales tienen
sus deberes específicos. Alguien que es brāhmaṇa, tiene su deber
específico. La cultura, y el cultivo del conocimiento es su primer y principal
deber. Del mismo modo, el kṣatriya, tiene su deber específico. Lo
principal es establecer una buena administración en el estado. Y el vaiśya,
él también tiene un deber específico.
¿Cuál es? La protección de las vacas y la agricultura.
Ese es el deber de los vaiśyas. Y los śūdras, por su parte, no
tienen responsabilidad alguna; por lo tanto, sirven a estas tres clases
superiores: la clase inteligente, dedicada al cultivo del conocimiento; la
clase administrativa, que se dedica al buen gobierno; y la clase mercantil, que
vela por el aspecto productivo de la sociedad.
Esta división es natural. No se puede negar el
hecho. En cada sociedad existe una división natural. Una cierta clase de
hombres son una clase inteligente, una cierta clase de hombres participan en
política, y una cierta clase de hombres se deleitan en hacer negocios. Y hay otra
clase de hombres: que no tienen ninguna de estas tendencias; simplemente sirven
a los demás, y así se mantienen. Estas son las cuatro clases sociales.
Así que según la civilización védica, se recomienda
que estas cuatro clases sociales se dediquen al servicio del Señor Supremo. Con
su ocupación profesional, tienen que servir al Señor Supremo. Ese es el mandato
de la literatura védica.
cāri varṇāśramī yadi kṛṣṇa nāhi
bhaje
svakarma karite se raurave paḍi’
maje
(CC Madhya 22.26)
Por lo tanto, el Señor Caitanya dice que supongamos
que un brāhmaṇa inteligente es un gran erudito y un gran filósofo, un
gran pensador... Todo está bien. Pero si él no tiene ninguna relación en el
asunto de prestar servicio al Señor Supremo. Eso es negativo. Eso significa
erudito sin conciencia de Kṛṣṇa. Del mismo modo, un político inteligente, un administrador
capacitado, menos conciencia de Kṛṣṇa... Del mismo modo, un hombre de negocios
exitoso menos conciencia de Kṛṣṇa... O los śūdras...
Si él está menos conciencia de Kṛṣṇa, entonces el
resultado es svakarma karite se raurave paḍi ‘maje: “Al hacer, al
ejecutar su deber específico, se va al infierno”. Infierno. Es un hecho. Él
está pensando que “estoy cumpliendo con mi deber”, pero se va al infierno. Estas
son palabras del Señor Caitanya. Incluso si cumple su deber muy bien, aun así,
se irá al infierno. Raurave paḍi ‘maje. Raurave significa infierno. Y
nuevamente Él Señor Caitanya da evidencia del Śrīmad-Bhāgavatam:
mukha-bāhūru-pādebhyaḥ
puruṣasyāśramaiḥ saha
catvāro jajñire varṇā
guṇair viprādayaḥ pṛthak
(CC Madhya 22.27)
ya eṣāṁ puruṣaṁ sākṣād-
ātma-prabhavam īśvaram
na bhajanty avajānanti
sthānād bhraṣṭāḥ patanty adhaḥ
(CC Madhya 22.28)
Estos dos versos están en el Śrīmad-Bhāgavata,
Undécimo Canto. ¿Qué es eso? Mukha-bāhūru-pādebhyaḥ puruṣasyāśramaiḥ saha.
Según el concepto védico de la vida social, hay cuatro divisiones de orden
social y cuatro divisiones de orden espiritual. Las cuatro divisiones del orden
social son brāhmaṇa, kṣatriya, vaiśya y śūdra; y las cuatro
divisiones del orden espiritual son el sannyāsī, vānaprastha, gṛhastha
y brahmacārī. Volverse brahmacārī significa avanzar en la vida
espiritual. Y la división del orden social está compuesta por, los brāhmaṇas,
kṣatriyas. Esto se llama varṇāśrama-dharma.
En realidad, hindú... No existe la palabra religión
“hindú”. No encontramos en la escritura védica. Religión hindú... Esta designación
“hindú” es dada por los musulmanes. Ellos, ellos, generalmente pronuncian la “I”
como la “h” aspirada. Entonces hay un río en el lado oeste, oeste de la India.
Hay río llamado Indo, río Indo. Así que el río Indo los Mahometanos solían
llamarlo “hindúes”. De “hindúes” ha venido la palabra Indostán, “el lugar de
los hindúes”.
Así pues, hindú, esta designación de religión hindú
es un término moderno dado por los extranjeros. En realidad, los indios, los bhāratīya,
ellos, su religión es varṇāśrama-dharma, religión de cuatro castas y
cuatro órdenes espirituales. Cuatro órdenes espirituales y cuatro órdenes
sociales. Las personas que siguen estas cuatro órdenes de estatus social y
cuatro órdenes de avance espiritual, se llaman varṇāśrama. Entonces, el
término “religión hindú” es un malentendido. Realmente, se les llama varṇāśrama-dharma.
Ese es el término védico.
Muchas gracias. (fin)
Transcripción: Fabián Galván - México