Conferencia en el Club Rotarios - No conocemos los verdaderos problemas de la vida

Conferencia de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Conferencia en el Club Rotarios
No conocemos los verdaderos problemas de la vida
Hyderabad, 29 noviembre 1972

Prabhupāda: Rotarios, damas y caballeros, les agradezco mucho su amable invitación en esta importante reunión de caballeros tan respetables de esta ciudad. El Bhagavad-gītā dice:

yad yad ācarati śreṣṭhas
tat tad eva itare janaḥ
sa yat pramāṇaṁ kurute
lokas tad anuvartate

Yad yad ācarati śreṣṭhaḥ. En todas las sociedades hay líderes: personas importantes con cargos en el gobierno y en las instituciones educativas, en los negocios y en muchos otros campos. En todo campo de actividad, hay personas destacadas. Eso es natural. Y en los Vedas nos hacen saber que la Persona Suprema que dirige es Dios.

nityo nityānāṁ cetanaś cetanānām
eko bahūnāṁ vidadhāti kāmān
(Kaṭha Upaniṣad 2.2.13)

Los líderes deben ser aceptados. Así como el padre es necesario, del mismo modo, el líder también es necesario, el guru también es necesario. Y, según versos védicos, el testimonio védico, podemos entender que el líder supremo es Bhagavān, la Suprema Personalidad de Dios. Dios, una persona. El concepto de la Verdad Absoluta, tal como se presenta en el Śrīmad-Bhāgavatam, brahmeti paramātmeti bhagavān iti śabdyate (SB 1.2.11): “La Verdad Absoluta se percibe desde tres puntos de vista: como el Brahman impersonal, el Paramātmā localizado y la Suprema Personalidad de Dios”. Bhagavān, esta palabra, se usa al final para describir la naturaleza de la Verdad Absoluta.

Y, quienes tratan de entender la Verdad Absoluta por medio de la especulación filosófica, pueden llegar hasta la refulgencia impersonal del Brahman de la Verdad Absoluta. Del mismo modo, quienes tratan de hallar la Verdad Absoluta dentro del corazón, dhyānāvasthita-tad-gatena manasā paśyanti yaṁ yoginaḥ (SB 12.13.1), por lo general se les llama yogīs. Y los especuladores filosóficos, se llaman jñānīs. Entonces jñānī, yogīs.

Los jñānīs, se elevan hasta la refulgencia impersonal del Brahman, mientras que los yogīs, alcanzan el aspecto localizado de la Persona Suprema. Īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe arjuna tiṣṭhati (BG 18.61). Īśvara, la Persona Suprema, está dentro de sus corazones, y en el corazón de todos. Sarva-bhūtānām. No solo en los seres humanos, sino también en los animales, árboles, insectos, seres acuáticos. Hay 8.400.000 formas de vida. Y, en todas y cada una de las entidades vivientes, dentro del corazón, está la representación de Dios, conocida con el nombre de Paramātmā.

Brahmeti paramātmeti bhagavān iti śabdyate. Y finalmente, Bhagavān. Bhaga. Bhaga significa opulencia, y vān significa que posee. Y, el poseedor de las opulencias en plenitud es la Suprema Personalidad de Dios, a quien se describe en las Escrituras védicas con la palabra Kṛṣṇa, que significa “plenamente atractivo”. Kṛṣṇas tu bhagavān svayam. Hay una lista de las distintas encarnaciones de Dios. Incluso el nombre del Señor Buda está ahí.

Y en la parte concluyente se dice, ete cāṁśa-kalāḥ puṁsaḥ kṛṣṇas tu bhagavān svayam (SB 1.3.28). Todas las encarnaciones que ahí se describen, son porciones plenarias o porciones de las porciones de la Suprema Personalidad de Dios. Pero el nombre que aquí encontramos como Kṛṣṇa, Él es el Supremo. Kṛṣṇas tu bhagavān svayam. Svayam. Él es la personalidad de Dios original.
También tenemos información de otras Escrituras védicas, como el Brahmā-saṁhitā. Fue escrita por el Señor Brahmā. Y el Señor Caitanya Mahāprabhu cuando estuvo presente en este planeta, recogió la copia existente de este libro en el sur de la India, en el Ādi-Keśava Mandira, y la presentó a Sus devotos: “Este es un libro autorizado”. Había cien capítulos de este libro. Lamentablemente, están desaparecidos. Queda solamente el Quinto Capítulo. Pero contiene la esencia de la teología. Y, el comienzo en ese libro Brahmā-saṁhitā, es:

īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ
sac-cid-ānanda-vigrahaḥ
anādir ādir govindaḥ
sarva-kāraṇa-kāraṇam

La Persona Suprema, o Īśvara... la palabra īśvara significa controlador. Todos somos controladores. Todos los aquí presentes, en cierta medida, cada uno de nosotros es un controlador hasta cierto punto. Pero este verso menciona, īśvaraḥ paramaḥ. Parama significa el supremo.

Todos somos controladores, cada uno de nosotros, pero también somos controlados. Esa es nuestra posición. Nadie puede decir... de todos los caballeros y las damas aquí presentes, nadie puede decir: “Yo soy el controlador absoluto”. Eso no es posible. Todos somos controladores relativos. Pero si tratan de encontrar quién es el controlador absoluto, Él es Kṛṣṇa.

Esto ha sido analizado por grandes eruditos en los śāstras védicos, por los Gosvāmīs, y esta es la afirmación del Señor Brahmā, a quien se considera el primer ser creado del universo. Y él dice: īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ sac-cid-ānanda-vigrahaḥ (BS 5.1): “Īśvara, el controlador supremo y final, es Kṛṣṇa, y Él es vigraha”. Vigraha significa persona, con cuerpo. Tal como nosotros tenemos un cuerpo, también, la Persona Suprema Absoluta tiene un cuerpo. Pero Su cuerpo es distinto del nuestro.

Sac-cit-ānanda-vigraha. Su cuerpo es eterno. Nuestro cuerpo, este cuerpo material, no es eterno. Sat cit: Su cuerpo está lleno de conocimiento. Nuestro cuerpo, este cuerpo está lleno de ignorancia. Y ānanda: está lleno de dicha. En el Vedānta-sūtra se dice, ānandamayo 'bhyāsāt (Vedānta-sūtra 1.1.12): “La Persona Suprema está siempre llena de dicha, abhyāsāt, de forma natural”. De modo que nuestro cuerpo, este cuerpo no es ānandamaya, por el contrario, está siempre lleno de miserias. Por eso, debemos distinguir el cuerpo de la Persona Suprema de nuestro cuerpo.

Cuando a veces en las Escrituras védicas se explica que Dios no tiene forma, eso no significa que Él no tenga forma. Él tiene una forma que es diferente de esta forma. Nirākāra. Nirākāra significa no este ākāra. Podemos distinguir. Porque el śāstra dice sac-cid-ānanda-vigrahaḥ (BS 5.1): “Eterno, bienaventurado y pleno de conocimiento”.

Él lo sabe todo. Como en el Bhagavad-gītā por ejemplo dice, vedāhaṁ samatītāni (BG 7.26). Kṛṣṇa dice: “Yo lo sé todo, pasado, presente y futuro”. Eso es conocimiento. En el Śrīmad-Bhāgavatam también dice, janmādy asya yataḥ anvayād itarataś ca artheṣu abhijñaḥ (SB 1.1.1). Abhijñaḥ: Él lo sabe todo.

En el Bhagavad-gītā también se dice: kṣetra-jñaṁ cāpi māṁ viddhi sarva-kṣetreṣu bhārata (BG 13.3). Kṣetrajñaḥ. Kṣetrajña significa el propietario del cuerpo, el dueño del cuerpo. Tal como ustedes son almas espirituales, los propietarios de sus cuerpos. También yo soy un alma espiritual, el propietario de mi cuerpo. En cierta medida conozco los dolores y los placeres de mi cuerpo. Y ustedes, hasta cierta medida, y digo “hasta cierta medida” porque no somos...

Aunque soy el propietario de este cuerpo, no sé cómo está actuando, como está funcionando, por qué hay dolor, por qué hay placer. Hay tantas cosas que no sabemos. Parcialmente lo sabemos, aunque yo sea el propietario. Si hay algún defecto en las funciones corporales, yo no puedo detectarlo. Tengo que ir a otra persona, a un médico.

Y, aunque soy el propietario de este cuerpo, no sé exactamente cómo funciona, cómo es que se encuentra feliz o se encuentra triste. Supongamos que lo sé todo, pero, aun así, no sé lo que está sucediendo en su cuerpo. Eso no me es posible.

Por eso, llegamos a la conclusión de que todos somos individuos. Somos individuos. Yo tengo mis dolores y mis placeres individuales, ustedes tienen sus dolores y placeres individuales. Ustedes son personas individuales, yo soy una persona individual. Y la Suprema Personalidad de Dios, Él también es una persona individual. Nityo nityānām. Esta es la información védica. Somos un número plural, nityānām. Cetanaś cetanānām: Él es la fuerza viviente suprema entre todas las demás fuerzas vivientes.

Por eso en el Bhagavad-gītā, se dice que cuando Kṛṣṇa estaba aconsejando a Arjuna en el campo de batalla, Él dijo: “Mi querido Arjuna, todas estas personas, tú y Yo y todas estas personas, no es que no existíamos en el pasado, ni tampoco es que vayamos a dejar de existir en el futuro”. Así que estas tres cosas se señalan: “Tú, Yo y todos estos soldados y reyes”. Todos ellos son individuos. Todos son personas individuales. Y Kṛṣṇa, la Persona Suprema, es también una persona individual.

Pero, ¿cuál es entonces la diferencia entre Kṛṣṇa y nosotros? Que Kṛṣṇa, como se explica en los Vedas, es eka, es una persona, número singular, vidadhāti kāmān. Eko bahūnāṁ vidadhāti kāmān. Él abastece las necesidades de la vida a todas estas entidades vivientes de número plural. Por eso, Él es el controlador supremo.

īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ
sac-cid-ānanda-vigrahaḥ
anādir ādir govindaḥ
sarva-kāraṇa-kāraṇam

Y Él es la causa de todas las causas. Es como yo he nacido, la causa es mi padre. Y la causa de mi padre, su padre, mi abuelo. Y si siguen buscando —su padre, su padre, su padre— llegarán a la persona original, Brahmā. Luego, si encuentran o intentan averiguar quién es la causa de Brahmā, encontrarán que su causa es el Garbhodakaśāyī Viṣṇu.

¿Y cuál es la causa de Garbhodakaśāyī Viṣṇu? Entonces encontrarán a Kāraṇa, Kāraṇodakaśāyī Viṣṇu. Y la causa de Kāraṇodakaśāyī Viṣṇu, es Saṅkarṣaṇa. De esta manera, encontrarán, en última instancia, a Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios, la causa de todas las causas. Y Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā:

ahaṁ sarvasya prabhavaḥ
mattaḥ sarvaṁ pravartate
iti matvā bhajante māṁ
budhā bhāva-samanvitāḥ

“Yo soy la causa de todas las causas”.

El Vedānta-sūtra dice: “¿Quién es la Verdad Absoluta?” Athāto brahma jijñāsā. El Vedānta-sūtra significa preguntar acerca de la Verdad Absoluta. La forma de vida humana está hecha para preguntar acerca de la Verdad Absoluta. Jīvasya tattva-jijñāsā. Ese es el deber de la forma de vida humana. Es un tema muy amplio.

Y, este nacimiento humano, esta forma de vida humana, lo hemos logrado después de tantas evoluciones: seres acuáticos, luego árboles, luego plantas, luego insectos, luego pájaros, luego mamíferos. Hasta que llegamos al plano de la vida humana, sobre todo los seres humanos civilizados. Y especialmente si han nacido en la India.

Por esta razón, Caitanya Mahāprabhu dijo que el pueblo de la India tiene una misión especial. Él dijo: bhārata-bhūmite manuṣya-janma haila yāra (CC Adi 9.41). Cualquiera que tenga la suerte de nacer en Bhārata-varṣa, janma sārthaka kari 'kara paropakāra. Paropakāra. Indio...

Los hindúes están destinados a hacer actividades de bienestar para los demás. Porque en la India tienen la cultura que es la verdadera cultura humana. Cultura humana significa comprender a Dios, comprender a Kṛṣṇa, eso es la cultura humana. De no ser así, si simplemente mejoran los cuatro principios de la vida animal, eso no es cultura.

Āhāra-nidrā-bhaya-maithunaṁ ca sāmānyam etad paśubhiḥ narānām (Hitopadeśa). Comer: el animal come y nosotros también comemos. Y el hecho que hagamos alguna mejora en el tema de la alimentación, eso no significa avance de la civilización. Lo mismo en lo que se refiere a dormir, el perro se echa en el suelo, nosotros nos acostamos en una hermosa cama de seda y un apartamento muy bonito, y pensamos que esto es un avance de la civilización. No. Esto no es avance de la civilización. El avance de la civilización consiste en preguntarse: “¿Por qué me veo sometido a las leyes materiales?”.

Janma-mṛtyu-jarā-vyādhi-duḥkha-doṣānu-darśanam (BG 13.9). Estamos todos complicados... todo mundo está tratando de vivir. Nadie quiere morir, nadie quiere nacer. Tenemos miedo de morir y tener que volver a entrar en el vientre de una madre. Pero la clase de personas menos inteligentes, debido a que no pueden encontrar ninguna solución, ellos lo borran: “Oh, no hay vida después de la muerte”. No. Eso no es así. Eso no es así. Hay vida. En el Bhagavad-gītā lo encontrarán:

dehino 'smin yathā dehe
kaumāraṁ yauvanaṁ jarā
tathā dehāntaraṁ-prāptir
dhīras tatra na muhyati

Tathā dehāntaraṁ-prāptir. Es como en esta vida hemos recibido diferentes tipos de cuerpo. Yo era un niño, era un muchacho, era un hombre joven, yo... he sido otras cosas. Ahora tengo este cuerpo anciano. Y, tal como exista después de pasar por tantas fases diferentes del cuerpo, por lo tanto, la conclusión debe ser que después de la aniquilación de este cuerpo, yo seguiré existiendo, lo que se confirma en el Bhagavad-gītā: na hanyate hanyamāne śarīre (BG 2.20). Nityaḥ śāśvato 'yaṁ na hanyate hanyamāne śarīre.

Después de la destrucción de este cuerpo, en realidad no vamos a morir. Nuestro cuerpo sutil, la mente, la inteligencia y el ego, continúa funcionando. El cuerpo sutil del mismo modo que continúa activo mientras yo duermo, de manera similar, este cuerpo puede ser... el cuerpo denso puede ser aniquilado, pero mi cuerpo sutil me lleva a otro cuerpo denso conforme a mi deseo. Kṛṣṇa, el Señor Supremo, es muy bondadoso. Y Él conforme a nuestros deseos, nos da la oportunidad.

Cualquier tipo de cuerpo, cualquier tipo de disfrute que queramos, Él nos da la oportunidad: “Muy bien, toma este cuerpo. Y has querido disfrutar de esa forma. Muy bien, disfruta”. Mattaḥ smṛtir jñānam apohanaṁ ca (BG 15.15). Sarvasya cāhaṁ hṛdi sanniviṣṭaḥ. Él está en el corazón de todos en la forma de Súperalma, e incluso si nosotros lo olvidamos, Él recuerda: “Mi querida entidad viviente, tu querías hacer esto, ahora hazlo”.

Y ese es el proceso que está en marcha. Pero por desdicha, no hay un sistema educativo en todo el mundo acerca de las actividades del alma, cómo funciona a través de diferentes procesos evolutivos, cuál es su objetivo final en la vida, de dónde viene, a dónde ha ido, cuál es la relación. Tantas cosas que tenemos que saber. Pero estamos en la ignorancia debido a los líderes ciegos. No conocemos los verdaderos problemas de la vida. Somos ciegos y somos guiados por otros líderes ciegos, a un estado de mayor ceguera. Viśatāṁ tamisraṁ punaḥ punaś carvita-carvaṇānām.

matir na kṛṣṇe parataḥ svato vā
mitho 'bhipadyeta gṛha-vratānām
adānta-gobhir viśatāṁ tamisraṁ
punaḥ punaś carvita-carvaṇānām

Adānta-gobhiḥ. Nuestros sentidos no están controlados, de modo que esos sentidos nos están arrastrando a la región más oscura de la existencia. Eso no lo sabemos. Pero simplemente estamos masticando lo ya masticado. No intentamos resolver el problema de la vida, nos limitamos a masticar lo ya masticado. Las supuestas sociologías, política o las labores humanitarias, no es más que masticar lo ya masticado... como estamos tratando de abrir un hospital. Pensamos que es una labor imponente. Pero podemos... no sabemos cómo liberarnos de está condición de vida enferma, janma-mṛtyu-jarā-vyādhi (BG 13.9).

Y hay tantas cosas, problemas de nuestra vida, que estamos pasando por alto. Y todo se explica con gran claridad en el Bhagavad-gītā. Y es la Suprema Personalidad de Dios Mismo quien lo explica. Debemos aprovechar estas lecciones en el Bhagavad-gītā. Desafortunadamente, en el extranjero, antes que yo, fueron muchos otros svāmīs, que trataron de explicar el Bhagavad-gītā. El Bhagavad-gītā es un libro de conocimiento muy conocido. En América, Europa y en otros países hay muchas traducciones. Pero esas traducciones del Bhagavad-gītā, se han hecho como especulaciones mentales.

Ellos no se plantean seriamente que: “Esto que está aquí escrito es la declaración de la Suprema Personalidad de Dios Kṛṣṇa, y yo con mi pobre conocimiento no lo puedo comentar. ¿Quién soy yo en comparación con Kṛṣṇa? Él es tri-kāla-jña. Él conoce el presente, el pasado, el futuro, todo. Y ¿yo qué sé? De modo que mi interpretación…”. Como “Kurukṣetra significa este cuerpo”, o “los cinco Pāṇḍavas significan los cinco sentidos”. Si interpretamos de esa manera el Bhagavad-gītā, de acuerdo con nuestros caprichos, nunca entenderemos cuál es el significado del Bhagavad-gītā. Tenemos que aprender el Bhagavad-gītā tal como es, porque si no, perderemos la oportunidad.

Es como Kurukṣetra. Kurukṣetra es un lugar que todavía está allí, que existe. Todos, todos ustedes lo conocen. Cuando se va de Delhi hacia el Punjab, se pasa por el Kurukṣetra. Ese campo está todavía allí. Es un campo muy grande, y en el śāstra, en los Vedas, se explica, kurukṣetre dharmam ācaret. La gente lo visita como un lugar de peregrinaje. Y no pueden interpretar Kurukṣetra de otra manera. Kurukṣetra debe ser aceptado tal como se define en el Bhagavad-gītā: dharma-kṣetre kuru-kṣetre (BG 1.1). De ese modo entenderán el Bhagavad-gītā.

Todo está ahí. Nosotros queremos pedirles: todos ustedes son caballeros y damas respetables, los aquí presentes, que por favor traten de leer el Bhagavad-gītā tal como es. Entonces podrán entender los problemas de su propia vida, y encontrarán ahí la solución también. La solución está ahí, y el fin último de que el Bhagavad-gītā se haya hablado: sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66). Esa es la solución final, que tenemos que entregarnos a la Suprema Personalidad de Dios. Ese es nuestra...

Porque todos nosotros, en esta condición material, estamos tratando de ser el amo, en última instancia, tratamos de ser Dios. Y eso es māyā, eso es ilusión. No podemos ser el amo. Somos sirvientes por constitución. Todos los que estamos aquí reunidos somos sirvientes de alguien. Nadie puede negarlo. Podemos ser sirvientes de la familia o de la comunidad o del país o... tantas cosas... si uno no tiene amo, entonces tiene un perro para convertirse en su sirviente. Esa es nuestra naturaleza. Todos somos sirvientes. Cuando pensamos: “Yo seré el amo”, eso es māyā.

De modo que nuestro objetivo supremo de la vida es llegar a nuestro propósito original, llegar a ser sirvientes de Dios. Esa es nuestra perfección en la vida. Eso se llama mukti. En el Śrīmad-Bhāgavatam se dice: muktir hitvā anyathā rūpaṁ svarūpeṇa vyavasthitiḥ (SB 2.10.6). Mukti significa que abandonamos nuestra forma de vida artificial. La forma de vida artificial significa que estamos tratando de ser el amo. Eso es artificial. No somos el amo. Constitucionalmente somos sirvientes. Pero esa servidumbre está vinculada al servicio del Señor Supremo. Kṛṣṇa dice, mamaivāṁśo jīva-bhūtaḥ (BG 15.7): “Todas las entidades vivientes, son mis partes integrales”. Es como este dedo es la parte integral de su cuerpo, del mismo modo, también nosotros somos partes integrales del cuerpo de la Suprema Personalidad de Dios. Hay tantas descripciones. Es algo que lleva mucho tiempo. No deseo tomar demasiado de su tiempo. Los...

Es como una parte de nuestro cuerpo es esta cabeza, el brazo es otra parte del cuerpo, el estómago también es una parte del cuerpo y otra parte del cuerpo son las dos piernas. Y, la cabeza se considera la parte brahmínica de la sociedad, y los brazos son la parte kṣatriya de la sociedad, el estómago es la parte vaiśya del cuerpo social, y las piernas son śūdras. Y en el Bhagavad-gītā se dice, cātur-varṇyaṁ mayā sṛṣṭaṁ guṇa-karma-vibhāgaśaḥ (BG 4.13).

Y, tal como ustedes requieren mantener su cuerpo completamente en forma, necesitan su cabeza, sus brazos, su estómago, no hay nada inferior o superior. Por supuesto, comparativamente, vemos que la cabeza es más importante que la pierna, pero también no se puede funcionar sin la pierna. Tampoco pueden prescindir de la cabeza. Todo se requiere en el cuerpo social. Por eso, Kṛṣṇa dice: cātur-varṇyaṁ mayā sṛṣṭaṁ guṇa-karma-vibhāgaśaḥ.

Así que este sistema social científico, indica que haya una clase, clase inteligente de hombres, que sea la cabeza de la sociedad. Los administradores deben ser la clase de hombres guerrera, la clase de espíritu marcial. Y la clase productiva, los comerciantes y los industriales, deben ser el estómago de la sociedad. Y la clase trabajadora, deben ser las piernas de la sociedad. Esta es la idea que obtenemos del Śrīmad-Bhāgavatam. De modo que, si tratamos de seguir las declaraciones ya de por sí perfectas en los śāstras, y si las aplicamos en nuestra vida práctica, entonces toda la sociedad humana será perfecta. De lo contrario, si no seguimos la instrucción que es perfecta, que ya existe en los śāstras —si fabricamos o inventamos— el orden social nunca será perfecto y siempre habrá una confusión.

Y eso es lo que ocurre. Lo he visto. He viajado por todo el mundo, especialmente en América. Los Estados Unidos son el país más rico, pero ahora hay tanta confusión. A los más jóvenes no les gusta vivir como sus padres o abuelos. Quieren un cuerpo distinto, una vida distinta. Ellos se están uniendo a este movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa porque están en busca de tal cosa, algo perfecto. Están hartos de esta forma de vida materialista. Y por eso... no es que yo me dedique a hacer magia. Es una necesidad de la situación actual, de la civilización actual, que la gente quiera la conciencia de Kṛṣṇa, quiere avance espiritual.

De modo que, si podemos administrar el avance espiritual en la vida de la manera apropiada, tal como se expone en nuestras Escrituras védicas, entonces podemos aportar la mayor contribución al mundo, y eso será una gran gloria para el nombre de la India. Si simplemente los imitamos, o les suplicamos, entonces la posición de la India siempre es la de mendigo.

Porque ya somos conocidos: “La nación de los mendigos”. Porque nuestros ministros van allí para preguntar: “Por favor, denme esto. Por favor denme esto. Por favor denme”. Nada que aportar. Aquí hay una cosa, conciencia de Kṛṣṇa. Podemos contribuir a todo el mundo. Por favor, ayuden a este movimiento.

Muchas gracias. (aplausos) (fin)

Transcripción: Fabián Galván - México

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