A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda
Día de Vyāsa-pūjā
El maestro espiritual es el representante de Vyāsa
El maestro espiritual es el representante de Vyāsa
Nueva Vrindavan, 2 septiembre 1972
Prabhupāda: (Prema-dhvani) Muchas gracias.
Devotos: Todas las glorias a
Śrīla Prabhupāda. (Reverencias)
Viṣṇujana: Las flores serán
ofrecidas al maestro espiritual en sucesión, empezando con los sannyāsīs, presidentes de templos y
etcétera. Y luego los visitantes están invitados a unirse para ofrecer flores a
los pies de loto del maestro espiritual. Por favor, no arrojen las flores
directamente sobre el cuerpo de Śrīla Prabhupāda, sino sobre sus pies de loto, por
favor. Y podríamos circunvalar, si lo desean. (Pausa)
Devotees: Jaya Śrīla Prabhupāda.
Prabhupāda: Siéntense. Hare
Kṛṣṇa (Japa) (Pausa)
Prabhupāda: (Cantando japa) Damas y caballeros, esta
ceremonia... Por supuesto, mis estudiantes saben lo que es esta ceremonia y
para los visitantes, para darles información, puedo informarles algo sobre esta
ceremonia. De lo contrario puede que se malinterprete. Una persona que no está
familiarizada puede pensar, “¿por qué se está adorando a una persona como a
Dios?”, y puede haber alguna duda, pero esta es la etiqueta. Esta ceremonia se
llama Vyāsa-pūjā. Vyāsa. Vyāsa se refiere al autor original de la literatura
védica. Él es una encarnación de Nārāyaṇa y nos dio todo el conocimiento
védico. Él recibió el conocimiento de Nārada y Nārada recibió el conocimiento
de Brahmā. Brahmā recibió el conocimiento de Kṛṣṇa y de esta manera, mediante
la sucesión discipular, obtenemos el conocimiento trascendental.
Y Vyāsadeva... Anteriormente, antes de Vyāsadeva, digamos, hace 5.000
años, antes de ese tiempo no había necesidad de literatura escrita. La gente
tenía una memoria tan aguda que todo lo que escuchaban del maestro espiritual
lo recordaban de por vida. Su memoria era tan aguda. Pero en esta era —que se
llama Kali-Yuga— hemos reducido nuestra fuerza corporal, nuestra memoria, el
poder de memorizar, nuestros sentimientos de simpatía por los demás, la
compasión, la edad, la duración de la vida, las propensiones religiosas. De
esta manera, en esta era lo estamos reduciendo todo. Cada uno de ustedes lo
puede entender muy fácilmente. Antes, si alguien atacaba otro hombre, muchas
personas venían a ayudarle: “¿por qué atacan a este hombre?”, pero en la
actualidad, si atacan a un hombre, los transeúntes no se preocupan por él
porque han perdido su simpatía o la misericordia por los demás. Nuestro vecino
puede morir de hambre, pero eso no nos importa. Pero antes la misericordia por
otras entidades vivientes, incluso por una hormiga... Tal como Mahārāja
Parīkṣit, que mientras viajaba por su reino vio que un hombre estaba tratando
de matar a una vaca. Parīkṣit Mahārāja lo vio e inmediatamente tomó su espada, “¿quién
eres tú? ¿Estás matando una vaca en mi reino?
Porque se supone que el rey, o se supone que el gobierno debe dar
protección a todos, y no que el gobierno es para dar protección al ser humano y
no a los animales. Porque es Kali-Yuga el Gobierno discrimina entre dos
entidades de la misma nación. De la misma nación significa que han nacido en la
misma tierra. A eso se le llama nacional. Es decir... Ya saben, todo el mundo.
Y los árboles también nacen en la misma tierra, los seres acuáticos también nacen
en la misma tierra. Las moscas, los reptiles, las serpientes, los pájaros, las
bestias, los seres humanos, todos nacen en esa misma tierra. Supongamos que su
tierra, América, los Estados Unidos... ¿por qué el gobierno debe dar protección
a una clase de entidades vivientes, rechazando a otras? Esto significa que han
perdido su misericordia por los demás. Esto es Kali-Yuga. Antes, antes de
Kali-Yuga, nadie mataba ni siquiera a una hormiga innecesariamente. Ni siquiera
a una hormiga. Hay muchos ejemplos. Un cazador se aprovechaba de matar
animales, pero cuando se volvió devoto no estaba dispuesto a matar ni siquiera
a una hormiga.
Y el movimiento de la conciencia de Kṛṣṇa es algo tan bueno que hace a
una persona perfecta en todo aspecto: perfecto en el conocimiento, perfecto en
la fuerza, perfecto en edad, todo. Necesitamos tantas cosas. Y esta perfección
de la vida, el proceso de cómo hacer la vida perfecta, desciende desde Kṛṣṇa.
Kṛṣṇa es el origen de todo y por lo tanto, el conocimiento de la perfección
también viene de Él, y de forma periódica, lo que significa después de millones
y millones de años -Kṛṣṇa viene. Él viene una vez cada día de Brahmā y los días
de Brahmā, incluso un día, el lapso de un día, es muy difícil de calcular. Sahasra-yuga-paryantam arhad yad brāhmaṇo
viduḥ [Bg. 8.17]. Un día de Brahmā significa alrededor de 433.000.000
millones de años. Así que en cada día de Brahmā Kṛṣṇa viene, una vez cada día.
Eso significa que Él viene después de un período de 433.000.000 millones de
años. ¿Por qué? Para dar el conocimiento perfecto de la vida, explicar cómo
debe vivir el ser humano para hacer su vida perfecta. Y está el Bhagavad-gītā que fue hablado por Kṛṣṇa
en este milenio, en este día. Ahora estamos pasando el día de Brahmā por el
vigésimo octavo milenio. No, vigésimo octavo... En un día de Brahmā hay 71
Manus, y cada Manu vive durante... Eso son también muchos millones de años,
setenta y dos milenios.
Pero ahora no estamos interesados en el cálculo del conocimiento
perfecto. Este conocimiento perfecto viene de Dios, o Kṛṣṇa, y se distribuye
por medio del sistema paramparā,
mediante la sucesión discipular. El ejemplo está justo aquí, un árbol de mango.
En la parte superior del árbol de mango hay una fruta muy madura, y esa fruta
se tiene que probar, pero si dejo caer la fruta, se perderá. Por lo tanto se va
entregando, uno lo entrega a otro, y después a otro, y después... Y así
desciende. Todos los procesos védicos de conocimiento se toman de la autoridad
y descienden a través de la sucesión discipular. Tal como, ya lo he explicado,
Kṛṣṇa da el conocimiento, el conocimiento perfecto, a Brahmā, y Brahmā da el
conocimiento a Nārada. Nārada da el conocimiento a Vyāsa. Vyāsa da el
conocimiento a Madhvācārya. Madhvācārya da el conocimiento a su sucesión
discipular, y más adelante, a Mādhavendra Purī. Mādhavendra Purī da ese
conocimiento a Īśvara Purī. Īśvara Purī da ese conocimiento a Caitanya
Mahāprabhu, el Señor Caitanya. Él entrega ese conocimiento a Sus discípulos
inmediatos, los seis Gosvāmīs. Los seis Gosvāmīs entregan el conocimiento a
Śrīnivāsa Acharya, a Jīva Gosvāmī. Luego Kavirāja Gosvāmī, luego Viśvanātha
Cakravartī, luego Jagannātha dāsa Bābājī, luego Bhaktivinoda Ṭhākura, luego
Gaura Kiśora dāsa Bābājī Mahārāja, luego mi maestro espiritual, Bhaktisiddhānta
Sarasvatī. Y nosotros estamos distribuyendo el mismo conocimiento.
Devotos: ¡Jaya Prabhupāda! ¡Haribol!
Prabhupāda: No fabricamos
conocimiento, porque ¿cómo podemos fabricarlo? Conocimiento perfecto significa
que yo debo ser perfecto. Pero yo no soy perfecto. Cada uno de nosotros, cuando
estaba hablando, porque... No somos perfectos porque en nuestra vida
condicionada tenemos cuatro defectos. El primer defecto es que cometemos
errores. Ninguno de los que estamos sentados aquí, ni nadie puede decir que no
ha cometido ningún error en la vida. No, eso es natural, “errar es humano”. En
nuestro país, incluso una personalidad como Mahātmā Gandhi, cometió tantos
errores. Así que cometer errores no es algo inusual. Es algo usual para
cualquier hombre. Y estamos bajo la influencia de la ilusión. Ilusión significa
aceptar una cosa por otra. Tal como, cada uno de nosotros aceptamos este cuerpo
como si fuéramos nosotros mismos, pero en realidad no lo somos, todo el mundo.
En este concepto corporal de la vida está todo el problema. Todo el problema
radica ahí en el mundo. Yo pienso, “soy de India”; ustedes piensan “americano”; él piensa “perro”; él piensa “gato”; debido a este concepto corporal de la
vida. Pero esto es ilusión porque yo no soy este cuerpo, y ustedes no son este
cuerpo. Porque en el momento de la muerte podemos entender que el cuerpo está
ahí, pero mis parientes están llorando, “Oh,
mi hijo se ha ido”, “mi padre se ha ido”.
¿Dónde se ha ido? El cuerpo está ahí. ¿Adónde se fue su padre? No. Entonces
podemos... Después de la muerte podemos entender que “mi padre o mi hijo no
eran este cuerpo. Eran algo más”, y esto se llama ilusión.
Así que, error, ilusión y engaño. Todos quieren engañar a los demás. Ese
es el trato. Supongan que somos hombres de negocios haciendo algún acuerdo. Yo
trato de hacer el acuerdo a mi favor; y ustedes tratan de hacer el acuerdo a su
favor. Pienso, “he engañado a esta persona. Soy tan inteligente”, ¿lo ven? La
propensión a engañar está presente, incluso cuando escondemos algo. Incluso
entre marido y mujer nos engañamos unos a otros, y qué hablar del hombre...
Incluso a veces entre padres e hijos, qué hablar de otro tipo de relaciones.
Así que la propensión a engañar es... Primero, cometemos errores, estamos bajo
la influencia de la ilusión, engañamos, y al final, todos nuestros sentidos son
imperfectos. Tal como, estamos muy orgullosos de ver. Todos dicen, “¿puede
mostrarme? Quiero ver”. ¿Pero qué pueden ver? ¿Cuál es su poder para ver? Por
la noche, si no hay Sol, ustedes no pueden ver, así que ¿de qué sirve que
puedan ver? Si hay una pared no se puede ver lo que está más allá de la pared.
Ustedes ven todos los días el Sol, y lo vemos como un pequeño disco. Pero en
realidad es 1.400 veces más grande que esta Tierra. Del mismo modo, no podemos
ver lo que se encuentra a una gran distancia. No podemos ver ni siquiera el
párpado, que está en realidad con los ojos, pero no podemos verlo. De esta
manera, si estudian cada uno de sus sentidos, encontrarán que son imperfectos.
Sus sentidos son imperfectos, engañan, están bajo la influencia de la
ilusión, y cometen errores. ¿Cómo pueden dar un conocimiento perfecto? Por lo
tanto, no aceptamos ningún conocimiento de una personalidad imperfecta. Y
porque se trata de un conocimiento imperfecto, ¿cuál es el uso de ese
conocimiento? Hacer teorías. No queremos teorías. Queremos conocer la realidad.
Eso es conocimiento perfecto y el conocimiento perfecto sólo puede venir de
Dios. Y alguien que distribuye ese conocimiento exactamente tal como Dios lo ha
dicho, es perfecto. Es como un cartero que viene y les entrega, digamos, 100
dólares. Él no está entregando esos 100 dólares. Un amigo suyo les ha enviado
100 dólares, y su deber es entregar esos 100 dólares tal como son, sin ningún
cambio, sin tomar ningún dólar de ello, no, ni añadirlo. Sin añadir, y sin
sustraer. Su honestidad, su perfección, es que les entrega esos 100 dólares que
les ha enviado su amigo. Esa es su honestidad..., la perfección. Puede ser
imperfecto de muchas otras maneras, pero si él hace su deber perfectamente, es
perfecto. Del mismo modo, nuestro, este Vyāsa-pūjā significa que recibimos un
conocimiento perfecto de Kṛṣṇa a través de la agencia del maestro espiritual.
Y este Vyāsa-pūjā se realiza un día al año, en el cumpleaños del maestro
espiritual, porque él es el representante de Vyāsa. Él está entregando el mismo
conocimiento que ha descendido a través de la sucesión discipular sin ningún
cambio, y por eso se le ofrece respeto. Eso se llama Vyāsa-pūjā. Y el maestro
espiritual recibe todo el honor, toda la contribución, en nombre de la Suprema
Personalidad de Dios, no para su persona. Tal como en nuestro país, cuando
estaba el gobierno británico, había un virrey, un representante del rey y
naturalmente, cuando el Virrey solía acudir a alguna reunión, mucha gente solía
presentar valiosas joyas, valiosas, sólo para honrarlo. Pero la ley era que el
virrey no podía tocar ni una sola de las joyas, ni tampoco cualquier
contribución. Iba al tesoro real. El virrey podía aceptar en nombre del rey
todo tipo de contribución, pero iba al rey. Del mismo modo, este día, el día
del Vyāsa-pūjā, sea cual fuere el honor, la contribución y los sentimientos que
se le ofrecen al maestro espiritual, es... Una vez más, así como hemos recibido
el conocimiento de arriba, de manera similar, este respeto también va de abajo
hacia arriba. Este es el proceso. Así como el maestro espiritual es el maestro
del estudiante, él tiene que enseñar al discípulo cómo devolver su respeto y
contribución a Dios. Esto se llama Vyāsa-pūjā.
Y al maestro espiritual se le respeta tanto como a Dios. ¿Por qué? Sākṣād-dharitvena samasta-śāstraiḥ. Ya
han cantado esta canción. Samasta-śāstraiḥ,
en todas las literaturas védicas. Samasta,
todas. Samasta significa todo. Śāstra significa literatura védica.
Todos los śāstras en la literatura
védica han declarado que el maestro espiritual es tan bueno como Dios. No es
Dios, sino tan bueno como Dios. Los māyāvādīs
piensan que el maestro espiritual también es Dios. No. Nosotros los vaiṣṇavas no aceptamos esa teoría. ¿Pero
en realidad cómo un hombre puede llegar a ser Dios? No. Pero debido a que él es
el representante de Dios, se le honra como a Dios, no porque se haya vuelto
Dios. Kintu prabhor yaḥ priya eva tasya.
Tal como si ustedes tienen un hijo muy querido. Si alguien acaricia a su hijo,
incluso si acaricia a su perro, ustedes se vuelven muy complacidos. Y el
maestro espiritual es un sirviente muy confidencial, es el perro de Dios. Por
lo tanto si pueden complacerlo, si pueden complacer al maestro espiritual,
entonces Dios está complacido. Tal como su pequeño niño. Si alguien complace a
ese niño, ustedes se vuelven automáticamente complacidos. Pueden complacer a
ese niño con una pastilla que vale dos centavos. Pero para complacerles a
ustedes pueden necesitar miles de dólares. Así que pueden terminar el asunto
sólo por ofrecer una pastilla.
Y esta es la posición del maestro espiritual. No malinterpreten y
piensen que “esta persona está sentada muy cómodamente y recibiendo todos los
honores y toda la contribución”. Esto es algo necesario para enseñarles a
respetar al representante de Dios. Esta es la suma y sustancia del Vyāsa-pūjā.
Muchas gracias. (Fin)
Devotees: ¡Jaya! Todas las
glorias a Śrīla Prabhupāda. (Los devotos ofrecen reverencias)
Prabhupāda: ¿Harán pequeño kīrtana? ¿Pequeño? (Pausa)
(Comentarios de fondo de los devotos que no se entienden)
Prabhupāda: Eso es todo.
Devotos: ¡Jaya! ¡Haribol! ¡Prabhupāda ki jaya! Todas las glorias al día de la
aparición. Todas las glorias. Haribol! Jaya!
(Los devotos ofrecen ruidosas reverencias)
(Viṣṇujana dirige kīrtana) (Pausa) (Fin)
Traducción: Nārāyaṇī devī dāsī – España