Clase de Su Divina Gracia
A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Los perros y los gatos no necesitan a Freud
Bhagavad-gītā 2. 19-20
Londres, 25 agosto 1973
[Original en inglés]
[Original en inglés]
Pradyumna: “Tanto el que cree que la
entidad viviente es la que mata como el que cree que ésta es matada, carecen de
conocimiento, pues el ser ni mata ni es matado”.
Prabhupāda:
ya enaṁ vetti hantāraṁ
yaś cainaṁ manyate hatam
ubhau tau na vijānīto
nāyaṁ hanti na hanyate
[Bg. 2.19]
[Bg. 2.19]
na jāyate mriyate vā kadācin
nāyaṁ bhūtvā bhavitā vā na bhūyaḥ
ajo nityaḥ śāśvato ’yaṁ purāṇo
na hanyate hanyamāne śarīre
[Bg. 2.20]
[Bg. 2.20]
“Para
el alma no existe el nacimiento ni la muerte en ningún momento. Ella no ha
llegado a ser, no llega a ser y no llegará a ser. El alma es innaciente, eterna,
permanente y primordial. No se la mata cuando se mata al cuerpo”.
Kṛṣṇa
está tratando de convencernos de diversas maneras de que el alma es inmortal,
de diversas maneras. Ya enaṁ vetti hantāram [Bg. 2.19]. Cuando hay una batalla y si se mata a alguien... Kṛṣṇa dice
que si alguien piensa que “está persona ha matado a esta otra”, o “esta persona
puede matar a esta otra”; ese tipo de conocimiento no es perfecto. Nadie mata a
nadie. Así que los carniceros podrían decir que “¿entonces por qué se quejan de
que nosotros matamos?”. Ellos están matando el cuerpo, pero si hay un
mandamiento que dice que “No puede matar”, “no matarás”, entonces no puede
matar. Eso significa que tampoco usted puede matar el cuerpo sin la debida
autorización, no puede matar. Aunque no es el alma lo que muere, sino que lo
que se mata es el cuerpo, no puede matar el cuerpo sin la debida aprobación;
eso es pecaminoso. Por ejemplo, hay un hombre que vive en un apartamento, y de
alguna manera usted lo saca de ahí, de una forma ilegal lo saca de ese
apartamento. El hombre saldrá de allí y se refugiará en algún otro sitio. Es así.
Pero usted, por haberlo sacado de un lugar que le correspondía legítimamente,
es un delincuente. No puede decir: “Bueno, yo le he sacado pero ya ha
encontrado otro lugar”. No, usted tiene razón, encontrará otro lugar pero no
tiene derecho a sacarlo. Él estaba en su perfecto derecho a vivir en aquel
apartamento, y usted, por haberle expulsado a la fuerza es un delincuente y
merece un castigo.
Ante
este argumento, los carniceros, los que matan animales o cualquier tipo de
persona que mate, no puede poner ningún otro argumento. No pueden decir que: “Aquí
en el Bhagavad-gītā dice que el alma no es matada nunca, na anyate
anyamāne śarīre
[Bg. 2.20], ni siquiera después de destruir el cuerpo, ¿por
qué, entonces, se quejan de que nosotros matemos?”. Ése es el argumento, que
usted no puede matar ni siquiera el cuerpo, porque no se permite, porque es
pecaminoso. Ubhau tau na vijā nīto nā yaṁ hanti na
hanyate. Nadie
mata a nadie ni nadie es matado por nadie. Eso es una cosa, y de nuevo, de una
manera distinta, Kṛṣṇa vuelve a decir, na jāyate. La entidad viviente nunca nace,
el nacimiento y la muerte corresponden al cuerpo. La entidad viviente, la
chispa espiritual que es parte integral de Kṛṣṇa, del mismo modo que Kṛṣṇa no
nace ni muere. Ajo ‘pi sann avyayātmā, lo verán en el Capítulo Cuatro.
Ajo
‘pi, Kṛṣṇa es aja, y aja significa que nunca nace. De
forma similar, nosotros como partes integrales de Kṛṣṇa, tampoco nacemos nunca.
El nacimiento y la muerte son del cuerpo, pero nosotros estamos tan absortos en
el concepto corporal de la vida que cuando se produce el nacimiento o la muerte
del cuerpo sentimos esos dolores y placeres. Por supuesto, placer no hay; el
nacimiento y la muerte son muy dolorosos porque, esto ya lo hemos explicado, la
conciencia del alma se extiende por todo el cuerpo. Por eso, los dolores y los
sufrimientos y los placeres se sienten en relación con el cuerpo. Y Kṛṣṇa ya ha
aconsejado que esa clase de dolores y de placeres, mā trā-sparśās
tu kaunteya [Bg. 2.14], que se refieren solamente a la piel, no hay que molestarse
demasiado por ellos. Taṁs titikṣasva bhārata, de este modo, si pensamos
acerca de nuestra posición en la autorrealización, en que somos diferentes del
cuerpo, ésta es la verdadera meditación. Si pensamos con gran sinceridad acerca
de nosotros mismos y acerca del cuerpo, esto es autorrealización. Autorrealización
significa que yo no soy el cuerpo, que yo soy ahaṁ brahmāsmi, que yo soy alma espiritual. Eso
es autorrealización.
Na jāyate na mriyate vā kadācit. Kadācit significa en ningún momento
pasado, presente y futuro, kadācit. En el pasado, ya lo hemos
explicado, hemos existido, tal vez en un cuerpo distinto; en el presente
existimos y también existiremos en el futuro, continuaremos existiendo tal vez
en un cuerpo distinto, o tal vez no realmente. Tathā dehāntara
prāptiḥ [Bg. 2.13], porque después de abandonar el cuerpo tendremos que aceptar
otro cuerpo. Así está ocurriendo. Y la ignorancia, sin conocimiento del ser,
permanecemos bajo la influencia de la ignorancia. El supuesto sistema
educativo, en todo el mundo falta, no existe esa educación. Se mantienen en la
oscuridad y en la ignorancia, y aun así, se gasta tanto dinero especialmente en
Occidente. Se gastan mucho dinero, enormes universidades y escuelas superiores,
y ¿qué producen? Necios y sinvergüenzas, eso es todo. Porque no saben, no
tienen la menor idea acerca del ser. Y sin ese conocimiento... conocimiento
significa autorrealización, “yo no soy el cuerpo, sino alma espiritual”, eso es
conocimiento. Y el conocimiento de cómo comer, dormir, defenderse, cómo
disfrutar de la vida sexual, y grandes cantidades de libros sobre esos temas,
eso no es conocimiento. Son cosas que las saben hasta los perros y gatos; los
perros y los gatos no se han leído nunca la filosofía de Freud, pero saben muy
bien cómo disfrutar de la vida sexual.
Ésa
filosofía de perros no les servirá de nada: “Oh, ahora tengo este cuerpo y debo
aprender a disfrutar de la vida sexual del cuerpo”. Es la filosofía del perro.
El perro sabe todas esas cosas. Su filosofía debe ser cómo absteneros de la
vida sexual, eso es conocimiento. Tapo divyaṁ [SB 5.5.1], tapasya. La vida humana es para tapasya, para abstenerse del placer de
los sentidos; eso es conocimiento, y no para aprender a disfrutar de la vida
sexual por el placer sexual; eso lo saben hasta los perros y los gatos sin
ninguna educación, sin ninguna filosofía. Es la filosofía, pravṛttiḥ
eṣaṁ bhūtānāṁ nivṛtes tu mahā-phalam.(?) Pravṛtti significa que cada entidad
viviente tiene su pravṛtti, su tendencia. Y, ¿cuál es esa tendencia? El
disfrute de los sentidos. Loke vyavāya ’miṣa mada-sevā nityas
tu jantuḥ(?) Jantuḥ significa ser viviente. Nitya, siempre tiene la tendencia; vyavāya āmiṣa
mada-sevā. Vyavāya
significa vida sexual, y āmiṣa significa comer carne. Vyavā ya āmiṣa,
mada-sevā, intoxicación.
Son instintos naturales de todas las entidades vivientes, son tendencias que están
hasta entre las hormigas. Los que han estudiado saben que hasta las hormigas
tienen grandes deseos de intoxicarse, por eso buscan dulce, azúcar. Los dulces
son embriaguez; tal vez todos ustedes lo saben, el alcohol se hace a partir del
azúcar, el azúcar se fermenta con ácido, ácido sulfúrico, y a continuación se
destila; eso son las bebidas alcohólicas. Por eso se prohíbe comer demasiados
dulces.
Loke vyavā ya āmiṣa mada-sevā nityas tu
jantuḥ, es una
tendencia. Vida material significa que todas las entidades vivientes tienen
esas tendencias, pero es necesario restringirlas. Pratṛttiḥ
eṣaṁ bhūtānām,
es un instinto natural, pero si usted puede detenerlas, eso es su gran mérito.
Eso se llama tapasya. Tapasya significa que tengo alguna
tendencia natural, pero que no es buena; no es buena en el sentido de que si
cultivamos esa tendencia tendremos que recibir otro cuerpo material, es la ley
de la naturaleza. Hay un verso, pramattaḥ. ¿Cómo se llama ése? Me estoy
olvidando, que todo el mundo está loco, loco en busca del placer de los
sentidos. Na sādhu manye yata ātmano ’yam asann api kleśada āsa
dehaḥ. Mientras mantengamos esta
tendencia al disfrute de los sentidos, tendremos que recibir otro cuerpo. Eso
es el nacimiento y muerte; mientras sigamos así. Por lo tanto el proceso debe
consistir en reducir a cero todas esas tendencias; ésa es la perfección, no el
realzarlas. Nūnaṁ pramattaḥ kurute vikarma yad
indriya-prītaya āpṛṇoti
[SB 5.5.4]. Nūnam, hay en verdad estos locos. Los
que viven en busca de satisfacer estas tendencias: vyavā ya āmiṣa
mada-sevā, vida
sexual, embriaguez y comer carne, están locos; son todos locos. Pramattaḥ.
Nūnaṁ pramattaḥ kurute vikarma [SB 5.5.4]. Vikarma significa actividades prohibidas.
Vemos que por esas tres cosas, āmiṣa-mada-sevayā, por vida sexual, por comer
carne y por beber, la gente trabaja; no solo trabajan sino que hacen trabajos
deshonestos, cómo hacer dinero, cómo hacer dinero, el mercado negro, el mercado
blanco, esto aquello, sólo por estas tres cosas, āmiṣa-mada-sevayā. Comer carne, intoxicación
(cinta dañada). ¿Por qué? āmiṣa-mada-sevayā. Simplemente por sexo, comer
carne y embriagarse, āmiṣa-mada-sevayā. En la literatura védica, existe
un estudio analítico, no de ahora, sino de hace mucho tiempo. ¿Lo ven? Es la
inclinación natural. La creación no es nueva.
Ha
habido muchas, muchas creaciones. Los registros están ahí, muchas creaciones. Por
eso, nūnaṁ
pramattaḥ kurute vikarma yad indriya-prītaya āpṛṇoti [SB 5.5.4]. Ésa es la instrucción de Riṣabhadeva a sus hijos: “Mis
queridos hijos, no se dejen descarriar, esos necios y sinvergüenzas han
enloquecido tras esas cosas, el comer carne, la intoxicación, la embriaguez, y
la vida sexual”. Na sādhu manye, no tiene nada de bueno. Na sādhu
manye, yo no lo permito, yo no digo
que es bueno, no tiene nada de bueno. Nasā dhu manye. “¿Por qué no es bueno?, estamos
disfrutando de la vida”. Si, están disfrutando ahora, pero yata ātmano
’yam asann api kleśada āsa dehaḥ, mientras continúen con esas cosas tendrán que
recibir un cuerpo, y cuando reciban un cuerpo tendrán que pasar por el
nacimiento, por la muerte, por las enfermedades y por ¿cómo se llama?, la
vejez; van a sufrir, van a sufrir. Pero su verdadera posición es na jāyate. Ustedes no deben tomar
nacimiento, pero se han condicionado a tener que nacer; en realidad su posición
es no tener que nacer, vida eterna. Del mismo modo que Kṛṣṇa es eterno, todos
nosotros somos eternos, porque somos partes integrales de Kṛṣṇa, con las mismas
cualidades. Del mismo modo que Kṛṣṇa es sac-cid-ānanda-vigrahaḥ, [Bs. 5.1], Él tiene una forma,
una forma trascendental, una forma eterna, llena de conocimiento, llena de
felicidad; también nosotros tenemos las mismas cualidades. Y por eso decimos na jāyate. Este problema no lo puede
entender esta civilización desvergonzada, que yo soy eterno y que me veo en
esta condición de nacimiento y de muerte. Esto no lo entienden los sinvergüenzas,
los supuestos filósofos, los científicos, todos ellos son por lo tanto necios y
sinvergüenzas. Rechácenlos, rechácenlos inmediatamente. O el trabajar tan
arduamente, lo mismo, nūnam prammattaḥ kurute vikarma [SB 5.5.4], es como lo que hacen los locos. ¿De qué sirve el trabajo de
un loco? Está ocupado, muy ocupado día y noche, “estoy muy ocupado”. Pero, ¿qué
es usted, señor?, usted es un loco, se le ha partido el cerebro, está loco. ¿De
qué sirve todo su trabajo? Pero así está ocurriendo.
Así
que la conciencia de Kṛṣṇa, imaginen lo importante que es este movimiento; es
la mayor actividad benéfica para la sociedad humana. Son todos necios y sinvergüenzas,
y no tienen conocimiento, ignoran su posición constitucional y trabajan
arduamente y sin necesidad día y noche. Por eso se les califica de mūḍha. Mūḍha significa asnos. El asno trabaja
día y noche para el lavandero por un poquito de hierba. Hierba hay por todas
partes, pero aun así, el asno piensa que “si no trabajo para el lavandero, si
no me esfuerzo mucho no tendré la hierba”. Eso es un asno. Por eso, cuando se
cultiva conocimiento se adquiere una cierta inteligencia, esa inteligencia se
adquiere poco a poco. Primero brahmacārī; después, ¿que no puede
permanecer como brahmacārī? Muy bien, cásese, gṛhastha. Después déjelo, vānaprastha; y después entra en la orden de sannyāsa. Ése es el proceso. Los mūḍhas trabajarán arduamente día y
noche, para complacer los sentidos. Por eso en determinado período de la vida,
se debe dejar de lado esa estupidez y entrar en la orden de sannyāsa. No, se acabó. Eso es sannyāsa, y entonces, esa parte de la
vida debe dedicarse completamente al servicio de Kṛṣṇa. Eso es verdadero sannyāsa.
Anāśritaḥ karma-phalaṁ kāryaṁ karma karoti yaḥ. Mi deber es servir a Kṛṣṇa, soy
un sirviente eterno de... kāryam. Tengo que hacerlo, tengo que
servir a Kṛṣṇa. Ésa es mi posición, eso es sannyāsa. Anāśritaḥ
karma-phalaṁ kāryam karma karoti yaḥ [Bg. 6.1]. Los karmīs esperan algún buen resultado
para complacer los sentidos, eso es karmī; y sannyāsa significa que también ellos
trabajan arduamente, pero no por complacer los sentidos, por satisfacer a Kṛṣṇa;
eso es sannyāsa, eso es sannyāsa y karmī. El karmī también trabaja arduamente,
siempre más, cada vez más intensamente, pero todo para āmiṣa-mada-sevā.
Āmiṣa mada-sevā. Vyavāya,
solo por la vida sexual, por comer carne y por embriagarse. Y el devoto trabaja
del mismo modo, arduamente, intensamente, pero para satisfacer a Kṛṣṇa. Ésa es
la diferencia. Y si ustedes, una vida anterior hacían esto, no más placer de
los sentidos, simplemente dedíquense a Kṛṣṇa, entonces llegarán a esta posición,
na
jāyate, no más
nacimiento y no más muerte. Porque su posición es na jāyate
na... Ésta es su verdadera posición.
Pero debido a que están bajo la influencia de la ignorancia, pramattaḥ, se han vuelto locos, han
enloquecido, por eso han emprendido este proceso de complacer los sentidos, y
por eso están enredados en un cuerpo material que cambia y eso se llama
nacimiento y muerte.
Si
lo quieren detener, si quieren acabar con el nacimiento y la muerte, no se
entreguen, no sean indulgentes con el placer de los sentidos porque entonces se
enredarán de nuevo.
nūnaṁ pramattaḥ kurute vikarma
yad indriya-prītaya āpṛṇoti
na sādhu manye yata ātmano 'yam
asann api kleśada āsa dehaḥ
[SB 5.5.4]
“Muy
bien, este cuerpo va a durar sólo unos años, le llegar su fin”. Y eso es
cierto, se terminará pero tendrán que recibir otro cuerpo. El cuerpo, tener que
aceptar o recibir otro cuerpo, tendrán que hacerlo porque tienen deseos, tienen
el deseo de complacer los sentidos. Y el placer de los sentidos significa que tienen
que tener sentidos materiales a los que dar placer. Kṛṣṇa está tan complacido, tan
misericordioso; no, no está complacido, pero es muy misericordioso: “Muy bien,
este sinvergüenza quiere eso, vamos a dárselo, muy bien”. “Este sinvergüenza
quiere comer excremento, muy bien, vamos a darle un cuerpo de cerdo”. Así
ocurre, es la ley de la naturaleza.
Este
conocimiento, el conocimiento del Bhagavad-gītā es de lo más perfecto para la
sociedad humana, y Kṛṣṇa quiere que este conocimiento se propague, porque todo
el mundo, sarva-yoniṣu kaunteya sambhavanti mūrtayah... [Bg. 14.4]. Él es el padre que aporta la simiente. Y el padre es un bienhechor,
un amigo, un bienqueriente natural. Él piensa: “Estos sinvergüenzas están
sufriendo, prakṛti-sthāni. Manaḥ ṣaṣṭhānīndriyāṇi prakṛti-sthāni
karṣati [Bg. 15.7], simplemente guiados por la especulación mental, manaḥ, y asistidos por los sentidos, están
luchando tanto; y si regresan a Mi pueden vivir tan bien, pueden ser Mis
amigos, Mis amantes, Mi padre, Mi madre, en Vṛndāvana, así que rescátales, llámales”.
Y por eso Kṛṣṇa viene. Yadā yadā hi dharmasya [Bg. 4.7]. El mundo entero corre siguiendo esta falsa impresión del
disfrute de los sentidos, por eso Kṛṣṇa viene y nos aconseja, sarva-dharmān
parityajya [Bg. 18.66], ustedes sinvergüenzas, abandonen todos esos empeños, no estén
orgullosos de su progreso científico, son todos sinvergüenzas, abandonen esa
estupidez, vengan a Mí y Yo los protegeré”. Así es Kṛṣṇa, Él es muy
misericordioso, y el sirviente de Kṛṣṇa debe hacer eso mismo, no tiene que
volverse un gran yogui, un gran mago, eso no se necesita; lo único que tiene
que hacer es decir lo que dice Kṛṣṇa, entonces serán maestros espirituales. No
digan tonterías. También Caitanya Mahāprabhu dijo, yāre dekha
tāre kaja ‘kṛṣṇaupadeśa
[Cc. Madhya 7.128]. Simplemente predica la instrucción de Kṛṣṇa
a todo el que te encuentres, entonces serás un maestro espiritual. Eso es todo,
es algo muy sencillo. Muchas gracias. (Fin)